Lo miro sin comprender sus palabras.
—¿Qué?—Digo asustada.
—Lo que has escuchado —Afirma con tranquilidad, y este qué, ¿Está loco? Lo miro y lo miro, pasados de los 5 minutos al fin digo:
—¿Por qué yo?—Pregunto nerviosa.
—Porque... la verdad no lo sé—Admite.
—Tiene muchas chicas que están interesadas por usted. Y lo que no entiendo el porqué, me eligió a mí.-Digo tratando de comprender.
—Ellas solo buscan mi dinero, y también buscan amor y esas cosas, cosas que yo no quiero. —Lo miro extrañada, ¿no por eso salían con él? ¿Por el dinero?
—Bueno, y que le hace creer que yo, voy a querer casarme con usted y tener un hijo suyo.—Recrimino seria.
—Lo supuse, fue solo eso. Es un favor, señorita Parker.—Dice mirándome.
—Pues eso no es normal, un hijo es algo que se espera con amor, no solo es un trato o un favor.—Digo.
—Eso lo sé, pero si no cumplo el plazo de un mes, no voy a recibir nada y yo saldría volando sin llevarme nada de lo que mi papá ha trabajado. Y no se me hace justo, ni lo que me quiso hacer mi papá, dejando esa condición. —Se lamenta. Sin darme tiempo de decir más dice:—Tenga lea este contrato. -Me entrega un par de hojas. Dudo en tomarlas o salir corriendo y renunciar y ejercer mi carrera.—Si tiene dudas me lo puede hacer saber-Finalmente las tomo y digo:
—Yo le haré saber mi repuesta—salgo de la oficina de mi jefe, el cual quiere que sea su esposa.
Llego a mi casa agotada, tomo una ducha y me siento a cenar. Miro las hojas y con mucho valor decido leerlas.
En él solo estípula unas cuantas reglas y condiciones. Las que más me llaman la atención son unas cuantas.
Las reglas son:
«Queda prohibido que la señorita Parker consuma bebidas alcohólicas, estando embarazada»
«Evitar hacer ejercicios bruscos durante el embarazo»
«Llevar una dieta balanceada y nutritiva que sea favorable para el bebé»
Y las condiciones, las que más le llamaron la atención, fueron tres:
«Durante el embarazo, la señorita Parker no trabajará y recibirá una mensualidad por parte del señor Freeman»
«Si no están casados, la señorita Parker puede vivir en su casa particular o en la casa del señor Freeman. Si se casan es obligatorio que vivan los dos juntos. »
«Tendrán relaciones sexuales hasta que el embarazo sea oficial.»
¡Pero si soy virgen! ¿Qué no mi primera vez debe de ser especial y con la persona que ame? No es posible que tenga que hacerlo con Barry y que ni siquiera me atraiga y ni lo quiera. Que mala leche tiene este asuntillo.
No me dijo cuando quiere la repuesta, pero está visto que no quiere dejar ir la empresa de su papá. Pero porque diablos le dejaría esa cláusula. De seguro sabía que este rubio nunca sentaría cabeza y terminaría soltero. ¿Pero, pero qué no tiene amiguitas que lo puedan ayudar? Y además todas son unas bellezas, ¿qué no piensa que así le saldría hermoso el bebé?
Todas esas chicas son modelo, tao vez por eso no quieran tener hijos, por eso no pensó en ellas como una opción, ¿pero y yo qué? ¿Cree que no me importa mi cuerpo? Pero está muy equivocado.Sin embargo, solo he estado pensando en mí, y en como me voy a sentir si acepto, y no he pensado en mi familia. ¿Cómo la va a tomar mi papá? Si Barry es como un hijo para él. ¿Y mis hermanos? Pero que mal rollo.
No sé que hacer, si acepto tendré una gran responsabilidad; un bebé.En la mañana; desayuno y me visto muy rápido. Se me ha hecho tarde. Cuando llego a la última planta del edificio de donde trabajo me siento aliviada por llegar a buena hora, pero en mi escritorio encuentro dos carpetas llenas de trabajo. ¡Mejor me quedo embrazada, para no trabajar! La puerta de la oficina de mi jefe se abre y de ella sale Barry, me mira con gesto serio; se acerca a mi escritorio y dice:
—Quiero la respuesta —O dios no...
Kelly me mira sorprendida por lo que acabo de decir. Es súper precipitado de mi parte, pero no quiero esperar más, ella es bonita, y se ve que sus genes y los míos harán un bebé precioso. Sin embargo, he notado su negativa hacia mí. Y sé que es mi puta culpa, por ser tan imbécil, y tratarla tan mal. —Este...no sé, yo he dicho que le diría mi respuesta. —Alega nerviosa a su defensa. —Ya no puedo esperar más.— está sorprendida y también presionada, y es lo que quiero infligir con ella para que me dé una respuesta definitiva y rápida. —No le he dicho a mis padres, y creo que esta mentira no se la van a creer, señor. —dice preocupada. Me gusta su cabello rubio, es tan linda. —No hace falta que le des explicaciones a tus papás, ya no vives con ellos. —La estoy tratando de convencer, y haré todo para lograrlo. Ella siempre ha sido un objetivo para alcanzar. —Es complicado —Dice. —Nada es complicado, la complicada eres tú. —Si es complicado, porque no me quiero casar con alguien que
La cena estuvo muy buena, y el sabor me hizo recordar a la manera de cocinar de mi abuela paterna. Ella era maravillosa. Todos mis familiares me han dejado, y, sin embargo, ahora estoy apuntó de empezar a constituir mi propia familia. —Nos tenemos que ir.—Anuncio. —Sí, los estaré visitando a menudo, lo juro.—se despide Kelly. Tomados de las manos, salimos, y nos dirijamos hacia mi auto. —Todo estuvo muy ameno.—digo mirándola. —Le caíste muy bien a mi mamá—pronuncia alegre—, pero no a los gemelos. Dales tiempo, son muy protectores. —No me importa, para mí es muy importante que tenga la aprobación de tus padres, —hago una pausa y digo:—Kelly, necesito que empecemos a trabajar con el bebé. —El solo hecho de decir “a trabajar” ha puesto a la pequeña Kelly roja de las mejillas, ¡se ha sonrojado! —Mañana. ¿Por qué no vamos a algún lugar para tener el bebé científicamente? —La idea de tener sexo conmigo, ¿en verdad es repugnante? —No. El tiempo no nos sobra y lo sabes. —le digo. —Bue
Ayer fue un día de cosas nuevas, muchísimas cosas. Por primera vez tuve sexo, eso es solo sexo, porque no hay sentimientos de por medio; sin embargo, fue bueno. Me causo un poco de miedo, pero ya no tengo tanta vergüenza, pero aún me sigue intimidando la manera en la que nos ven todos en la oficina. Yo tomo mi puesto y rápidamente me pongo a hacer mis deberes. Llamadas y citas agendadas, todo eso me pone de malas y hace que me duela la cabeza, por tanto trabajo el tiempo se me pasa volando, vamos Kelly, aguanta, ya casi hay vacaciones. Unas merecidas vacaciones. —Kelly, ¿quieres ir a comer?— Barry me mira curioso. — Ehhh gracias, de hecho ya estaba por irme— le digo a modo de respuesta. —Pues vamos entonces.— me dice, caminamos separados entre los pasillos de la oficina, me siento observada por todos y todas, llegar al estacionamiento es un alivio para mí, subo a su coche y me abrocho el cinturón de seguridad. —¿Qué te gustaría comer?— dice sin mientras se incorpora al tránsito de
—Bueno, en ese caso... Nos tenemos que poner a trabajar para obtener ese positivo. —Me dice levantando la mirada para observarme. —Está bien —consigo decir. Aún no me puedo borrar de la mente, la manera en que sus manos me recorrían el cuerpo, sus besos y sus caricias.—nos vemos luego —salgo de su despacho para hacer mi trabajo. Papá me llama en el transcurso de la tarde, y me dice que ya ha hecho difundir mi compromiso. También me pregunta de como van los preparativos de la boda. Él piensa que esto ya está más que planeado, pero la verdad es que no. Me lo quito diciéndole que una organizadora es la encargada de todo y que aún no me ha avisado nada. —¿Nos vamos?—oigo que Barry pregunta. —Oh sí, solo hago cierto esto y esto —cierro unos documentos en mi ordenador y digo: —Listo, ahora sí, vámonos. Los dos salimos juntos del edificio y nos subimos a su automóvil, que por cierto es el Jeep. —¿A tu casa o a la mía? —me pregunta. —A... la tuya—digo avergonzada. Si me pagaran por ser
BARRY La noche anterior Kelly se comportó un poco ausente como si algo le molestara o le faltara. Me puse a repasar todo, desde los detalles hasta lo que pasaría después y lo tuve claro, creo que a ella le hubiera gustado casarse por la iglesia y tener Luna de Miel cómo en las películas románticas. Para decir verdad nuestra boda será normal, que falte el lado religioso, no me molesta en nada, veamos, habrá recepción para los invitados, su vestido blanco y todas esas cosas. Pero siento que algo que falta: el anillo de compromiso. Me levanto de la cama dispuesto a ir a una joyería, cosa que por supuesto hago, pido que me muestren anillos de todos los tipos, desde los extravagantes hasta los más sencillos, m****a, no sé la medida del dedo de Kelly, repaso en mi mente como es que se siente su mano, tiene una mano pequeña, pero delgada, probaré suerte con algunos. La señorita trae unos "especiales" de poca demanda por su precio, pero únicos en todo el mundo, están demasiados lindos, hay
¡La boda es mañana! Mi mamá está tan estresada que en cualquier momento se desmaya y bueno, mis hermanos están inconformes a excepción de Steve, él está feliz por mí, pero yo no tanto ¿Y si mi vida con Barry es mala? Mi mamá me truena los dedos enfrente de la cara, automáticamente le pongo atención.—A dormir mi niña, debes de estar descansada para el día de mañana, para tu boda.— mi mamá está en mi departamento, vendrá por la mañana con toda mi familia para ayudar y volverse locos.—Adiós hermana— Steve me da un beso en la coronilla de la cabeza, mientras los mastodontes de los gemelos nos miran e ignoran la situación.—Adiós, te quiero, gracias por el apoyo —recalco lo de apoyo para que los gemelos reaccionen.— Adiós, papá— me despido de él con un abrazo.— Adiós, chicos. —Les digo adiós con la mano para evitar abrazarlos, ¡que ya se les quite la pataleta! ¡Imbéciles! ¿Cómo es posible que no puedan aprobar a mi futuro esposo?Cierro la puerta y me desplomo en mi feo sillón, dejo escap
Tomo mi copa de ron. Quiero relajarme, hoy Kelly se casa conmigo. Hoy será mi esposa. Estar sólo en este paso de mi vida, aunque sea sólo un maldito contrato, me duele el hecho de que mi madre sólo viniera por los chismes y para quitarme el dinero que me dejó mi papá, y no porque ella me quisiera y se interesara por mí.La familia de Kelly me ha incluido ahora como un hijo más, pero eso qué, no puedo tener a mi verdadera familia, porque constantemente me están rechazando, tanto cómo mi mamá y su familia, soy su hijo, no sé porque me odian. Respiro hondo, tengo puesto mi traje gris y mi corbata color vino o no sé como se llama, creo que es sangría pero para mi todo es lo mismo. Ajusto mi corbata por enésima vez. ¿Por qué no elegí a Gaby? A ella la quería, sólo un poco pero la quería, y a Kelly no, es más, la llegue a odiar. Mi papá la miraba como a una hija, y en ese aspecto era muy celoso porque estaba necesitado de cariño por parte de mis familiares.Camino
—¿Qué? Hoy te casas, ¿no?—la confusión de Ben es notable. —¿Si o no?— no quiero dar explicaciones. —¿Escaparte conmigo? Kelly reacciona, hoy es tu boda. —No estoy feliz por ello, no después de saber la verdad. —Piénsalo bien, Kelly, si te vas conmigo ya no habrá marcha atrás. —dice un poco enfadado. —¿Kelly, mi vida puedo pasar?— pregunta mi mamá detrás de la puerta. —Nos vemos en mi departamento en media hora.— Sentencio. —¡Un momento! –Las cosas me caen como balde de agua con hielos. Camino hacia la puerta con temor, pero finalmente abro la puerta. —Pero que cosas, hija, aún no te has puesto el vestido. —Mamá, no me lo quiero poner, además tú me dijiste que tú me ayudarías.— Me quejo. —¿Qué? ¡Kelly no digas tonterías! Los nervios traicionan— Sonríe mi mamá sin comprender. —No me quiero casar— confieso —¡Ay niña! Que locuras dices ¡Solo apresúrate!— me da un beso en la mejilla y sale de la habitación como si nada. Tomo mi bolso y busco la ropa del día anterior, tengo