El teléfono de Susana era especial ya que con solo presionar una tecla él enviaba una señal que alertaba a Sanabria y a Marcos. Rápidamente llegó la policía y cerraron el lugar, pero ya Susana había desaparecido.
La policía Carmen fue trasladada a urgencias, la bala le dio en el pecho, pero no causó graves daños.
Sanabria era el líder de la operación y marcaban las zonas, veían las cámaras de seguridad, estaba confirmado fue Rita Sofía Benavides alias Rita Márquez, fue la que plagio a Susana Ávila.
Marcos llegó en compañía de Matilde, ella se ofreció ayudar a capturar a su hermana.
Él vestía con una camisa blanca y un chaleco blindado y la placa en el pecho y pantalón negro.
En el capó de uno de los carros con un mapa planifican la operación.
— ¿C&oa
Susana despertó y más tranquila sus padres le informaron lo que sucedió y de que ya no volvería ser agredida por Rita. Y que la mujer solo era una desquiciada por un trauma que sufrió cuando era niña.La habitación de la joven se encontraba a rebosar de flores y de regalos que amigos muy allegados y familiares le traían al preguntar por su bienestar. Ha pasado un sin número de personas a visitarla, pero la persona que ella quiere ver es a Marcos y él no ha venido en ningún momento.Con el corazón triste solamente suspira y lo espera con ansias.Llegan varios oficiales a la habitación en donde se encuentran varias amigas de ella y sus padres.— ¿Cómo estás? — pregunta Sanabria, complacido de verla bien. Se notaba un mejor color y un hermoso brillo en los ojos miel.— ¡Bien! — sonríe tí
El padre de Susana estaba lívido por aquella información. El hombre que él creía integro, amable y leal era un maldito manipulador. Él se había encargado de hablar incansablemente de lo malo que era el policía y de todo el daño que este le hizo a Susana en el cautiverio.Tanto había martillado el hombre en el clavo que lo enterró profundo. Tanto repitió su mentira que él y su esposa le creyeron a ojos cerrados cada una de sus palabras.— ¡Estúpido! — murmuro el hombre. Así era como se sentía. Caminaba hacia la habitación del desgraciado que casi hace matar a su única hija.Llego a la habitación de Richard y la madre de Susana hablaba hasta por los codos de la boda que se realizaría en unos pocos meses.Él la miro y respiro profundo. Ahí iba a estar el problema más grande.
EpílogoSusana vestida de forma elegante y muy feliz baja los escalones de las escaleras de casa en Nuevo horizonte. Llevaba un hermoso vestido largo, con lentejuelas que bordean el escote profundo en la parte de la espalda en color blanco marfil. Este resalta el color de su cabello castaño claro y en sus manos un gran ramo de flores.Su padre la mira con mucho orgullo y se coloca delante de ella con el brazo en recogido y le sonríe.— ¡Estas hermosísima! — dice el orgulloso y feliz padre.Ellos caminan por un pequeño senderito hasta llegar al altar y allí frente al arco de flores esta él con uniforme de gala.Marcos el cual sonríe complacido. La miraba maravillado, alegre porque al fin podrían estar juntos.—Te entrego mi más valioso tesoro— dice el padre de la novia al futuro esposo.Los ojos
La joven corre con el corazón martillando con fuerza. Con su cuerpo y manos abre camino en medio de matorrales que hieren su tersa y delicada piel, haciéndola sangrar, más ella no presta atención a esa insignificancia. Su vida pende de un hilo.La debilidad y el dolor atusan fuerte. Vuelve y cae.—¡Ah! — gimió de dolor.Con sus manos temblorosas y sucias se tapaba los ojos. El sol los lastimaba, han sido muchos días que estuvo en cautiverio. Se encuentra confundida en el espacio y el tiempo. Da profundas inspiraciones, pero el aire quema con brusquedad sus pulmones. Trataba de acostumbrar sus sentidos y de ordenar a que siga a su tembloroso y débil cuerpo. Los días que estuvo atada y encerrada están mostrando sus estragos.
“Bienvenidos a Nuevo Horizonte, pueblo de gente valerosa y trabajadora”Dice el letrero de un pueblo sencillo donde su paz se ha visto trastornada por eventos que están causando temor en sus habitantes.Nuevo horizonte es un pueblo rivereño que la mayoría de los habitantes viven de la pesca y del tránsito por el río. Sus pobladores son personas que viven del día a día, los más ilustres de este lugar son los ganaderos y la élite de maestros que son los encargados de enseñar a los niños los buenos hábitos y la cultura muy tradicional del lugar.Pero ahora, la calma se ha perdido por los extraños eventos que ha vestido al lugar de luto y también mucho temor.La muerte de una joven de familia ganadera y trabajadora apareció desmembrada a orillas de la carretera, algo
Durante toda la noche la joven se la pasó dando vueltas y vueltas en la cama buscando la forma de escaparse de sus padres y hacer lo que ella realmente le daba la gana.Muy temprano se levantó, se bañó y vistió sus ropas picantes como de costumbre. Bajo de la habitación antes que la madre la llamara. Su cara demostraba una humildad que no existía, pero ese era su plan fraguado. Desayunó en un total silencio. Si sus padres le hacían una charla ella contestaba muy educadamente.Luego espero muy desinteresada en la puerta de la casa que Richard la fuera a recoger. Sus padres estaban convencidos que la charla de la noche había sufrido sus efectos.—Hola, bebé— la saludó él con cariño— ¿Cómo sigue el castigo?Ella elevo los hombros restando importancia.—Pues, que te digo— dijo con una sonrisa mordaz—
Ella sintió que las náuseas le envolvían como un velo. Su cabeza se mareo y es cuando decidió dar un paso hacia atrás. Una sensación de escapar con urgencia de aquel lugar la lleno. De repente de la nada una mano con un pañuelo le tapó la boca y la nariz. Ella abrió los ojos sorprendida y trató de quitarse aquella mano que se aferraba a ella con una fuerza brutal que la dominaba de manera inhumana, subyugando. Su mente se revelaba a caer y trató de liberarse, pero aquel agarre era más fuerte que ella. La presión ejercida en boca y nariz la sofocaba y con cada movimiento se ahogaba más. El aire con un químico le quemaba los pulmones y de pronto todo se tornó negro y poco a poco perdió aquella lucha. Sus manos dejaron de luchar y cayeron al lado de su cuerpo y fue ahí cuando perdió el sentido. Las horas pasaron y pasaron y la mujer dormida no se percataba de nada. De cómo la trasladaban de un lugar más alejado de Nuevo Horizonte.
Joel mira a la joven que esta en el suelo y acomoda su virilidad porque esta tan duro que el pantalón le causa dolor y por eso lo arregla acomodando el miembro.Sale de aquel asqueroso lugar furioso con el compañero quien lo obligo a salir antes de cumplir sus insanos deseos.Su pensamiento está en aquella joven de cabellos miel y ojos marrones que lo miraron con desprecio. Si había algo que lo molestara en la vida era que una mujer lo despreciara.Sonrió.Eran muchas las mujeres que lo despreciaba y esto lo excitaba en gran manera y a muchas les había cobrado bien caro su desfachatez. Rio al recordar a la última que tuvo avasallada por él.Los dos hombres se encontraban en la parte de afuera de la cabaña.Molesto con su compañero por haber interrumpido aquel hermoso momento de deseo así que lo miro con odio y lo increpó.–Pepe, ¿Qué