AbigailDespierto y lo único que escucho es el pitido que hace una máquina a mi lado y una sola mirada a mi alrededor me hace saber que estoy en el hospital.Sin embargo, no es como en las películas que la gente no recuerda qué ocurrió, yo, aunque no sé cómo llegué hasta aquí, si que recuerdo lo ocurrido en las últimas horas.Mis manos bajan a mi vientre y sujeto con fuerza sintiendo el miedo empezar a crecer. Mis ojos recorren el lugar con angustia mientras los recuerdos aparecen uno a uno en mi mente: el secuestro, Krista, los hombres, Christopher….Siento como mi latidos se aceleran de solo pensar que algo pudo pasarle aél o a mi bebé y el sonido de la máquina a mi lado me lo confirma, creo que estoy a punto de sufrir un ataque de pánico, sin embargo, en ese preciso momento la puerta es abierta y veo a Steven entrar en la habitación.Sus ojos se amplían al escucharme y veo cómo todo su semblante parece aliviado.—¡Has despertado al fin!—Christopher— digo de inmediato y más tarde m
ChristopherLas palabras de Abigail se repiten una y otra vez en mi mente: Me quiere. Ni siquiera sé en que momento pasó eso, pero Joder, escucharla mientras me lo decía hizo que mi pecho se oprimiera y cosas que prefiero no sentir despierten en mi interior.Sé, con mucha claridad, que lo que siento por la llorona es mucho más que atracción, antes lo sospechaba, pero en el momento en que su vida estuvo en riesgo, en ese preciso instante sentí que podría acabar con todo el maldito mundo con tal de volver a tenerla conmigo.Entonces lo supe. Tengo sentimientos hacia ella. Sentimientos que nunca antes he experimentado y que me tiene aterradoHemos regresado a casa al fin y eso es un alivio. Odio los hospitales. Hago una leve mueca porque mi brazo me sigue molestando, puede que la herida no haya sido profunda pero eso no significa que no duela, camino hacia el buró para tomar todo lo necesario para limpiar mi herida, cuando la puerta del baño se abre y una Abigail duchada y cambiada apar
AbigailEl último mes y medio ha sido demasiado silencioso. Mi ex ha sabido escabullirse y aunque ahora hay una investigación muy profunda sobre él, debo admitir que sus abogados han sabido mover sus fichas.Sin embargo, no se bien como va todo, porque últimamente he estado con la cabeza en otro lugar, pues por increíble que parezca mi empresa del exterior ha despegado de manera exorbitante. Ahora mismo tenemos 4 megacuentas con grandes empresas a las que les estamos manejando toda su imagen y además unas 7 cuentas medianas.El tiempo ha pasado demasiado rápido para mi gusto y aunque me niegue a admitirlo ha llegado el tiempo de irme. Tengo 3 meses y medio de embarazo actualmente y Steven dice que la panza puede simplemente crecer de un momento a otro, ya lo ha hecho, pero no es algo evidente, simplemente una hinchazón que parece natural, aunque hay veces que pienso que Chris lo ha notado.Él simplemente ve mi abdomen y en algunos instantes frunce el ceño antes de sacudir la cabeza.
Abigail Creo que el destino por primera vez me está viendo de buena manera. Hoy al llegar a la empresa junto a Christopher nos enteramos de que uno de los negocios que se hicieron antes del accidente había empezado a tener problemas y ¡sorpresa sorpresa!, dicho negocio está en Alemania. Además de esto los señores Rodríguez han viajado para reunirse con Christopher esta semana, lo que hace imposible que él viaje, por lo que me ofrecí a ir en representación suya. —Por supuesto que no. Siento como mi ceño se frunce al escucharlo y no dudo en cruzarme de brazos y mirarlo con ojos entrecerrados. —¿No crees que pueda manejarlo? Pensé que habías dicho que era capaz para trabajar contigo. Él suelta un gruñido enojado al escucharme y se pone en pie, antes de rodear el escritorio y detenerse enfrente mio. Sus ojos ahora mismo están fijos en los mios. —Anigail, hace menos de dos meses fuiste el blanco de un secuestro. El imbécil de tu ex está libre aún, ¿como quieres que permita que va
AbigailLos dos días han llegado a su final, pero puedo decir que fueron muy provechosos. El negocio de Christopher fue un éxito y la visita a la empresa me dejo totalmente satisfecha.Me he traído conmigo copias de todas las carpetas contables y las cuentas que se están trabajando, no porque dude o desconfíe, sino porque como dueña de la empresa es mi deber estar al tanto de todo.Estamos en el aeropuerto a instantes de abordar y me siento nostalgica. Esta dentro de poco va a ser mi ciudad de residencia, voy a dejar atrás a Londres y a Chris. Eso es algo a lo que aún no he podido hacerle frente.—Ese es nuestro vuelo— me dice Mel y solo ahí caigo en cuenta que ya nos han llamado.Asiento en su dirección y juntas subimos al avión. Christopher fue quien compró nuestros tiquetes, por lo que ahora estamos viajando en la linda cabina de primera clase.—Tu esposo ha ganado puntos al hacernos viajar así de cómodas— dice Mel mientras se recuesta de su asiento.—Se lo haré saber— le digo con
ChristopherLa casa se siente más silenciosa de lo normal cuando entro. Aunque tal vez se deba a que estoy llegando pasadas las nueve de la noche. No me di cuenta que se me había hecho tan tarde mientras estaba reunido con Annie y tampoco caí en cuenta que no volví a saber nada de Abigail.Haberme encontrado con Annie ha sido una completa casualidad, llevábamos al menos tres años sin vernos o saber nada el uno del otro.Somos primos. Fuimos muy unidos durante la niñez y adolescencia y cuando mis padres murieron ella fue quien más estuvo conmigo, sin embargo, al crecer la abuela y sus padres le dijeron que tenía que empezar a hacer frente a sus obligaciones con la familia.Querían casarla y ella no aceptó. Yo en su momento no entendí su negativa y me comporté, como es normal, como un completo imbécil y ella también dijo cosas que terminaron de alejarnos. Hasta hoy.Avanzo hasta que llego a la habitación y me sorprendo cuando al abrir encuentro a la llorona acostada y tapada con la sába
ChristopherUna llamada a medianoche nunca augura nada bueno. El cuerpo desnudo de Abigail está encima mío por lo que como puedo estiro mi mano y tanteo en la mesita de noche tomando el celular justo cuando este deja de sonar.Miro el remitente de la llamada perdida y me pongo alerta de inmediato al darme cuenta que se trata del topo que le hemos puesto al imbécil del ex de Abigail.Con cuidado de no despertarla ruedo el cuerpo de Abigail y me pongo en pie devolviendo la llamada. Espero una, dos, tres timbradas hasta que la voz se escucha al otro lado de la línea.—Señor Dimas, le tengo noticias.Siento como todo mi cuerpo está tenso mientras imagino distintos escenarios de lo que puede significar esta llamada.—Te escucho.—He conseguido las pruebas sobre los movimientos ilegales, tengo fotografías de él con líderes de la Mafia y copia de las ventas y lavados de activos que están haciendo por medio de la empresa.JODER. JODER. JODER. Esto es grande, es muy, pero muy grande. Tengo que
AbigailLos nervios mientras entrego el trabajo final de mi tesis poco tienen que ver con la calificación. Desde hace dos días cuando recibimos la llamada del topo he estado a la expectativa, esperando que el detective llame para decirnos que el momento de hacer el movimiento ha llegado.Además también he tomado la decisión de subastar el jade que me dio mamá para poder ayudar a las personas de la empresa que quedarán en el aire. La subasta se llevará a cabo hoy mismo en uno de los hoteles más exclusivos de la ciudad, Mel se ha encargado de todo.—Muy bien, Abigail, hasta ahora todo se ve correcto con su tesis, estaremos enviando observaciones, si tenemos, a su correo.Agradezco a los profesores y sin distraerme más camino directo hacia mi auto. Dejando salir un suspiro me subo al auto y empiezo a dirigirme hacia la empresa, la de Chris, hemos quedado en hablar sobre la última información dada por el topo y en lo que haremos a continuación.No demoro más de quince minutos para lleg