Marina apretó su mejilla. "Vamos a comer, los gemelos y tu padre ya deben estar ahí, Ismael está en entrenamiento no volverá hasta tarde".
Los hijos de Marina eran unos gemelos idénticos, Mar y Luka eran muy parecidos a Erick, pero llevaban los mismos ojos que su madre, azul profundo como el mar, Ismael era el pequeño de la familia, estaba completamente dedicado al fútbol soccer, había sido seleccionado para un equipo profesional apenas unos meses atrás.
Se escuchó un ruido abajo. Marina fue al baño y se lavó las manos, al salir y secarlas tomó la mano de Gloria diciéndole. "Vamos creo que ya llegaron todos".
Juntas bajaron, los gemelos estaban entrando junto a su padre. Ellos trabajaban en la empresa, ambos eran muy exitosos y ayudaron a Erick a levantar todo el imperio después de que David se fuera.
Ismael todavía joven entró con su bolsa de deportes acababa de terminar un entrenamiento y pidió un permiso para estar en casa y ver a su hermano David.
“Hola mamá”. Saludo a sus padres y a sus hermanos. “Pedí permiso para estar aquí cuando llegara David”.
Marina feliz abrazó a su hijo. “Es bueno tenerlos a todos en casa”.
Mar se acercó a su madre y apretó su mano feliz, Marina había sido una gran mamá en todos estos años, Gloria era parte de la familia y los quería a todos por igual.
Todos se fueron juntos al comedor. Platicaban amenamente casi al terminar se escuchó la puerta.
Marina levantó la mirada viendo a Gloria y después Erick quien asintió hacia ella. Estaban seguros que era David.
El ama de llaves José avisó. "El joven David ha llegado".
En la puerta apareció un hombre alto de tez clara y cabello negro, peinado hacia atrás, sus ojos eran azules como el mar profundo, llevaba un traje negro y corbata gris, sus zapatos era de cuero.
Marina se levantó y estaba a punto de caminar hacia su hijo cuando vio a una mujer joven caminar con David, él la tomó de la cintura y le sonrió…
Marina estaba desconcertada, frunció el ceño y le dijo. "David… hijo".
David miró a su madre y se acercó a ella abrazándola y besando su mejilla. "¡Ma!".
Se escuchó su voz profunda repetir el seudónimo que siempre tuvo para su madre.
Saludo a su padre con un asentamiento. Y regresó con la mujer tomándola de la mano acercándose para que todos la vieran.
"Familia, ella es Roberta Álvarez, mi prometida".
Todo se quedó en silencio por unos segundos…
Los gemelos e Ismael giraron a ver el semblante de Gloria que estaba pálida.
Marina observó a Gloria por unos momentos, Erick frunció el ceño.
Ismael que estaba algo extrañado le dijo. "¿Prometida? Desde cuándo están juntos, no sabíamos que tenías novia".
El también miró a Gloria cabizbaja respiro profundo, el observo como ella apretó las manos aguantando el dolor, todos conocían los sentimientos de Gloria hacia David, al igual que los de David que siempre procuraba a Gloria, no entendían qué pasaba.
La mujer sonrió. "Hola, un gusto al fin conocerlos…"
Ella miró a David con dulzura. "David me ha hablado mucho de ustedes".
Marina preguntó. "¿Álvarez?".
Ella asintió. "Si. Soy la hija de Carlos Álvarez, él vivió aquí hace años".
Erick miró a David de manera expectante, David lo ignoro sabía lo que pensaba su padre. Roberta era la hija de Carlos, el antiguo novio de su esposa.
Sabían que David había ido a Suiza a estudiar algunos cursos especiales de medicina, pero no se imaginaron que él tenía contacto con Carlos.
Marina se acercó a la chica para no ser descortés, todos estaban incrédulos con lo que pasaba, David adoraba a Gloria y siempre pensaron que ellos algún día se casarían.
"Un gusto Roberta, bienvenida".
Roberta avergonzada le sonrió diciéndole. "Gracias señora… bueno suegra".
Ella río mirando a David que también le daba una pequeña sonrisa.
"Bueno deben venir cansados y tener hambre". Marina le pidió al ama de llaves servir a la pareja mientras todos saludaban y David los presentaba.
Tocó el turno de Gloria, David se acercó junto con Roberta y fríamente la miró diciendo. “Ella es Gloria… mi hermana”.
Roberta le sonrió a Gloria dándole la mano. “Hola, un gusto”.
Gloria tomó su mano tratando de estar tranquila y no estallar en lágrimas. “Hola”.
El ama de llaves sirvió la comida para los recién llegados, en la mesa se escuchaba la voz de la linda mujer, platicaba lo que vivió con David en el extranjero, al parecer ellos tenían una relación de varios años, estaban juntos en los cursos de medicina y se especializaron en lo mismo. "Cardiología".
Gloria escuchaba con dolor lo que la mujer contaba mientras jugaba con su comida, el apetito se había perdido desde que vio como David la abrazaba y estaba atento a lo que ella necesitara en la mesa.
Su teléfono sonó y agradeció por ello. "Disculpen es una llamada importante".
Se levantó y salió de la casa rápidamente, David solo la miró de reojo y siguió comiendo, Roberta miró a David de forma extraña y siguió con su comida.
Afuera las lágrimas de Gloria cayeron sin control se alejó lo más que pudo de la casa, necesitaba llorar, gritar, necesitaba desahogarse, había un nudo grande en su garganta que la sofocaba y dolía fuerte.
Se calmó un poco perdiéndose por los jardines del lugar y miró la pantalla de su teléfono. Ella devolvió la llamada. "Hola".
Del otro lado de la línea, Karina su asistente le dijo. "Gloria, el inversionista está aquí, llegó de improviso y quiere verte".
Gloria checo la hora, eran casi las cinco de la tarde, suspiró cansada, no estaba preparada para volver a la casa y ver a la feliz pareja. "Está bien, arregla todo en un buen restaurante para la cena y mándame la dirección, lo veré ahí".
Colgó el teléfono y caminó hacia una pequeña casa donde ella vivía sola, Erick y Marina se la habían regalado de cumpleaños, ella vivía feliz ahí esperando a que David volviera.
Al entrar observó todo, Gloria había pasado momentos inolvidables en ese lugar con David, su primer beso, su primera vez, pasaban muchas noches juntos en ese lugar. Pero un día él terminó con ella diciendo que tenía que viajar para prepararse y le pidió que fuera feliz, fue lo último que escuchó de él, Gloria lo esperaba desde entonces. Se cambió de ropa y estaba a punto de ponerse su maquillaje cuando observó las fotos en la pared, eran ella y David en diferentes momentos de su vida. Recordó cuando era joven no usaba maquillaje, pero al ser presentada como hija de la familia Estrada Varela y querer pertenecer a la clase alta, mejorar para ser una buena futura esposa para David y estar a su altura, a lo mejor no venía de una familia adinerada pero siempre se esforzó por ser la mejor de su clase y lograr abrir su propio negocio. Siendo ingeniera y médico ella tenía un centro de investigación, estaba creando nuevas terapias y productos para que las personas enfermas tuvieran mejor ca
David se acercó a sus padres. Marina lo miraba fijamente y después de unos minutos en silencio dijo. “Ahora me puedes explicar ¿Qué pasa?". David se sentó en el sillón de forma desinteresada. “No entiendo ma ¿Qué quieres saber?". Ella se frotó los ojos y suspiró. “David… ¿Porque nosotros no sabíamos sobre todo esto? ¿Cuándo pensabas decirlo? Y lo más importante ¿Qué pasa con Gloria?". David frunció el ceño y miró a sus padres. "Roberta y yo hemos salido por mucho tiempo, éramos amigos y la relación solo se dio. Ahora queremos estar juntos ¿Qué tiene de malo? además Gloria y yo… somos hermanos”. Marina resopló y cruzó sus brazos. Erick le dijo a su hijo. "Desde niño has protegido a Gloria, te aferraste a encargarte de sus estudios y no dejaste que nosotros la mantuviéramos, todo lo pagas tú… Siempre pensamos que te casarías con ella cuando crecieran, no entendemos ¿Qué fue lo que pasó?". David miró a su padre diciendo. "La gente cambia…" Él suspiró levantándose. "Espero que resp
Por la tarde Mar y Gloria recorrían las tiendas de ropa. Mar revisaba algunos vestidos cuando le dijo a Gloria. "¿No crees que es extraño? David nunca habló de tener una novia mucho menos de estar comprometido". Gloria hizo una mueca mientras revisaba la tela de una blusa. "Debe tener sus razones para no decirlo". Mar rodó los ojos. "Todavía lo defiendes después de lo que te hizo". Gloria la miro sin decir nada solo suspiró. Mar siguió cuestionando, no podía creer lo que pasaba. "Ustedes estaban juntos desde hace años, siempre lo vi salir de tu casa en las madrugadas o a veces los encontraba besándose a escondidas por ahí, siempre pensé que David te quería". Gloria no dijo nada, ella tampoco entendía, solo comento. "El amor se acaba". Mar frunció el ceño. "Pero tú sigues amándolo ¿No es cierto?". Gloria se quedó en silencio y siguió buscando prendas, la puerta se escuchó y Mar vio a su hermano entrando con su prometida. Molesta se acercó. "Qué coincidencia ¿No?". David miró de
Adrián se paró frente a ella bloqueando la vista de la pareja. "Gloria". Ella volvió a sus cinco sentidos mirándolo que estaba muy cerca de ella. Observó su rostro tranquilizando un poco de su dolor. Pero ella no sintió las lágrimas que caían en su rostro. Adrián sonrió tiernamente limpiando su rostro y le susurro. "El no merece tus lagrimas Gloria”. Gloria sonrió tristemente. "No. No las merece". Ella cerró sus ojos un momento y le dijo a Adrián. "¿Puedes alejarme de aquí por favor?". Adrián asintió y la abrazó a los hombros caminando al contrario de la pareja. David se alejó de Roberta y observó como el tipo abrazaba a Gloria, apretó sus puños fuertemente. Roberta miró el semblante de David y le preguntó. "¿No irás detrás de ella? Todavía puedes tener una oportunidad". David se giró y caminó hacia su auto ignorándola, Roberta negó con la cabeza lo que David planeaba no era una buena idea, pero aun así lo apoyaba era amigos desde hace mucho tiempo, conocía los sentimientos de
Los técnicos de sonido terminaban de colocarle a Vicky el micrófono, ella tomo su guitarra colocándola en su regazo. Se sentó en el banquillo y empezó a tocar la guitarra. Ella interpreto la canción de: Si tú no estás aquí de Rossana. No quiero estar sin ti Si tú no estás aquí, me sobra el aire No quiero estar así Si tú no estás, la gente se hace nadie Si tú no estás aquí, no sé Qué diablos hago amándote Si tú no estás aquí, sabrás Que Dios no va a entender, por qué te vas Todo estaba en silencio solo la voz nítida de Vicky de escuchaba, sus amigos la observaban estaba hermosa, su pierna donde posaba la guitarra sobresalía de su vestido, sus dedos movían cada cuerda con precisión y sentimiento. No quiero estar sin ti Si tú no estás aquí, me falta el sueño No quiero andar así Latiendo un corazón de amor sin dueño En la mesa, Mar estaba emocionada de ver a su amiga, Luka estaba en el teléfono contestando emails, pero al escuchar la voz de Vicky se detuvo para ver la pres
Fernando la ayudó a subir al auto, colocó su cinturón acercándose mucho a ella, Keila a pesar de estar borracha olió la fragancia tan varonil del hombre y suspiró sintiéndose calmada. En el camino ella tarareaba la canción que Vicky cantó. Fernando sonreía al escucharla, tenía una voz muy dulce, ella lo miraba de vez en cuando regalándole una sonrisa tonta. Llegaron a la gran casa, Keila abrió la puerta del auto, Fernando la ayudó a bajar. "Gracias". Estaba un poco más sobria. Ella observó alrededor y giró para verlo y preguntar. "¿Cómo sabes que vivo aquí? No te lo dije". Fernando le regaló una coqueta sonrisa. "Cuando algo me interesa investigo todo". Ella ladeó la cabeza, sin comprender mucho sus palabras, pero estaba algo borracha así que no dijo más. “Bien”. Keila bostezó. Fernando se acercó acomodando algo de cabello detrás de su oreja y no perdió la oportunidad de rozar su mejilla. “Descansa”. La observó entrar a la casa, mandó un mensaje de texto y tuvo como respuesta… "L
Gloria camino por la calle todavía algo incrédula, observó un restaurante donde tenían pantallas en las paredes como entretenimiento, estaban pasando la noticia de la boda de David y Roberta, se quedó escuchando cada palabra, era la noticia del siglo, la familia Estrada era muy famosa y querida en la ciudad. Ella se alejó llegando hasta sus oficinas, su asistente la esperaba, observó el rostro pálido de Gloria y sacó su teléfono mandando un mensaje. Minutos después llegó Keila casi corriendo. "¿Dónde está?". La asistente le dijo. "Está encerrada en el laboratorio desde hace mucho". Keila asintió y entró al laboratorio. Observó como Gloria caminaba de un lado a otro leyendo informes y examinado pruebas en el microscopio después hablaba a su computadora que registraba su voz y conversaciones en el sistema. "Gloria". Ella sin girar la saludo. "Hola". Parecía muy tranquila, se acercó a su computadora tecleando y buscando. Keila se acercó. "¿Estás bien?". Gloria giró para sonreírl
Keila observó detenidamente al hombre, era muy guapo y sus ojos eran muy atrayentes, pero aun así ella estaba inquieta, era muy extraño y sentía que sus palabras eran muy vagas o mecánicas, era como hacer un negocio, algo que ella no deseaba. Miranda interrumpió al joven que seguía muy animado. "Nosotros no somos de una familia tan acomodada como ustedes, ¿Porque sé interesaría por mi hija?". Miranda sabía que si les interesaba un matrimonio por conveniencia sería su sobrina Mar hija de Erick y Marina la indicada, el estatus de ambos era casi igual, pero no podía creerlo, las personas estaban aquí, buscando que su hija se casara con su familia. Bernardo y Lola miraron a Fernando para que les explicara. Fernando desde su lugar sonrió explicándoles a todos en especial a Keila. "Me interesas Keila… Desde la primera vez que te vi sabía que eras perfecta para mí, soy Cirujano pediátrico, tengo una carrera exitosa y puedo darte una buena vida si decides casarte conmigo”. La forma en cóm