♡ Narra Daniela ♡.

A Julián no le importo que él hombre estuviera aquí, él seguía besando mi cuello, solo sentí la puerta ser cerrada.

—Ah Julián—. Dije cuando apresó mis pompas.

—Te haré mía por toda la cabaña—. Sus palabras hacen estremecer mi cuerpo.

—Quiero ser tuya donde sea Julián—. Lo beso por el cuello, me suspende en el aire enredo mis piernas en sus caderas, camina conmigo, lo beso.

Me sienta, me quita el abrigo, hago lo mismo y nos entregamos uno al otro, me encanta su manera de ser, todas las veces que hemos estado juntos él jamás me a dicho que le diga que le pertenezco o que le diga que soy suya, soy suya por que quiero.

Después de estallar en un apasionado y desenfrenado encuentro nos duchamos y nos vestimos para así ir a ver el lugar favorito de Julián.

—Si me congelo es por tu culpa—. Le recriminó, este lugar es más frío que en Vancouver.

—Yo te doy de mi calor—. Lo miró con los ojos achinados.

—Ya veré qué tanto me calientas—. Me acerco a él.

—Yo creo que mucho amor—