―Eso creo, sí ―dijo Keren suavemente ―Mamá, ¿crees que Chaos sienta el vínculo familiar? ――No, no lo creo ―dijo Idylla con tono pensativo ―Si ese fuera el caso, Arioch ya la habría interrogado hace mucho ――Buen punto… ――Me gustaría saber que piensa Max al respecto ―agregó Idylla con un suspiro ―Sin embargo ¿Crees que ella esté en peligro? ――En absoluto ―respondió Keren con una sonrisa ―Zeth dijo que el conjuro glamour de Gerard es poderoso, además, me parece que es reforzado por los hechiceros de la manada de mi hermano, Zeth me dijo que, difícilmente Mendel la descubriría―Hablas de los padres de Anya, ¿verdad? ―preguntó Idylla con una sonrisa ― ¿Sabes? Ella me habla mucho de ellos, sobre todo, de Gabriel, parece alguien muy interesante, me gustaría conocerlo ―― ¿Verdad que sí mamá? ―preguntó Keren emocionada ―Anya dice que es tan ocurrente, que es fácil subestimarlo, pero, dice que, en realidad, es alguien muy sabio ――Veo que has estado usando el enlace mental ―dijo Idylla mir
―Deja de hacer eso Anna ―le pidió Zeth a la joven, la cual, jugaba con una pelota antiestrés, lanzándola hacia el techo una y otra vez― ¿Qué cosa? ―preguntó Anna antes de lanzar la pelota nuevamente―Eso ―gruñó Zeth irritado―Lo lamento querido tío, no te molestaría tanto si me dieras algo que hacer ―dijo Anna apretando la pelota con tal fuerza, que no pudo evitar conseguir romperla―Te dije que esa pelota no iba a funcionar ―dijo Dante riendo al ver la cara de confusión que Anna y Zeth tenían al ver la pelota destrozada en la mano de la joven, mientras que Nero, reía a carcajadas―Anna, de los tres, eres la que más debería mantener un perfil bajo, lo último que necesitamos es que Arioch decida ponerte una gamma ―dijo Zeth pasándose los dedos por su cabello con frustración―Por favor, Zeth, hasta el abuelo cree que eso es algo ridículo, ¡soy una omega! ――Eso no quiere decir que debas ser tan des… ―Al escuchar que alguien llamaba a la puerta, Zeth se interrumpió, mientras que Anna,
Ante las palabras de Dante, Idylla bajó nuevamente su cuchara y clavó sus ojos en Dante.― ¿El alfa? ¿Estás hablando de mi hijo? ―preguntó con preocupación―Escucha abuela, el abuelo y papá dijeron que lo mejor era no contarte nada todavía, el abuelo cree que podría alterarte y no podemos permitir eso ahora ―dijo Anna pasando su mirada de Idylla hacia Keren, quien asintió ―Ellos… Ellos te lo contarán todo, sin embargo, debes saber que papá fue engañado con una ilusión para que odiara a mi abuelo ―― ¿Por eso Alastor se volvió tan rebelde? ―preguntó Idylla en un susurro―Sí ―respondió Anna ―Pasó cuando el abuelo fue a socorrer a la manada del alfa Pavel, fue ahí que aprovecharon para engañar a mi papá ――Por Selene… ―susurró Idylla ― ¿Eso está relacionado con que Alastor se transformara a tan temprana edad? ―Cuando Anna asintió, Idylla palideció ligeramente.―Alastor… ―susurró ― ¿Qué fue lo que pasó? ―― ¿A qué edad se transformó el príncipe Alastor? ―le preguntó Sandrine a Nero en vo
Ante la vaga respuesta de su nieta, Máximus se acercó a ella un par de pasos, pero, justo cuando estaba por responder, un suave brillo en los ojos de Anna captó su atención, por lo que optó por guardar silencio.― ¿Sucede algo abuelo? ―preguntó Anna extrañada por el comportamiento del rey―Es solo que noto algo diferente en ti, dime, ¿sucedió algo en tu viaje pequeña? ―preguntó Máximus antes de clavar sus ojos en Dante, quien, ante el aura del hombre, retrocedió un par de pasos―Basta abuelo ―dijo Anna riendo, pues al parecer, el poderoso Damon por fin había encontrado un aura a la cual temerle ―Sí, nos pasó algo en el viaje, y es de lo que hemos venido a hablarte, pero, antes de eso ―dijo quitándose su mochila de los hombros para rebuscar algo en ella ―Mi abuela y la tía Keren te envían esto, y ambas, quieren que sepas que te echan de menos ―dijo tendiéndole un sobre bastante grueso― ¿Cómo está tu abuela? ―preguntó Máximus tomando el sobre―Estará mejor cuando sepa que le estás caus
En silencio y con los ojos clavados en el dispositivo, todos esperaron ansiosos la respuesta del antiguo rey de Arcadia.Cuando el primer timbre resonó, Anna tragó saliva. Al segundo, Gael y Zeth se aclararon la garganta al mismo tiempo. Al tercero, Ragnar se revolvió nervioso. Al cuarto, Máximus gruñó con fastidio, sin embargo, al quinto, una voz profunda y masculina atendió al fin.― “¿Sí?” ――Hola papá, habla Max ―― “¿Max? Por favor, ¿acaso cree que…?” ――Bajo aquella luna llena de diciembre, Selene aceptó mi juramento, y bendijo mi reinado con la más hermosa lluvia de estrellas… ―recitó Máximus― “Ay por la diosa… Max” ―susurró el hombre al otro lado de la línea ― “¡Eleonor! ¡Eleonor, ven aquí! ¡Es nuestro Max” ―Al escuchar a su padre gritar a todo pulmón, Máximus sonrió divertido.― “¿Max? Hijo, ¿de verdad eres tú?” ―preguntó una mujer, cuya voz, parecía indicar que estaba a punto de llorar―Sí mamá, soy yo, tu Maxi ―dijo el rey en voz baja, sin embargo, aquello no escapó a los
Ante las palabras de Anna y Gael, la habitación se sumió en un breve silencio.―Cuéntanos papá, ¿qué más pasó? ―preguntó Máximus al cabo de un rato― “Creo que lo sabes Max” ―dijo Arsen tras un suspiro ― “Tras su confesión, condené a Nimbrod a muerte por usar magia oscura en mi hijo, sin embargo, sus últimas palabras fueron las siguientes:“Aunque yo muera, no podrás cambiarlas cosas, Arioch fue concebido con el único propósito de eliminar a su propia familia, y por supuesto, el de condenar a los hombres lobo, y solamente porque yo así lo quise. Una vez que el poder del lobo esté completo, comenzará la cuenta atrás, primero, tu familia, después, los de tu raza” ―citó Arsen ―Honestamente, creí que solo blofeaba, pues según Tania, una maldición se elimina cuando su autor muere, por lo que creí que, con su muerte, todo terminaría, pero me equivoqué…» Tristemente, Arioch no mejoró, al contrario, su comportamiento fue empeorando, por lo que fui a buscar a Tania, quien me dijo que Arioch e
En medio de una horrible tormenta, sentada en el suelo de un refugio, una joven loba de cabello castaño y ojos color avellana, intentaba protegerse del frío con una delgada manta mientras observaba como, en una pequeña mesa de madera, su hermano jugaba al ajedrez con un atractivo joven de cabello oscuro y ojos dorados como el sol.Desde que lo había conocido, el tipo le había parecido pedante y sumamente molesto, pues este, se dedicaba a acosarla a diario, sin embargo, en ese momento, el joven no tenía ojos para nadie más, solo para el pequeño que se estremecía con cada trueno que resonaba en la distancia.―Tranquilo, ponte estos ―dijo el joven sacándose unos audífonos bluetooth de su bolsillo ―No sé si te guste el tipo de música que escucho, pero, creo que será mejor que los truenos ――Gracias… ―masculló el niño mientras se colocaba los audífonosSintiendo curiosidad porqué tipo de música escucharía aquel joven presumido, la castaña mantuvo sus ojos clavados en su hermano, el cual, s
Eran alrededor de las ocho de la mañana en la hermosa isla de Arcadia, donde sus habitantes, iban y venían por las calles de los diferentes distritos para cumplir con sus deberes diarios.Al igual que los civiles, en el sagrado palacio de Interlunio, todos sus habitantes habían comenzado a realizar sus tareas desde muy temprano, sobre todo, el ejército imperial, el cual, cumplía con su rutina diaria de entrenamientos y vigilancia, pues, tras el secuestro del rey, esta se había endurecido.Pese a que habían capturado al culpable, el paradero del rey era aún desconocido, por lo que, el palacio, se vigilaba incluso tras sus murallas.Los encargados de aquella tarea, eran los nuevos cadetes, los cuales, eran supervisados por los soldados más experimentados.― ¡Oye! ¡Damián! ―le gritó un joven de tez morena a un joven de cabello oscuro que tenía algunas mechas grises ―Deja de distraerte con las criadas, te meterás en problemas si Aidée te descubre ―― ¿Qué sucede? ¿Acaso te gusta la nueva?