“¡Charlotte Simmons!”. Lorraine estaba tan enojada que levantó la mano y quiso darle una bofetada en la mejilla a Charlotte.

Sin embargo, considerando que no podía golpear a Charlotte, retrajo su brazo a tiempo.

Estaba tan furiosa en el fondo que sintió como si un cuchillo se le clavara en el corazón. Su cuerpo temblaba como si estuviera sumergida en un lago invernal. “Te llevaste a mi amado hombre y a nuestro hijo, ¿no crees que es suficiente? ¡Ahora, incluso quieres llevarte a mi hermano!”.

Aunque Charlotte no sabía lo que Garrison le había hecho a Lorraine, ella se tomó la molestia de explicarlo.

Ella estaba dos escalones más alta que Lorraine en la escalera, y la arrogancia era la única emoción que se encontraba en ese rostro delicado suyo.

De ahora en adelante, nunca bajaría su dignidad frente a Lorraine.

“Efectivamente, instigaste a mi hermano a hacer esto. Él me ama mucho, así que si no fuera porque lo hechizaste, ¿cómo podría ser tan cruel conmigo?”. Lorraine estaba más s