Ya había llegado el aniversario del instituto y todos los cursos estaban con sus preparativos ya armados y todos daban una gratificante alegría y emociones juveniles. En cuanto a la situación del salón donde estaba Sara, las cosas ya se habían calmado en cuando a su regreso, además estaban enfocados en las actividades.
-¿A qué hora es el concurso Naomi?. -Preguntó Sara.
-Empieza a las 3 de la tarde. ¿Cuánto me queda?
-Aun quedan 2 horas.
-De todas formas. La hora pasa demasiado rápido. -Mientras Naomi estaba instalando en la mesa accesorios de maquillaje, extensiones de cabello y la situación era similar a las demás, estaban en un salón grande en donde había más participantes.-Oye, ¿Tú crees que me coloque relleno en el brasier?
-No es necesario, se va a ver raro. -A lo lejos, Sara vio que unas estudiantes miraban en forma de burla en dirección hacia Naomi.
-¿Cómo te puedes presentar así?, ¿Acaso no tienes vergüenza?. -Preguntó Louisa de forma irónica.
-¿Sara me dijiste algo?
-No, pero creo que escuché un ruido molesto.
-Oye, te-
-Sara! Naomi!. Tanto tiempo, ya llegue. Dijo Emy sonriendo.
-Hola Emy, ¿Cómo estas?. Pregunto Naomi.
-Bien. Ah Louisa, ¿Qué haces aquí?, deja de perder el tiempo.- Louisa dio una mirada de disgusto y se dio media vuelta.-¿Naomi estás preparada?
-Eso creo.
-Vamos, quiero ánimos y no tomes en cuenta lo que opinen los demás. Además te voy a dejar reluciente.
-Tiene razón Emy, tienes que estar segura.
-Exacto, así que empecemos ya. -Emy dejó un bolso con maquillaje y productos de belleza.
-Sí, tienen razón chicas, así que Emy este cuerpo es tuyo. -Entre las tres se vieron.-Eso sono raro.
-Bien, es mejor que me vaya, voy a ver si Eilen necesita ayuda. Buena suerte.
-Nos vemos. -Dijo Naomi y Emy.
Sara caminaba por los pasillos y observaba a su alrededor, todo era igual que años anteriores se mantenía la alegría, parejas aprovechando un día relajado y que los inspectores no le tomaran atención, otros aprovechando su último año de escuela para así obtener un lindo recuerdos que al pasar los años se transformaran en nostalgia. Desde a lo lejos pudo ver a Eilen con un grupo de su sala afuera, precisamente el patio de la escuela, en que estaban arreglando los últimos detalles de la tienda.
-Hola.
-Hey, Sara, ¿Estabas con Naomi?.
-Sí, ahora Emy la está arreglando. ¿Necesitas ayuda?
-No, ya estamos por terminar, pero cambiaron los turnos, tú vas a empezar a atender.
-Esta bien.
-Sara puedes tener mi botella, tengo las manos ocupadas. -Dijo Eilen, Sara sin decir nada, obedeció a su amigo y tomó la botella.
-Oye Sara, ¿Es verdad que fuiste internada?. -Dijo Marco acercándose a ella.
-¿Quién te dijo eso?. -Respondió ella.
-Están por todas partes, y…¿Los rumores son ciertos?.
-Eso no es de tu incumbencia.
-¿Entonces es verdad?. -Dijo Marco de forma irónica.
-Oye Marco!, ven ayudarme aquí. -Dijo Eilen distrayendo a Marco, él le hizo caso y miró a Sara alejándose.
Suspiró de forma molesta y se dirigió hacia la pequeña tienda de chocolates que tenía que atender, ya que su curso preparó para el aniversario, se puso su uniforme y se acercó hacia la parte delantera de la tienda.
-¡Vamos a esforzarnos hoy Sara!. -Dijo una muchacha al lado suyo mostrándole una sonrisa. Sara con una cara de rareza asintió, ya que no la conocía o por lo menos no le hizo un parecido, pero la muchacha sabía de ella y se dio cuenta que no conocía a la gran parte de su curso, solo unos pocos, por lo cual quedó un poco atónita ante la situación porque ya llevaba dos años con los mismos de siempre.
El aniversario dio inicio y las personas paseaban hacia las diversas tiendas que se presentaban en ese lugar uno de ellos eran tiendas de juegos, en otros lugares tiendas de artes y tiendas de comidas. Las horas corrían y el concurso de belleza ya estaba dando inicio, los espectadores se estaban acercando hacia el escenario y las participantes emocionadas y un poco ansiosas hacia la apertura del concurso.
-Sara ya está por empezar el concurso, vamos. -Dijo Eilen.
-Sí ya voy. -Dijo Sara mientras que estaba guardando sus cosas ya que su turno ya había acabado. Los dos se acercaron lo más posible hacia el escenario para ver a su amiga, al llegar notaron que que el concurso ya había comenzado, el presentador dio su bienvenida a todos los que estaban presentes; luego hacia los jueces y después dio el recibimiento de la primera participante, la cual hizo movimientos de gimnasia rítmica; la siguiente canto y su voz hipnotizó a los espectadores; otra podía hacer maniobras a su perro doméstico; la penúltima que al igual que la segunda cantó, pero en comparación a la otra esta cantó horrible, por lo que no captó mucha la atención de los espectadores y la última fue Naomi.
-Damas y caballeros, muy buenas tardes. Mi nombre es Naomi tengo 17 años y estoy aquí para ganarme la corona, música por favor. -Dejó el micrófono a un lado y se quedó al medio del escenario para que empezara, la música empezó y su cuerpo empezó a moverse gran parte del baile era atrevido, incluido con twerk, los espectadores estaban animandola con aplausos y silbidos.
-Esa perra, canto horrible. ¿Cómo pudo ganar?, solamente porque es la hija del director.
-Para mí eres el número 1. -Dijo Sara.
-Sí, para mí también. -Dijo Eilen.
-Gracias chicos...tenía que ponerme relleno.
-Noo!. -Dijeron Sara y Eilen.
-Ya que estamos libres, vamos a dar una vuelta.
Pasaron por todas las tiendas posibles. Sara se separó de Naomi y Eilen. Se dirigió hacia su salón de clases y en ella pudo observar que no había nadie a su alrededor, solo había desorden por todas partes, fue en dirección hacia la ventana en que vio desde el segundo piso el patio en que varios estudiantes del aquel instituto estaban bailando o simplemente hablando. Mientras tanto Sara estaba contemplando los últimos hermosos colores del atardecer y se estaba formando de un color oscuro, los pasillos prendieron las luces pero no en el salón en que estaba Sara. Hay momentos en que un ser humano, a pesar de ser lo más sociable del mundo necesita un espacio de tranquilidad y soledad, pero no siempre visitarse de ella. Y en eso estaba Sara, sí, no es la persona más sociable del mundo, pero necesitaba tranquilidad en un día tan atareado.
-¿Disculpa? .-Dijo un joven, pero fue en vano, Sara estaba sumergida en sus pensamientos.-¿Hola?...DISCULPA. -De un segundo a otro Sara abrió los ojos forma de sorpresa, miró a su alrededor y a pesar del salón que estaba oscuro, pudo observar a una persona un poco más baja que ella, pero no pudo saber si era un hombre o una mujer, ya que a simple vista había facciones delicadas y un poco refinadas pero a la vez su cuerpo no se apreciaba lo delicado.-¿Tienes la botella de Eilen?. -Sara seguía sin decir nada, aún se estaba cuestionando si era hombre o mujer, pero la opción posible era un hombre.
-¿Qué?
-Pregunte si tienes la botella de Eilen. ¿No me conoces?. -En ese momento la cabeza de Sara estaba hecha una ensalada.
-¿Me estás tomando el pelo?
-No. Tú eres Sara, estudiamos en el mismo salón. Yo me llamo Noah. -Sara se dio cuenta que era un hombre y no solo por el nombre sino también por su voz.
-Ah, yo me llamo Sara.
- Ya lo sé y...¿tienes la botella?
-Sí.
-¿Estabas viendo el amanecer?
-Aquí está la botella. -Dijo Sara pasándole la botella
-¿Por qué estás aquí sola?
-Eso no te interesa.
-Es verdad, ¿Por qué no vienes con nosotros? quedamos con las 10 mejores tiendas y depu-
-Ya basta, tú crees que con esa cara de afeminado me vas a convencer. -Dijo Sara, luego tomó su bolso, chocó con el hombro de Noah y se retiró lo más pronto posible, dejándolo solo en el salón. Los pasillos vacíos resonaban con sus pasos rápidamente que se dirigían hacia la entrada del colegio, aquella actitud de Noah le llamó la atención, pero no estaba segura si era bueno o malo y se repitió de nuevo que era una pésima compañera de clases, ya que no conoce a la gran mayoría de su sala. También se arrepentía de lo que le había dicho anteriormente y que no lo quería volver a ver, aunque era casi imposible porque lo va a ver todos los días.
Ya era mitad de año. Los días monótonos y aburridos se repetían en la vida de Sara nuevamente. Le quedaban solo dos años para salir del instituto y era algo que Sara quería. Era lo que estaba pensando mientras salía de la biblioteca con Naomi y que ahora se dirigían en dirección hacia Eilen.-¿A qué te quieres dedicar Eilen?. Pregunto Naomi-Mmm...la verdad no sé. Supongo que policía.-Lo dices por tu papá y hermano.-Sí, desde niño me han dicho que sea policía igual que ellos. Supongo que me gusta. ¿y tú has pensado?-Aaahh. A mi me gustaría ser una bailarina profesional. Dij
-AAHH. MIERDA!.-Dijo Noah tapándose con los ojos y Sara quedó en Shock, por ninguna razón en el mundo pensaría que fue Noah.-¡Deja de seguirme!- Dijo Sara enojada y más porque se había asustado un montón.-¿Qué?...yo no...te estaba siguiendo. -Dijo Noah quejándose del ardor que tenía en un ojo producto del gas pimienta.-¿Qué, entonces quién era..?.-Sara no conocía a Noah, pero estaba segura que no estaba mintiendo. Después de unos segundos, Sara se dio cuenta de la situación en la que estaba Noah, que aún se estaba quejando.- ¿Estás bien?-Es la primera vez que tengo gas pimienta e
-Te dije que no te quería cerca. -Dijo seria.- Me voy.-Espera, ¿Qué? .-Dijo Eilen. -¿Te vas?, acompáñame a la enfermería.-Tú deberías de hacerte responsable, yo no le pegue.-Puedo ir yo solo. -Dijo Noah recogiendo su mochila del suelo.-Nos vemos.-Se dio media vuelta y empezó a avanzar.-Sara acompañalo. -Dijo susurrando.-Ve tú.-Vamos, no lo quiero dejar solo así y me tengo que ir ahora. -Dijo mostrando una sonrisa- Esta bien nos vemos.Noah había caminado rápido, ya que se encontraba sentado en una camilla con hielo en su cara.
-Hasta aquí llego, nos vemos.- Se despidió Naomi de los dos, dejándolos solos.Sara siguió su camino en silencio, detrás de ella Noah seguía sus pasos en un silencio incómodo.-Sara, ¿Estás bien?.-Deja de preguntarme lo mismo, es estresante.-Tu mano cómo está.-¿Qué? .-Se detuvo mirándolo.-Le diste un gran golpe a Marco. Tu mano no debe estar intacta.-Haciendo que Sara suspirara.-¿Qué eres?¿Mi abuelo?. No me voy a morir por eso.-Se da vuelta de forma molesta y empieza a caminar. Los días de suspensión habían terminado para Sara y para Marco. Hoy retomaban las clases. Las miradas hicieron presencia alrededor de Sara, en la cual aún les molestaba. En ellas no se encontraba Noah, ¿Habrá faltado de nuevo a clases?, era un tema que no le era de importancia, pero, ¿Por qué su nombre no desaparece de su mente?. Caminando por los pasillos, a lo lejos, pudo observar la presencia de aquel nombre que estaba en tendencia en su mente.-Hey.- Pero Noah permanecía en silencio, como si solo fuera un ruido molesto del viento.-¿Estás enojado?-Sara...tú ganas.-Noah.-¿Por qué no me avisaste?-NoahCapítulo 7
-Que desperdicio de tiempo.-Le lanzó una sonrisa irónica.Se aproximaron a un pequeño parque trasero que tenía el edificio que le había indicado Sara.-¿Cómo estás? .-Preguntó Noah, haciendo que suspirara un poco molesta.-Bien.-¿Por qué has faltado hoy a clases?-No es de tu incumbencia.-Lo siento por dejarte sola ayer.-Yo te dije que te fueras.-¿Qué tienes con él?-Hablo sin más hacia Sara-¿Te gusta?-¿Y si as&i
Narrador en primera persona:SaraAntes de conocerte sabía todo lo que quería, y sabía lo fuerte que era, nunca me había sentido tan débil a pesar de todas las cosas que tuve que vivir. Sentirme débil y volver a tener que sentirme fuerte, todo yo sola de nuevo, fue una de las cosas más feas que tuve que pasar en mi vida, ver la realidad y el tiempo en que me mentiste. Dude de mi y nunca lo había hecho, nunca sentí que no podía más.Conocí a Alan en un mini bar clandestino en la ciudad. En ella, presentaban pequeños grupos que no eran conocidos por todos, cuando pasaron al escenario lo vi. Era de estatura alta, cabello negro y largo que le lleva no mas hacia su cuello. Alan era el guitarrista principal de su pequeña banda. En tan solo segundos,
Narrador omnisciente-¿Por qué estás tan roja? .-Preguntó Noah a Sara.-¿Estás enferma?-No lo estoy.-No te creo.-Se acercó más hacia Sara, mientras que ella se puso nerviosa. No tenía ni idea de el por qué se puso de nerviosa, en el momento en que vio a Noah, un fuerte latido en su corazón se hizo presente, ahora es ella que estaba nerviosa, no se lo creía.-¿O acaso estás pensando el beso que me diste la otra noche?.-Se le saltó el corazón de Sara y le dio un golpe en el estómago a Noah, haciendo que el se retorciera del dolor momentáneo.-Claro que no.-Aunque debo admitirlo, e