Dudas.
Habían pasado algunos días desde que Emily había sucumbido a la carne de otro hombre que no era su futuro esposo, ese al que deseaba más que a su prometido, ese que significa mucho más para ella que su vida misma, ese que la había hecho temblar de placer en una sola mañana, ese que había conseguido volverla loca, como nunca había sentido con nadie más, incluso con su prometido. Por eso le evitaba, por eso y porque aquel pecado había roto todos sus principios y ahora temía sentir algo más que deseo por aquel hombre.
Emily se encuentra en la tienda junto a sus amigas, probándose el vestido de boda con el que se casaría co
Maltrato Había pasado casi una semana desde que Andrea se había marchado junto a su padre, aún podía recordarlo… Aún sentía mariposas en el estómago cuando se acordaba de él, o sentía sus piernas temblar cuando pensaba en como la había hecho suya. Aunque la verdad era que siempre intentaba ignorar aquellos sentimientos, intentaba pensar que aquello no había pasado, ya que no quería dañar a Lucas.El tiempo pasa realmente rápido cuando una tiene que preparar una boda, o así lo pensaba Emily, ya que tan sólo quedaban tres semanas para su boda, y apenas estaba segura de nada. De lo único de lo que estaba segura era que añ
Una visita inesperada. Su vida estaba siendo un infierno desde lo ocurrido, hacía semanas que no hablaba con Lucas, semanas que no volvía a casa. Y en cierta forma lo agradecía, no tener que verle.Pero se sentía demasiado sola, aunque sus amigas intentaban visitarla todo el tiempo.Los preparativos de la boda se habían quedado en espera, aún se sentía demasiado afligida para salir a la calle, y sus padres no entendían que sucedían, por tanto, ella los había alejado. No quería tener que explicarle a todo el mundo que tenía miedo de Lucas, incluso
El retraso del señor Drake Dos largas semanas habían pasado desde que Andrea había vuelto, y aún no había noticias de su padre. La niña estaba preocupada al respecto, y Emily le asustaba la idea de que Lucas volviese a casa y la encontrase allí con ella, temía tanto su reacción, que apenas sacaba a la niña a pasear, por temor a que alguien la viese con ella.Emily había cambiado, o así opinaba su hija, ella parecía temerosa por algo todo el tiempo. No paraba de asustarse cada vez que sonaba el timbre. Por esa razón se habían mudado a casa de su abuelo, el señor Forbes.Emily salió de la ducha en albornoz, seg
Temores nocturnos Emily se hallaba recostada junto a Lucas. Recordaba cómo había llegado a casa la noche anterior y como él la había regañado duramente.Ahora lo comprendía, ya no importaba lo que sentía, no importaba nada. Sólo proteger a William y a Andrea. Y si dejaba a Lucas él los encontraría y los haría pedazos.Jamás podría dejarle, jamás. Debía casarse con él, aunque fuese infeliz el resto de su vida.Ella no era la Emily Forbes que él recordaba, no era esa persona, no podía ser su esposa y la madre de Andrea. La verdad es que era una cobarde. Haría cualquier cosa por permanecer junto a Luca
¿Es esto real? A la mañana siguiente, sobre el apacible océano, el rey de las sombras se encuentra navegando. Los marineros se encuentran en sus quehaceres, mientras las gaviotas revolotean buscando puerto, las olas chocan dulcemente contra el barco balanceándolo débilmente.Una joven, sobre el camarote del capitán, una hermosa muchacha que no pertenece a aquel lugar, despierta sonriente. Ha tenido un hermoso sueño donde un apuesto príncipe la libera de las garras del malvado hechicero.Levanta los brazos para desperezarse y abre la boca soñolienta, percatándose de que se encuentra en una habitación que no conoce, algo antigua y descuidada, y que fre
Una luz al fondo del abismo.William agarraba a su esposa por la cintura, mientras posaba su hermoso colgante esmeralda sobre su mano.- Puedes volver con esto - le explicaba, mientras la muchacha le miraba sin comprender, agarrando fuerte la pequeña botellita vacía que aquella extraña llamada Lucía le había obsequiado. Aquella mujer había mentido, pues tras beberse aquel mejunje no había sentido nada especial, y por supuesto no había recordado a William o a Andrea en una vida anterior - Yo debo quedarme, es mi deber como capitán - explicaba.¿de verdad crees que eres un pirata? - Preguntaba divertida, ya que aún seguía creyendo que aquel no podía ser cierto, tan sólo era un set de grabación o algo por el estilo.
CAPÍTULO 17Las conchasWilliam llegaba al barco apenas unos minutos después de que Emily hubiese muerto.Su pequeña Andrea corría hacia él, al parecer estaba llorando...¿qué ocurre?¿Qué has hecho? – Preguntaba la niña sin dar crédito aún al sueño que acababa de tener. - La has matado. Has matado a mamá, ella acaba de morir, lo he sentido.Poned rumbo a la isla los pájaros – ordenaba mientras intentaba esconder a su tripulación que tenía ojos llorosos – necesito hablar con Mamá TítacaMientras tanto las sirenas se reunían junto a la gran diosa, mientras admiraban la gran burbuja que colgaba sobre el
PREFACIO“Sobre la cubierta del puerto de Nueva York la figura de un joven de cabello rubio y alborotado se encuentra, con la mirada fija en el océano, buscando cualquier anomalía en aquellas aguas calmadas, en aquella noche estrellada.Una muchacha de cabello castaño y estatura mediana camina hacia aquella figura, parece sorprendida por su aspecto, ya que las ropas que usa no son de esta época.“William” Pronuncia cuando llega hasta él, como si realmente esperase que aquella figura translucida pudiese escucharla, aquella figura de humo, pues recién ahora se percata de que esa figura no es real, tan sólo parece un recuerdo de una vida anterior. Para su sorpresa la silueta se vuelve hacia ella y le sonríe, como si realmente pudiese reconocerla. Pero ella no lo conoce, no