Ha pasado casi una semana desde la última visión; aunque me había percatado de su ausencia, la verdad es que no las extrañaba. También ha pasado una semana desde que leí la carta de Raje, aunque he caminado algunos días por la acera contraria al café, aún no me atrevo a cruzar. Lo veo sentado, algunas veces solo, otras acompañado por una hermosa chica pero simplemente no puedo dar el paso. Pensé que iba a ser más fácil. Cuando leí su carta me quité un peso de encima. Necesitaba escuchar exactamente lo que me dijo y supuse que acercarme a él sería más sencillo pero no es así. De pie en la acera lo observo y siento el casi olvidado mareo que me provoca la inminencia de una la visión.“ - Analí, quieres que salgamos a cenar? Podemos celebrar tu ascenso, es un gran paso. - Veo el entusiasmo de mi novio y no logro sentirme igual. Aunque debería abrazarlo y besarlo de felicidad, estoy muy lejos de sentir eso. Es un gran paso, sí, pero un paso que me acerca a mi venganza. Ya no puedo mirar
Ha pasado más de una semana desde que dejé de buscarla. No he vuelto a ver a Estela tampoco y no he hecho ningún movimiento por encontrarlas. Sin embargo, y a pesar de los pronósticos de Emiliano, no he recaído en las viejas prácticas de reclusión y ostracismo de antes. Comprendo perfectamente que no la voy a encontrar mientras ella no quiera que lo haga y, cuando lo haga, debo estar en la mejor forma posible, libre de recuerdos, resentimientos y dolor.Correr me ha resultado bastante terapéutico. Me quito los tenis mientras tomo agua. Ha sido un entrenamiento muy demandante. Un baño reconfortante y saldré a comer con Emiliano. Como dije, ya no más reclusión. Me dirijo al baño quitándome la ropa cuando comienza la inquietud. Tenía días sin sentirla. Por lo que me toma unos segundos comprender de qué se trata. “ Subo a su piso para verla. Analí trabaja ahora directamente con mi padrino, pero eso, lejos de darle la emoción del logro conseguido, parece estresarla más. Cuando llego a
“ Me miro al espejo y no soy más que un remedo de la mujer que era antes. - Por qué dejé que las cosas llegaran a este punto? - Me digo mirando la imagen frente a mí. Escucho el ruido de la llave abriendo la puerta. Ya regresó y saberlo me estruja el alma. Ya no quiero seguir así. Esto tiene que terminar. Él pasa frente a la puerta y nos miramos fugazmente. No me muevo de mi sitio y continúa su camino. Irá directo a la cocina y luego al estudio donde ha dormido los últimos días. Tristemente no tengo la intención de seguirlo. “No sé qué pasa con Analí. Puedo sentir su tristeza y dolor. Algo oprime su corazón y la aleja poco a poco de él. Quisiera que las visiones pararan. Sigo sin entender qué pasa o por qué. Quisiera, quisiera haber hablado con él sobre esto. Quisiera saber qué ve él, o si vemos lo mismo. Quisiera entender por qué está pasando todo esto. - Que está tratando de decirme el destino? -***Sentado frente al televisor comienzo a pensar en mi chica escurridiza. Las imágen
He revisado mi bandeja de entrada durante dos semanas y aún no llega nada.Bajo las escaleras lentamente con la tristeza reflejada en los ojos. Mamá está en la cocina. Un aroma diferente abre mis fosas nasales y despierta mis sentidos. - Confites de naranja - dice mamá con una sonrisa.- Confites de naranja? - repito tratando de recordar de qué se trata. - Acércate, a veces el destino necesita del instinto y la voluntad para cumplirse. - no digo nada pero sé exactamente a qué se refiere. Me acerco a ella y me abraza. Como siempre, su calidez llena mi corazón de paz. Nos sentamos juntas por unos segundos pero después se levanta para servirme un suculento plato de la comida que preparó. El primer bocado llena mi boca de un sabor amargo que no llega a ser desagradable. La fuerza de la cáscara de naranja sobresale sobre los demás sabores. Necesito un segundo bocado para comprender que la dulzura del platillo viene después. Finalmente un tercer bocado me transporta a un día específi
Presenté mis papeles de renuncia y aunque dejo buenas amistades aquí, pocas, pero buenas, estoy feliz. Me dirijo al ascensor ejecutivo y decido subir al piso 23 a preguntar por mi situación. Sé que debería esperar una respuesta, pero por lo menos quiero preguntar quien es el nuevo director, tengo entendido que el señor Olvera ya no está activo. Otra vez, justo cuando pienso en ese apellido una punzada me atraviesa el corazón. No le doy la menor importancia porque cuando oprimo el botón para que el ascensor se detenga un estremecimiento extraño recorre todo mi cuerpo. La piel de la nuca, los brazos y las piernas se eriza y coloco una mano sobre mi pecho tratando de sostener mi corazón que parece querer salir de su encierro. Pareciera que la cercanía del ascensor aumenta la opresión en mi pecho. Doy respiraciones profundas tratando de acaparar aire y estoy a punto de alejarme del ascensor cuando se detiene frente a mi. Bajo la cabeza tratando de tranquilizarme cuando un cuerpo a esca
- Pero, por qué, Jesan? Por qué no hablaste con él, amiga? -Estela me mira fijamente. El tono de sus palabras taladran mi pecho que se duele por el reproche. Le doy un sorbo grande a mi mocaccino con extra chocolate y suspiro. No necesito más reproches. Ya bastante lo hago yo. Cuando salí de presentar mi renuncia decidí subir a contabilidad para quizá, preguntar sobre mi solicitud. Jamás imaginé que eso propiciaría el encuentro con Logan. En el momento en que lo dejé en el ascensor, le marqué enseguida a Estela, necesitaba verla inmediatamente.- Porque, aunque fue fugaz, pude notar el brillo que cruzó por sus ojos en cuanto dije “Analí”. Ella es muy importante para él y no quiero interponerme en esa relación, por mucho que me interese descubrir este misterio. - digo sin mirarla. Pero lo que quise decir fue que no quiero descubrir cuán importante es ella para Logan, porque, aunque ya lo sé, en cuanto él me diga que ama a Analí, mi corazón se romperá en mil pedazos, pienso dando u
- Hola extraño. Soy Jesan. Con acentuación en la penúltima sílaba. - pronuncio con voz trémula mirándolo fijamente. Logan sonríe con esa sonrisa que alborota todo el mariposero y se acerca a mí para tratar de besarme. Contra todo pronóstico, levanto la mano y la interpongo entre nosotros para detenerlo. Su sonrisa se borra y me mira sin entender. Logan detiene el movimiento y espera a que yo diga algo. - Yo, yo no quiero interponerme entre tú y, y Analí. - bajo la mirada para que no vea las lágrimas que intentan salir de mis ojos. Decir esto me costó mucho trabajo pues tengo mucho miedo de su respuesta. Él me toma de la barbilla y levanta mi rostro. Algo en su cara me resulta familiar pero no logro definir de qué se trata. Lo observo y me encuentro con su mirada cálida y ojos profundos. Descubro que Logan posee una presencia atractiva que va más allá de la simple apariencia física. Su encanto radica en una combinación de confianza, carisma y un atractivo distintivo que lo hace des
Un flashazo de sorpresa me aguijonea cuando la escucho. Cómo que hace mucho tiempo? - Nuestros destinos se cruzaron hace mucho tiempo y nos reconocimos por eso? A qué se refiere? - pregunto tratando de entender un poco. Cómo podría afirmar algo así? Jesan me mira fijamente por un tiempo que se prolonga demasiado. Me da la impresión de que quiere decirme algo que le cuesta mucho trabajo externar. Hago círculos suaves con mi dedo en el dorso de su mano tratando de infundirle confianza. Ella da un largo suspiro y lo que dice me deja igual de intrigado que el comentario anterior. - Mi mamá, ella, pues, ella tiene una cosa que, pues - Ante su balbuceo, la interrumpo para decirle que no es necesario que me lo diga ahora si no está convencida. Aunque yo pienso que eventualmente tendremos que hablar de eso y todo lo que pueda explicar nuestra situación actual. Y si el tema de su mamá puede hacerlo, me tendrá que decir. - Donde creciste, Jesan? - cambio el rumbo de la conversación tratan