Aunque no los dejo agacharse por sus heridas, si les doy cosas para que lleven e incluso los perros llevan algo en sus hocicos, para distraerlos de cuantas veces han coincidido cuando quieren ayudarme y como ninguno de los dos quiere dejarme sola.
Así llevamos todo hacia la casa, donde nos despedimos bajo la promesa de que nos reuniremos a una fogata, mientras yo imploro que no sospechen más de lo que ya es evidente.Solo cuando estoy en el baño, respiro profundo por todo lo que sucedió en tan poco tiempo, pero, agradezco que todo esté bien hasta ahora. Así que, rápidamente me preparo para la fogata y salgo implorando que no pase algo más.Cuando llego a la sala, ellos ya están arreglando la sala, mostrando que una herida de bala no es algo relevante para los gemelos Thompson, que cuando me ven, me sonríen y yo siento como algo se derrite en mí y no es precisamente mi corazón.La noche pasa entre confesiones, donde escucho cada una de las cosas que los gemelos sin yo pedirles que sean sinceros conmigo me dicen. Entonces, comienzo a entender la relación con cada uno de sus hermanos y porque antes de este problema, no eran capaces de asesinarse cuando sabían que aunque hay varios príncipes, solo uno podría reinar.Entonces, por loco que parezca, comienzo a ser empáticos con ellos y de cierto modo, ellos cambian su actitud conmigo. Ya que, se ven más gentiles y menos posesivos, ya que, aunque los dos coincidan en una acción gentil hacia mí, no se molestan ni mucho menos, hacen que el ambiente sea asfixiante.— ¿Por qué han decidido ser sinceros conmigo ahora?— Sin necesidad de pedirte una prueba de lealtad, la has hecho recientemente. Aunque temblabas y no tenías la experiencia para hacerlo, te arriesgaste por nosotros. Por eso, es momento que nosotros pa
Aunque los gemelos me han dicho que ya no me trataran como la mujer que han secuestrado, no debería disfrutar tan rápido lo que ellos hacen solamente porque son el pecado lujurioso hecho persona.Una mujer no debería pensar así de sus secuestradores, por muy atractivos que sean, pero, es evidente que yo no hago lo que otros deberían, porque en vez de mostrar miedo ante estos hombres violentos y crueles, lo que quiero es que uno de ellos me atienda como solo ellos saben hacerlo en la cama.‘¿Está mal desear a ambos? Es que aún no sé quién me gusta más en la cama.’ Me digo mentalmente.— Marcela, ¿le quieres decir algo a Noah? — pregunta Nick mirándome con los ojos entrecerrados.La vergüenza me invade, porque con su mirada me dice que está molesto por lo que hice tan evidente y fue saborearme completamente al hombre que fue mi novio y ahor
Me gustan, de eso no hay duda, pero, no es solo lo sexual, porque aunque disfruto mucho lo bien que se siente mi cuerpo cuando ellos me invaden, también disfruto viendo sus cuerpos y lo bien que se siente cuando los toco y los beso.Además de eso, me gusta su cabello moviéndose por la suave brisa, su sonrisa y como sus ojos me miran con deseo, mientras sus manos me mantienen en mi lugar, porque chocan muy fuerte su cuerpo con el mío, para invadirme completamente.¿Qué debo hacer? Me he enamorado de los príncipes de la mafia y aunque sé que no debí caer en la tentación, sin notarlo, he descubierto que me he hecho adicta a ellos, porque son mi droga privada que quiero consumir por el resto de mi vida.— ¿Cocinamos rico?— Sí, muy rico. — susurro.Los chicos regresan a su tarea, mientras yo noto proceso todo lo que ahora se me ha revelado, porque, realmen
Él me observa confundido, mientras yo me regaño por disfrutar de él, cuando Nick está interesado en alguien más y por esa persona me dejó sola en la cabaña esperando que volviera.— ¿Mi mujer? — pregunta Nick confundido.Ver como él finge no saber de qué hablo, hace que me sienta más molesta, sobre todo, porque él se acerca a mí y antes de que me aleje, él bloquea mi camino.— Aléjate, Thompson.— ¿De qué mujer hablas?— Hablo de la mujer que tanto te gusta, Nick. Esa que parece no sentir molestia porque me pides matrimonio a mí cuando ella es tu prioridad. Dime, Nick, ¿tan valiosa es la ayuda de los Cassano que quieres casarte conmigo cuando amas a alguien más? — pregunto con seriedad.Nick retrocede aturdido y yo aprovecho para marcharme de la sala, para no estar con él a
La posesividad con la que me besa y sin mucha dificultad me levanta del suelo para llevarme hasta una superficie fría donde me rompe la ropa y con salvajismo besa mi cuello, pechos y abdomen, me dicen que será más rudo que antes.Pero, en vez de angustiarme o pedirle que se detenga, terminó quedándome a su merced, ansiando ser tocada por uno de los hombres con el que tengo una relación complicada y aun sabiéndolo, sigo cavando en este pozo donde ya no puedo ver la luz.— Solo yo puedo besarte, Marcela. — dice él besando mis piernas.— Noah…— Solo yo puedo romper tu maldita ropa para follarte. — dice él rompiendo mi ropa, para succionar con fuerza esa parte de mi cuerpo tan sensible y palpitante.De inmediato, de lo más profundo de mi garganta sale un sonido que puede escucharse en cada rincón de la casa, por lo que, cubro mi boca rápidame
Debería marcharme, lo sé, sobre todo, porque Nick podría aparecer en cualquier momento y no es buena idea tener sexo con uno de ellos, sin aclarar lo que siento por ambos. Pero, aquí estoy haciendo algo que la Marcela antes del secuestro no realizaría.Estoy actuando diferente, de eso no hay duda, porque sin darme cuenta, ya no quiero huir de esto. Porque si así fuera, me concentraría en comunicarme con los Cassano con el nuevo teléfono y me distanciaría de ellos, pero, lo que estoy haciendo es entrar más profundo a este pozo donde ya no intento salir.— ¿Qué es este lugar?— Mi lugar secreto. He habilitado ciertas casas donde hay un espacio oculto para poder hacer lo que tanto me gusta. — dice Noah, dejándome sobre una mesa de madera.Intento ver que hay a mi alrededor, pero, todo esta oscuro. Por lo que, me sorprende que Noah no haya tropezado mientras m
Estoy completamente loca, de eso, no hay duda. Pero, soy una loca que está siendo complacida y eso es suficiente para mí. Por eso, mientras mi cuerpo se estremece, me imagino en todas las cosas que podríamos experimentar y que sin duda, me ayudarían a olvidarme de Nick.‘Esa es mi prioridad ahora.’ me digo mentalmente.Noah no me decepciona. Estimulando mi cuerpo con cosas frías o calientes, húmedas o secas, hace que yo comprenda que no conozco mi cuerpo, per, él sí o al menos, sabe cómo explorarlo mientras lo conoce.— Que chica tan fuerte. Aún no has dicho la palabra clave. — dice Noah mientras yo ya he grito porque no me he recuperado de un orgasmo cuando sus estímulos me vuelven completamente loca, al entrar completamente en mí.— Por favor…— ¿Qué sucede, Marcela? — pregunta él y yo siento que en cualq
Alguien me carga y camina conmigo, lo que no sé es quien puede ser ni tampoco, porque su calor corporal calma tanto mi cuerpo. Es como si estuviera impregnada de un olor que relaja todo el cuerpo aunque este me duela tanto.— ¿Estás consciente ahora? — pregunta una voz que suena muy dulce para ser uno de los gemelos.— ¿Quién eres? — pregunta mientras me coloca sobre una cama que solo hace que mis heridas duelan.— El hombre que te folló hasta que te desmayaste. — susurra él.— Eres un…— Tenías una palabra, Marcela, ¿Por qué no la usaste?Por curiosa. Esa es la respuesta, no la usé porque fui muy curiosa y por eso, terminé desmayándome.Aunque quiero responderle, mi garganta está seca e incluso mis labios están muy agotados para poder usarlos. Por lo que, solo observo al causante de tanto c