Liam tomó unos minutos para analizar lo que su madre le estaba diciendo, pero era claro que tantas calamidades al mismo tiempo no podían ser coincidencia, todo esto tenía que ser obra de James.

— ¿Están bien?, ¿Qué ocurrió?, ahora mismo tomaré un avión de regreso y…

— Nada de eso, tu padre y yo estamos bien, el presunto ladrón escapó al ver que tu padre sacaba un arma para defenderse.

— Estás segura de que ¿Están bien?

— Sí, de hecho, todo fue muy rápido y, como dato curioso en el forcejeo con tu padre, perdió el pasamontañas que tenía puesto y ya está identificado.

— ¿Qué dices?

— Ya la policía está detrás de él, lo curioso es que tiene un gran parecido a James, me lo recordó cuando era más joven, lo cierto es que tomaron huellas y en los videos de las cámaras de seguridad de la casa y ya están tras de él.

— Pero ¿Cómo no voy a estar con ustedes en una situación así?

— Nosotros estamos bien y tú tienes una tarea muy importante que es proteger a la mujer que amas, no vengas hasta que