Mientras que, en la azotea del hotel, Luz de Selene, se libraba un enfrentamiento entre dos poderosos hechiceros, a sus pies, el enfrentamiento entre los soldados del ejército de Arioch y los aliados de Alastor, se volvía cada vez más violento.Si bien los aliados del alfa resistían, conforme el tiempo pasaba y la agresividad de los enemigos empeoraba, el número de heridos aumentaba, sobre todo, en aquellas manadas que no contaban con todos sus guerreros.El primero en caer gravemente herido, fue el beta del alfa Rayner Volker, quien, por intentar proteger a su alfa, resultó gravemente herido, lo que debilitó notoriamente aquel grupo.Para protegerlos, Alastor envió a una pequeña unidad de sus guerreros para que los ayudaran a retroceder hasta la librería donde habían aparecido antes.Para mantenerlos a salvo, el alfa pidió apoyo a las manadas de Giovanni y Félix, quienes se encargaron de proteger el camino y de ayudar a los heridos.Para la sorpresa de Alastor, pese a que sus hombres
Entusiasmado, Eros asintió antes de transformarse para guiar a los soldados. Aníketos, por su parte, dio la orden de dejar pasar a los salvajes.Si bien al principio el cambio causó confusión, nadie se atrevió a desobedecer, por lo que pronto, los salvajes que ya no peleaban con los aliados comenzaron a retirarse.Rezando por no haber tomado la decisión equivocada, Aníketos pasó de su forma híbrida a su forma lobuna para unirse a Eros y a su propia gente.Con él, Eros, Cole y Neilan a la cabeza, pronto gran parte de la calle se vio despejada, sin embargo, el caos en el corazón de Altalune no daba tregua.― “¿Qué tan lejos está mi padre?” ―le preguntó Alastor a Eros― “Dijo que estaba cerca, sin embargo, también dijo que gracias a que la batalla se había extendido, estaban teniendo complicaciones para avanzar, sobre todo, por la falta de experiencia en combate de la loba de su alteza” ―Ante las palabras de Eros, Aníketos rugió con rabia.Mientras que a él le habían arruinado su infanc
Mientras que las cosas en el corazón de Altalune comenzaban a tranquilizarse, no muy lejos de ellos, el grupo de Dante esperaba expectantes el paso de los salvajes, pues debido a que Anna aún no despertaba y a que Arioch y Gael se habían negado a moverla debido al veneno de la plata, el grupo seguía plantado en el mismo lugar.― ¿Quieres dejar de pasearte así? ―le gruñó Gael a Armin, quien iba de un lado a otro con la mirada clavada en la única calle que corría por el lugar―Perdona que mi ansiedad de estar esperando a una mayúscula cantidad de salvajes te incomode ―Ante sus palabras, Gael soltó un bufido antes de rodar los ojos.―Miedoso ――Cállate ―gruñó Armin, quien apartó la mirada sólo para observar a Arioch, quien continuaba aferrado a las manos de Anna con Dante a su lado―Disculpe… Uhmm ¿Excelencia? ―lo llamó Gael― ¿Sí? ―preguntó el hombre con suavidad, sin molestarse en apartar la mirada del apacible rostro de Anna― ¿Qué pasará con los salvajes? ―preguntó Gael en voz queda
En silencio, Dante y Armin observaron a Gael.Por primera vez desde que lo conocían, el joven hechicero realmente parecía estar asustado y por más que lo intentaba, no podía apartar la mirada de aquella esfera.―N-No deberías estar tan preocupado, E-Emmet es fuerte y sabe lo que hace ―intentó tranquilizarlo Armin ―Él estará bien… ――No lo entiendes ―susurró Gael negando con la cabeza ―Confío en mi Emmet, pero… En un réquiem no hay medias tintas, o lo ganas todo o lo pierdes todo, además, el réquiem siempre te quita algo ――Eso si tú se lo permites ―dijo Arioch ―Sí luchas con seguridad y convicción, el réquiem es sólo una arena de batalla ―― ¿Conoce el conjuro? ―preguntó Gael frunciendo el ceño―Algo así, estudié diversos temas en mi juventud, incluso algunos libros de magia que el alfa Elián guarda en su biblioteca personal ―respondió AriochAnte aquellas palabras, tanto Gael y Armin se centraron en Dante, quien asintió.―Como primer alfa, mi abuelo decidió estar informado de todo lo
― “Oye, no, tranquilo, todo está bien” ―se apresuró a decir Basil ― “Entre mi gente, los de Guido y los que Caden dejó, ayudamos a Adriano a mantener el lugar a salvo, sin embargo, no te voy a negar que la situación fue terrible, no los vimos venir, entraron por el norte” ――Basil, sé honesto conmigo, ¿hubo pérdidas? ―― “Bueno, justo estábamos por verificar eso, te comunico con Marcia, está conmigo” ―― “¿A-Alastor?” ―gimoteó la mujer―Marcia, gracias a la Diosa, dime, ¿qué pasó? ―― “Ay Alastor, fue horrible, nos atacaron de la nada y el pánico se desató, llevar a la gente al refugio quedó descartado, tuvimos que reunirlos a todos en el pueblo y proteger el lugar mientras que los guerreros de nuestra manada y nuestros aliados se encargaban del resto…” ――Mar… ¿Hubo bajas? ―― “Aún no estamos seguros, pero casi perdimos a Carel… Él… Él estaba en la guardería con Chelsea, ya sabes, ayudándola con los pequeños, sin embargo, el lugar también fue atacado, y en un intento por darle tiempo
Dándose cuenta de lo brusco que había sido con su madre, Alastor cerró los ojos y se pasó la mano por su rostro con frustración antes de girarse hacia Idylla.―Perdóname ―le dijo con voz más suave ―Lo siento mucho mamá, es solo que Anna es… ――Lo más valioso que tienes, lo sé muy bien hijo mío, tú también eres mi primogénito ―susurró Idylla antes de acariciar su mejilla―Perdóname ―susurró Alastor antes de abrazar a su madre ―Diosa, no tienes idea de lo mucho que te eché de menos, me hacían falta tus abrazos… ――Oh, mi príncipe… ―sollozó Idylla―Pensé en buscarte tantas veces… ―― ¿Y por qué no lo hiciste? ¿Qué te lo impidió? ―preguntó Idylla aferrándose a él―Porque no sabía en quién confiar, estaba huyendo del loco que me golpeaba desde cachorro y del hombre que se suponía debía protegerme ―explicó Alastor con tristeza ― ¿De verdad crees que quería tener contacto con alguien del palacio? Si hablé con Keren, fue porque temía que ella pasara por lo mismo que yo había pasado ――Oh, car
Al escuchar las palabras del hechicero, todos dirigieron su mirada hacia la esfera, provocando que un pesado silencio se plantara en el lugar.Centrando toda su atención en aquella extraña esfera, aliados, soldados, enemigos y los pocos civiles que habían abandonado sus refugios por petición de Máximus, observaron como la esfera comenzó a disminuir poco a poco su tamaño al mismo tiempo que su color, cambiaba de un tétrico color negro, a un muy brillante blanco.― ¿Q-Qué está pasando? ―preguntó Zeth cubriendo sus ojos cuando, el brillo de la esfera hizo imposible que los lobos continuaran viéndola―Hay un ganador, los poderes de alguien están siendo arrebatados ―explicó Gael juntando sus dos manos en señal de súplica ―Por favor, mi amor, por favor vuelve a mí… ―susurróRepentinamente, la esfera desapareció y de la nada, una pequeña explosión silenciosa se produjo en lo alto del hotel ‘Luz de Selene’.― ¡Eh! ¿Qué es eso? ―preguntó un soldado cuando una pequeña esfera se elevó por encima
Por otro lado, perdiéndose de aquello, Gael corría a toda velocidad por las escaleras del hotel siendo seguido muy de cerca por Neilan y Ragnar.Al llegar a su meta, Gael abrió la puerta de una patada para ser recibido por Gerard y Desa, quien descansaba pacíficamente entre los brazos de su hermano.―Sólo está agotada, al parecer fue un enfrentamiento muy intenso ―dijo Gerard al ver el rostro preocupado de los lobos―Eso veo… ―masculló Gael, quien observaba con horror la destrucción que el enfrentamiento entre Emmet y Samael había dejado atrás―Es increíble que lugar haya resistido… ―susurró Neilan, quien observaba a su alrededor―Mira, ahí está Samael ―le indicó Ragnar ― ¿Podemos llevárnoslo? ―le preguntó a Gerard―Sí, está inconsciente, pero lo he atado con magia solo por si acaso ―dijo Gerard, quien le acomodó un mechón de cabello a su hermana cuando este, resbaló por su frente ―Lo hiciste increíble, me alegra que seas tú la maestra de nuestro aquelarre, estoy muy orgulloso de ti―