Paolo asintió con la cabeza y comenzó a narrar por segunda vez, pero esta vez explicando todo con detalle. Inició contando cuando vio a la niña, la llamada de su tío a un conocido para identificar el propietario del auto cuyas placas había memorizado su tía Sara. Agregó que sus tíos fueron a una fiesta en casa de Amancio Herrero, el hombre que había criado a sus hermanos, y por último les indicó que el mensaje de su tía era una clave. —La cerda es mamá, dos cerditos le fueron robados, o sea mis hermanos y yo me quedé con ella, el lobo Herrero que hace espadas que se los llevó y que ahora quiere hacerles daño a los amigos de su padre, es el tal Amancio que tiene a mis hermanos y al parecer tiene retenido a mis tíos. —Necesitamos regresar a Valencia de manera urgente —declaró Luke. —Yo te acompaño —dijeron a unísono Renaldo y Alessandro. —Creo que no deberían enfrentarlo de una vez, debemos averiguar que sea cierta la información sobre su paradero, en qué lugar encontrarlos, es mej
Nidia no podía creer lo que Iker le decía, sacudió la cabeza incrédula, eso era una locura, eso no podía ser verdad, se repetía una y otra vez en su mente. —¿Cómo es posible? —preguntó mientras su mente intentaba comprender aquel descubrimiento —¿Qué me estás diciendo? ¿Estás seguro de que este niño es tu hermano gemelo? ¿De dónde sacaste eso que me dices? —preguntó con voz temblorosa—, eso es mentira, debe ser un error, no hay ninguna explicación lógica Iker para eso que dices ¿Quién te dijo? A pesar de hacer decenas de preguntas, no esperaba la respuesta del chico, si no que negaba una y otra vez, al mismo tiempo que las lágrimas le caían en cascada por su rostro. Él se acercó y empezó a contarle toda la historia, lo que supo por su hermana y lo que él pudo averiguar por las noticias en la red sobre robo de niños a mujeres de escasos recursos, mientras le decían que sus hijos habían muerto, eso lo hizo ante de que su padre le quitara las redes. El cuerpo de Nidia comenzó a tembla
Nidia lo miró con tristeza, por más que intentaba comprender su forma de actuar, no lo podía hacer, era demasiado turbio lo que estaba ocurriendo, no podía evitar preguntarse ¿Si la hubiese seguido engañando durante el resto de su vida si esa gente no hubiera aparecido?, se pasó la mano por la cabeza en un gesto mezcla de desespero e impotencia, en su interior rogaba al cielo que eso fuera una pesadilla de la que pronto despertaría. —Te juro que trato de ponerme en tu lugar y no veo una razón lógica que me permita justificarte frente a lo que hiciste, jamás pensé que fueras capaz de hacer algo así, siempre creí y confié en ti… no tienes idea de cuánto dolor me ha causado descubrir esta verdad, saber que he vivido en una mentira, todo lo que construí me cayó encima ¿Y qué tengo? ¡No tengo nada! Porque perdí mi vida… esto es demasiado fuerte, me siento herida de muerte y si no es porque aun esos niños están aquí, te juro que me habría volado los sesos —terminó llorando desconsolada, cu
Todos salieron corriendo al despacho para encontrarse con la cruel realidad, Nidia se quedó estática contemplando el cuerpo de su esposo tirado en el suelo, entre tanto un hilo de sangre estaba saliendo de una herida en su cabeza. —Lo siento, llegué para evitarlo, pero el disparo igual le impactó, aunque habría dado en el centro de la sien, Sara llama a emergencia, por favor —ordenó y la mujer se levantó rápido e hizo como le pidió. Por fin Nidia reaccionó, no pudo evitar dejar escapar un llanto desgarrador, su alma estaba destrozada por la situación y los niños también, de inmediato corrieron hacia ella llorando. Los tres se arrodillaron junto al hombre, sin dejar de llorar. —Te prohíbo que me dejes ¿Por qué lo hiciste? ¡Nunca fuiste un cobarde! No puedes dejarme ahora —le susurró mientras lágrimas silenciosas caían por sus mejillas. De esa manera, temía que terminaran enterrando todo lo que habían construido; no pudo evitar recordar la promesa hecha cuando se casaron, pero tam
Piero, el primo de Luke, salió del apartamento de Valentina, caminó con precaución, sus ojos buscando cualquier indicio de peligro, aunque tenía un grupo de hombres relativamente cerca a solo un par de cuadras de allí por si los necesitaba, pendiente de sus movimientos, eso no evitaba que siempre estuviera alerta.La calle estaba desierta, y el aire estaba cargado con el aroma a flores, se supuso que era por las flores de la floristería. Había una luz roja parpadeante en una de las esquinas de la calle, una señal de la vida que aún seguía.Siguió avanzando hasta que alcanzó el lugar donde su auto estaba estacionado. Estaba completamente a oscuras, a excepción de una luz mortecina que provenía del reloj del auto.Con el corazón latiendo con fuerza en su pecho, abrió la puerta del auto y se subió, tratando de que el ruido no se escuchara. Cerró la puerta, asegurándose de que estaba bien cerrada. Antes de comenzar a conducir, sacó una peluca, una barba falsa y una gorra, se los colocó p
Luke y Valentina estaban viendo las noticias, cuando escucharon lo que había sucedido con el médico que Piero había ido a detener para ponerlo a la orden de la policía, no podían creer que se hubiera suicidado, todo parecía tan turbio. —Eso es muy extraño ¿Dónde estaban sus cuidadores mientras él se suicidaba? ¿Cómo lo hizo? ¿De dónde sacó una cuerda para colgarse? —preguntaba sorprendido Luke. —¿Acaso crees que no se mató? —interrogó ella confusa.—No lo creo, estoy seguro de que alguien debió mandar a matarlo para que no hablara, por más que se quiera eso no se va a acabar de esa manera, hay demasiadas personas de poder involucradas y ninguno se va a arriesgar a que su nombre quede expuesto, por eso están dispuestos a hacer lo que sea, matar a sus propios cómplices o a los autores materiales de sus fechorías para evitar que los atrapen.»Sabes, la mayoría de esa gente lleva doble vida, por un lado, son piadosos, aparentemente respetables, con una conducta intachable, pilares de la
Mientras los médicos luchaban por salvar la vida de Amancio, Nidia permaneció en el suelo apretando los ojos con fuerza rogando al cielo porque su esposo no muriera. “Por favor,”, rogó al cielo en su mente, “Que no muera, prometo aceptar que no pude ser madre, no insistiré en verlos si sus padres verdaderos no quieren que lo haga, pero no me lo quites… sé que cometió errores, y que debe pagarlos, pero te pido que no sea con su vida, te lo ruego”, pidió. No supo durante cuánto tiempo estuvo así, pese a todo, no se sintió sola porque el amor de los niños y los brazos incluso de Valentina, la verdadera madre de ellos, la arropaban. No supieron cuánto tiempo duraron así, pero fueron los minutos más largos que Nidia vivió, miles escenario pasaban por su cabeza, sin embargo, siempre mantuvo un atisbo de esperanza encendido en su interior. Un momento después que a ella le pareció eterno, los médicos lograron estabilizar a Amancio. Lucharon por la vida del paciente, lo atendieron inmedia
Valentina escuchó los resultados de la prueba de ADN con el corazón en la garganta. Su esposo estaba parado frente a ella y en su rostro vio que también había tenido la esperanza de que su hijo estuviera vivo, era difícil sufrir dos pérdidas, la primera cuando supo que murió al nacer y ahora cuando pensó que estaba vivo.—Esposa, lamento mucho decirle que los resultados de la prueba de ADN confirman lo que sospechábamos, Ryan es el niño que está enterrado en el cementerio municipal de Barcelona y es la tumba que no has dejado de visitar todo este tiempo —habló con una expresión de tristeza.Valentina dejó que las lágrimas surcaran su rostro, lloró con un profundo dolor. Era inevitable sentir que estaba triste porque en verdad su hijo Ryan si había muerto, pero sabía que debía seguir adelante. Tenía que enfrentar los hechos, y aceptar que Ryan no estaba, a pesar de que siempre estaría en su corazón.Al mismo tiempo de sentir ese dolor, sintió también una inmensa gratitud. Porque encont