Narra Víctor Manuel

Llegó por fin el día de irme de viaje con Itziar Helena. No olvidaré la cara de mi padre y de Sebastián pidiéndonos que permaneciéramos unos días más en la ciudad, pero nosotros lo que queríamos ya era irnos definitivamente a vivir la mejor aventura de nuestras vidas.

Nos dirigimos en carretera a una zona a dónde pudiéramos acampar, a 7 horas de Madrid. Lamentaba mucho la situación en especial por Itziar Helena, pues ella no estaba acostumbrada a ese tipo de vida ni de situaciones. Pronto me puse a armar la tienda de campaña y después nos pusimos a instalar todo lo demás, a hacer fuego y a meter las bolsas de dormir a la tienda de campaña. Notaba muy seria a Itziar Helena, así que decidí hacerla reír.

–Gracias Itziar Helena, por aventurarte conmigo. Sé de sobra que esto no es pa