Ya era mitad de año. Los días monótonos y aburridos se repetían en la vida de Sara nuevamente. Le quedaban solo dos años para salir del instituto y era algo que Sara quería. Era lo que estaba pensando mientras salía de la biblioteca con Naomi y que ahora se dirigían en dirección hacia Eilen.
-¿A qué te quieres dedicar Eilen?. Pregunto Naomi
-Mmm...la verdad no sé. Supongo que policía.
-Lo dices por tu papá y hermano.
-Sí, desde niño me han dicho que sea policía igual que ellos. Supongo que me gusta. ¿y tú has pensado?
-Aaahh. A mi me gustaría ser una bailarina profesional. Dijo Naomi emocionada y Eilen de inmediato se puso a reír, Naomi suspiro.- Y tú Sara, ¿Qué quieres ser?
-¿Qué?. -Dijo un poco distraída.
-¿A qué te quieres dedicar después que salgas del instituto?
-Ah, no lo he pensado.
-¿Te pasa algo Sara? .-Preguntó Naomi.
-Tengo un problema.
-¿Es por qué le dijiste “cara de afeminado” a Noah?. -Dijo Eilen
-Oh, ¿En serio?, por eso en la mañana durante la clase te miraba. ¿Qué le hiciste?
-Lo asustaste. -Dijo Eilen riéndose.
-No, no eso, pero...¿Ustedes creen que me deba disculpar?
-¿Tú, Sara disculpándose?, ¿Qué le pasó a mi amiga?. -Dijo Naomi
-No es necesario, a Noah no le afecta.
-No sabía que eras amigo de él. -Dijo Sara
-Bueno, muy amigo no soy de él. De vez en cuanto hablamos, pero es simpático.
-Entonces, ¿Cuál es el problema? .- Dijo Naomi.
-Es que, siento...que alguien me está siguiendo.
-¿QUÉ?. -Tanto Naomi como Eilen quedaron impactados.- ¿Cómo, por qué?.
-No lo sé y es cerca de mi casa. Pero lo siento.
-Esto es malo. ¿Le contaste a tu mamá?
-No quiero decirle.
-Entonces qué vas a hacer? .-Preguntó Eilen.
-Voy a esperar, quizás soy yo la que se está equivocando. Me voy primero, en la biblioteca se equivocaron en pasarme el libro.
Sara se separó de Naomi y Eilen, ya que se dirigía en dirección hacia la biblioteca, porque se dio cuenta que le pasaron un libro equivocado y lo necesitaba urgentemente. Al entrar pudo observar que en la biblioteca que estaba abierta, se puso en la fila.
-Hola chica ruda.
Sara se dio la vuelta.-¿Me estás siguiendo?
-No, tú me estás siguiendo. Yo te vi entrar. -Dijo Noah
-Oye...lo de ayer lo siento. -Dijo Sara. Y Noah quedó con los ojos abiertos.
-JAJAJAJAJA. No me preocupa eso.
-Hola, vengo a reclamar sobre un libro. Yo no pedí este. -Dijo Sara ignorando a Noah y pasándole el comprobante.
-No, está todo bien. Tú te equivocaste. -Dijo la joven en el mesón.
-¿Qué?¿Que yo me equivoque?. Pero si ustedes me dieron el maldito libro, lo quiero cambiar.
-Tienes que esperar 5 días para cambiar el libro.
-No me jodas. Necesito el libro hoy.
-Lo siento, pero este comprobante no ayuda, solo tendrás que esperar 5 días. -Dijo la joven, al instante Sara tiró el libro al mesón enfrente a la joven. Haciendo que las personas que estaban alrededor captaron su atención.
-Ustedes se equivocaron, yo no, así que cambien el libro. -Dijo Sara, mientras que la joven dio un suspiro de forma molesta.
-¿Cuándo pediste el libro?
-Hoy en la mañana.
-Ya veo, había otra persona a esa hora, pero yo no me responsabilizo de ello. Lo siento, no puedo hacer nada.
-¡¿QUÉ?!. Dijo Sara furiosa.
-Esta bien, Esta bien. -Dijo Noah calmando a Sara.-¿Qué libro necesitas?
-El de literatura.
-Yo te lo paso. -Dijo Noah y Sara lo miró con confusión.
-No te creas listo.
-Hablo en serio. Yo ya no lo necesito. -Dijo Noah y tomó a Sara del brazo para sacarla de la fila y de la joven. Sara lo miró con indiferencia. -Así que, no es necesario llamar la atención.
-No lo quiero.
-¿Qué?. Hablas en serio. O-osea..
-Osea, no quiero nada que venga de tí.
-¿Entonces qué harás?
-Eso no te interesa.
-¡Oye, niña tonta!. -Dijo Noah haciendo que Sara lo mirara con irritación. -Escúchame bien, vas a recibir el libro y no dirás nada. -Término Noah, pero fue en vano, ya que pudo ver a una Sara con mayor enojo. Al notarlo, Noah tragó saliva.
-¿Acaso crees que me puedes dar órdenes?. -Dijo enojada.- Ya me canse de esto. -Y se dio media vuelta, alejándose de Noah. Al salir de la biblioteca, a los segundos escuchó una voz.
-¡Oye, Sara!. Dijo Noah
-Ah!, que molesto eres.
-Lo siento, pero toma mi generosa y humilde propuesta.
-AH, Bueno.
-¿Eso es un sí?. Dijo Noah sonriendo.
-Haz lo que quieras. -Dijo Sara mientras daba la media vuelta, caminando hacia el salón. Noah se dibujó una sonrisa durante seguía los pasos de Sara.- Ah, otra cosa, no quiero que me vean entrando contigo al salón.
-¿Por qué, dañaría tu reputación?. -Sara lo miró con enojo e inmediatamente Noah levando las manos como si no hiciera nada.-Esta bien, si tú lo dices. -Y vio a Sara desapareciendo entre los pasillos.
Durante el transcurso de la clase, Sara se dio cuenta que Naomi tenía razón en sus palabras, en que no se había dado cuenta. Resultaba que Noah la miraba disimuladamente, pero al fin y al cabo no resultaba porque ya lo sabía. Esa actitud de Noah la estaba molestando, porque no quería relacionarse con nadie que no fuera su círculo cercano de amistades. Quería terminar luego aquella molestia llamada Noah.
Pasó la hora y la clase dio su fin, la gran mayoría del salón salieron a tomar aire o comprar. Mientras que Sara se quedó en su asiento esperando la siguiente clase, cuando escucho unos pasos aproximarse hacia ella.
-Aquí está lo prometido. -Dijo Noah dejando el libro sobre la mesa. Los que estaban en el salón captaron totalmente su atención, ya que fue muy inusual y de la nada se empezó a escuchar “otra víctima” de forma burla. Al darse cuenta Sara, ignoro a Noah y dio media vuelta su cabeza mirando hacia la ventana, Noah le sonrió y se alejó de ella.
-¿Qué significa esto?. Dijo Naomi, haciendo que Sara diera un pequeño salto de susto.
-¿En qué momento llegaste?
-Aquí está pasando algo que no estoy enterada
-¿De qué estás hablando?
-Vamos, acompáñame a comprar. -Tomó a Sara del brazo y la llevó a una de tienda de comida del instituto.- Dime la verdad. ¿Qué pasó con Noah y tú?. Hace unos días ni siquiera se miraban y ahora te pasa un libro.
-Ah eso, no es nada en especial. Solo que me vio en la biblioteca y me ayudó.
-Primero las miradas, después te quieres disculpar y ahora te ayuda?
-No seas exagerada. Si no le quiero hablar, en cuanto le pase el libro ya no habrá motivo de hablarle.
-Osea, no me refiero que sea malo, pero…
-Pero…
-Ah, olvidalo. Estoy diciendo disparates.
El día largo de clases término para Sara y se dirigió directamente hacia su casa, las preocupaciones que tenía sobre el sospechoso acosador seguían en pie, más aún cuando estaba caminando sola por la calle, la idea de un secuestro o desaparición no se le escapaba en la mente de Sara. También simplemente podría ser una paranoia que la atormentaba. Cuando de repente ese sentimiento y preocupación se movieron, por su espalda, un poco lejos de ella, sintió ese algo mirándola. De un instante a otro da media vuelta pero no ve a nadie, los pasos apresuraron aún más, ya que visualizo a una persona escondida en un auto, hasta pudo sentir su corazón se había detenido. Sin pensarlo empezó a correr tomando cualquier atajo posible hasta que se metió en una calle en el que pudo visualizar algunas personas en ella. Se detuvo mientras estaba recuperando el aliento, pero sin descanso alguno ve que alguien estaba parado detrás de ella y le toca el hombro. De inmediato, Sara saca de su bolso un Spray de pimienta y sin pensarlo lo tira hacia aquella persona que está detrás de ella.
-AAHH. M****A!.-Dijo Noah tapándose con los ojos y Sara quedó en Shock, por ninguna razón en el mundo pensaría que fue Noah.
-AAHH. MIERDA!.-Dijo Noah tapándose con los ojos y Sara quedó en Shock, por ninguna razón en el mundo pensaría que fue Noah.-¡Deja de seguirme!- Dijo Sara enojada y más porque se había asustado un montón.-¿Qué?...yo no...te estaba siguiendo. -Dijo Noah quejándose del ardor que tenía en un ojo producto del gas pimienta.-¿Qué, entonces quién era..?.-Sara no conocía a Noah, pero estaba segura que no estaba mintiendo. Después de unos segundos, Sara se dio cuenta de la situación en la que estaba Noah, que aún se estaba quejando.- ¿Estás bien?-Es la primera vez que tengo gas pimienta e
-Te dije que no te quería cerca. -Dijo seria.- Me voy.-Espera, ¿Qué? .-Dijo Eilen. -¿Te vas?, acompáñame a la enfermería.-Tú deberías de hacerte responsable, yo no le pegue.-Puedo ir yo solo. -Dijo Noah recogiendo su mochila del suelo.-Nos vemos.-Se dio media vuelta y empezó a avanzar.-Sara acompañalo. -Dijo susurrando.-Ve tú.-Vamos, no lo quiero dejar solo así y me tengo que ir ahora. -Dijo mostrando una sonrisa- Esta bien nos vemos.Noah había caminado rápido, ya que se encontraba sentado en una camilla con hielo en su cara.
-Hasta aquí llego, nos vemos.- Se despidió Naomi de los dos, dejándolos solos.Sara siguió su camino en silencio, detrás de ella Noah seguía sus pasos en un silencio incómodo.-Sara, ¿Estás bien?.-Deja de preguntarme lo mismo, es estresante.-Tu mano cómo está.-¿Qué? .-Se detuvo mirándolo.-Le diste un gran golpe a Marco. Tu mano no debe estar intacta.-Haciendo que Sara suspirara.-¿Qué eres?¿Mi abuelo?. No me voy a morir por eso.-Se da vuelta de forma molesta y empieza a caminar. Los días de suspensión habían terminado para Sara y para Marco. Hoy retomaban las clases. Las miradas hicieron presencia alrededor de Sara, en la cual aún les molestaba. En ellas no se encontraba Noah, ¿Habrá faltado de nuevo a clases?, era un tema que no le era de importancia, pero, ¿Por qué su nombre no desaparece de su mente?. Caminando por los pasillos, a lo lejos, pudo observar la presencia de aquel nombre que estaba en tendencia en su mente.-Hey.- Pero Noah permanecía en silencio, como si solo fuera un ruido molesto del viento.-¿Estás enojado?-Sara...tú ganas.-Noah.-¿Por qué no me avisaste?-NoahCapítulo 7
-Que desperdicio de tiempo.-Le lanzó una sonrisa irónica.Se aproximaron a un pequeño parque trasero que tenía el edificio que le había indicado Sara.-¿Cómo estás? .-Preguntó Noah, haciendo que suspirara un poco molesta.-Bien.-¿Por qué has faltado hoy a clases?-No es de tu incumbencia.-Lo siento por dejarte sola ayer.-Yo te dije que te fueras.-¿Qué tienes con él?-Hablo sin más hacia Sara-¿Te gusta?-¿Y si as&i
Narrador en primera persona:SaraAntes de conocerte sabía todo lo que quería, y sabía lo fuerte que era, nunca me había sentido tan débil a pesar de todas las cosas que tuve que vivir. Sentirme débil y volver a tener que sentirme fuerte, todo yo sola de nuevo, fue una de las cosas más feas que tuve que pasar en mi vida, ver la realidad y el tiempo en que me mentiste. Dude de mi y nunca lo había hecho, nunca sentí que no podía más.Conocí a Alan en un mini bar clandestino en la ciudad. En ella, presentaban pequeños grupos que no eran conocidos por todos, cuando pasaron al escenario lo vi. Era de estatura alta, cabello negro y largo que le lleva no mas hacia su cuello. Alan era el guitarrista principal de su pequeña banda. En tan solo segundos,
Narrador omnisciente-¿Por qué estás tan roja? .-Preguntó Noah a Sara.-¿Estás enferma?-No lo estoy.-No te creo.-Se acercó más hacia Sara, mientras que ella se puso nerviosa. No tenía ni idea de el por qué se puso de nerviosa, en el momento en que vio a Noah, un fuerte latido en su corazón se hizo presente, ahora es ella que estaba nerviosa, no se lo creía.-¿O acaso estás pensando el beso que me diste la otra noche?.-Se le saltó el corazón de Sara y le dio un golpe en el estómago a Noah, haciendo que el se retorciera del dolor momentáneo.-Claro que no.-Aunque debo admitirlo, e
-Que miedo. Algunas veces hablas como un viejo, siento que tienes doble alma.-Creo que tengo que cambiar la mala imagen que me tienes.-Aquí las parejas enamoradas pasan el tiempo al lado del agua, o también cuando rompen.-Ve a Noah como se rie.-O amigos como nosotros.-¿Aún me ves como un amigo?. Estaba esperando que nuestros sentimientos fueran mutuos. Pero no puedes porque eres tonta. Debería enseñarte.-Se detuvo unos segundos para mirarla.-Me gustas.-Ya veo, te gusto. Ya lo sé. Puedo verlo en esos ojos cafes oscuros.-Me gustas mucho, Sara.-Lo sé.-Se tomó unos segundos para continuar, como si tuviera un gran dis