Estaba de camino a la habitación después de limpiar la cocina cuando terminaron de cenar. Jugaba con sus manos mientras se mordía el labio con fuerza. Se detuvo enfrente de la habitación de su hijo y abrió la puerta. Frunció el ceño cuando encontró la cama vacía. Su vista se dirigió a la ventana donde encontró a su hijo sentado en esta.
Deberá agradecerle a Liam por colocar unos cojines en ese lugar, se acercó a su hijo el cual aún no se había dado cuenta de que estaba allí. Se paró detrás de él y vio al niño de al lado hablando con él. Harry sonrió al ver que su hijo había hecho una amistad con ese niño nuevo.
— Papi. Él se llama Nicolás... y es muy lindo —dijo es
El lunes había llegado dando así, el inicio de un nuevo día de clases para Jedward quien estaba feliz por ir a la escuela. Harry reía con él, mientras el menor hacía caras raras al tener que comer verduras en la escuela.Liam miraba la situación desde el umbral de la puerta de la cocina con una sonrisa que fue sustituida con una seriedad única en él.Harry lo miró desde donde estaba, por inercia tomó a Jedward en brazos para luego tomar su mochila e ir a la puerta.Liam lo siguió con la mirada, incluso después de que Harry entrara a su hijo en uno de los carros con Michael y su novio, los cuales se habían ofrecido a llevarlo todos los días de la semana.Ha
Ajustando bien las medias a sus cremosas piernas, se miró en el espejo por tercera vez desde que se las había puesto hace unos minutos atrás. No se veía mal, eso no. Después de haber dado a luz a su pequeño revoltoso hace cinco años había adquirido algunas curvas pronunciadas en su cuerpo.Y más ahora que estaba esperando a su segundo hijo. Aunque esta vez su vientre iba creciendo con más rapidez. Mordió su labio pasándose una mano por el cabello y haciendo una mueca al ver que este estaba bastante largo. Según él necesitaba un recorte de cabello otra vez. Se dio la vuelta a medio cuerpo para ver si algo en la parte de atrás estaba fuera de lugar. Caminó hacia la cama donde había dejado la bata de dormir y fue hacia la habitación de su hijo. Clavando sus uñas en la espalda de su esposo, arqueó la espalda y soltó un gemido ronco en el oído de Liam. No podía negar que se sentía bastante bien que Liam lo penetrara de esa forma tan poco usual en él.Tal vez sean los años que tienen teniendo sexo de esa forma. Pero la otra vez Liam lo había violado sin compasión, aun cuando él se había desmayado. Sus pies se arquearon cuando Liam tocó otra vez ese punto sensible en él.— Eres un bebé muy travieso —susurró Liam, sacando su cabeza en el cuello de Harry y acercándose su boca al oído de él.Harry soltó un suspiró antes de que Liam lo besara entrando su lengua hasta el fondo exploranCapítulo 11.
Después de desayunar, Liam se había dispuesto a consentir a su bebé, el cual estaba más sensible. Ambos se bañaron en el mismo baño, el cual se demoró más de lo normal.Una vez que estuvieron listos salieron de la casa.— ¿A dónde quieres ir? —preguntó Liam, una vez que habían salido de la casa con rumbo hacia el carro.— ¿Podemos ir al parque la otra vez, por favor? —preguntó el menor, haciendo un puchero.— Podemos ir..., con una sola condición —susurró, y la mirada de Harry cayó al piso con tristeza. En su mente pasó otra vez lo que había pasado el día anterior. Habían pasado dos semanas y todo seguía igual que el día en el cual Harry le había contado sobre su embarazo.Digamos que no tanto...Liam ahora se mostraba más posesivo con Harry, no lo dejaba salir de la casa si no era con él. Incluso, con ninguno de sus empleados lo dejaba salir, había días en los que él se quedaba un día completo en la casa sin hacer nada, solo observando cómo Harry se movía.Harry por su lado, solo rodaba los ojos cada vez que Liam llegaba a su lado con algo de comida, se sentía asfixiado en pocas palabras. No podía salir de la casa sino era con él, cuando creía que tenía un poco de privacidad en alguna parte del jardín trasero de la casa. Liam ya estabCapítulo 13.
Harry metió una fresa con mermelada otra vez en su boca, disfrutando de ese delicioso manjar en sus pupilas gustativas. Veía una película en su habitación, justamente como Liam le había ordenado esa mañana.El tiempo seguía pasando, el frío de una de las mejores temporadas del año se sentía. Estaban a principios de diciembre y su hermosa barriguita iba en aumento. Tenía aproximadamente casi cinco meses de embarazo y estaba súper feliz por eso.Digamos que en esos meses las cosas han ido un poco bien por así decirlo. Aunque había días en los que todo era un caos total. Liam había descubierto a Harry husmeando cerca de su caja fuerte y el menor se había llevado tremendo golpe el rostro. Por supuesto, se había disculpado de inme
Harry regresó del baño y le agradeció a los dioses que su hijo esté en la escuela pasando sus últimos días compartiendo con sus amiguitos. Pero principalmente con ese vecinito de al lado, quien se había puesto de amigo con su hijo y con su el pequeño Kayled.Volvió a la habitación después de lavarse los dientes. Se sentó en la cama tomando la nota que decía la pantalla. Suspiró secando sus mejillas antes de tomar la nota.“Ahorasabrás con quiéntehascasado,pequeñaputa"La mirada de Harry fue automáticamente hacia la pantalla. La escena que mostraba era de Liam y de su hermana en una habitación. Vio como Liam empujaba a su he
Liam salió de la habitación una vez que, según él, había terminado con Harry, ósea, lo castigó como siempre lo hace. Estaba enojado con todos, principalmente con él mismo, por durar tantos años ocultándole a Harry esa gran mentira.Ahora su esposo estaba embarazado, enojado y queriendo divorciarse de él a como dé lugar. Algo que él, por supuesto, no permitiría. Primero muerto que dejar que su bebé se separara de él.Bajó las escaleras con rapidez, donde al final de estas encontró a Michael con los brazos cruzados y con el rostro rojo por la furia.— Lo hiciste otra vez —negó con la cabeza, y con la mandíbula tensa.