Ya tengo el boleto para ir a Canadá, solo tengo que hacer el chekin y ya, Julián no puede ir ya que tiene algunos pendientes en la empresa y tiene que hacerlo durante esta semana.

Pero como él dijo pondría unos guarda espaldas, uno saldrá de aquí conmigo y el otro se fue hoy para ver si es seguro.

Ya me siento como una persona importante. Sonrió frente al espejo, Julián me invitó a cenar fuera de casa y nos quedaremos en un hotel para así mañana partir.

—¿Porque sonríes? —.

—Por mis ocurrencias—.

—Y ahora que ocurrencias estuviste—.

—Que soy una persona importante ya que uno de los guardas espaldas ya está en Vancouver asegurándose que todo esté en orden—.

—Eres importante para mí amor y no voy a permitir que ese perro se acerque a ti, en cuanto termine aquí iré por ti—.

—Esta bien—. Lo miró, y esa incógnita que gira en mi cabeza desde que me enteré que él era un vampiro está girando. —Julián cuando le dices perro a Kyril ¿a que te refieres, el es uno de ustedes? —.

—Eso no me corresp