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Capítulo noventa y cuatro
Había una amplia sonrisa en el rostro de Zane cuando Kiara lo dejó entrar a su casa. Ella lo llevó hacia la cocina y lo hizo sentarse en una de las sillas, luego salió de la cocina y regresó con una toalla.“¡Eres tan terco que podrías haber muerto allí afuera! ¿Olvidaste lo que pasó la última vez que te quedaste bajo la lluvia?”, lo regañó mientras limpiaba su cuerpo con la toalla. Ella jadeó levemente cuando él le agarró ambas manos. Ella lentamente lo miró y sus ojos se encontraron al instante.“¿Cómo olvidaría uno de los momentos más memorables de mi vida? ¿Lo recuerdas? Tuvimos nuestro primer beso bajo la lluvia”. Ella frunció los labios. “Suéltame, Zane”. Él sacudió la cabeza.“Aún te preocupas por mí y me amas”, dijo él, como si fuera un hecho bien conocido, haciéndola suspirar.“Nunca me detuve, Zane, pero yo… lo que nos pasó en el pasado fue demasiado para mí como para seguir adelante y somos tóxicos el uno para el otro. Yo sólo... sólo quiero tiempo para descubrir lo
Capítulo noventa y cinco
Kiara estiró todo su cuerpo al despertarse a la mañana siguiente. Dios, estaba tan dolorida. “Buenos días, mi amor”. Abrió los ojos lentamente y vio a Zane mirándola con una sonrisa. Ella le devolvió la sonrisa. “Buenos días. ¿Cuánto tiempo llevas despierto?”. Ella le preguntó y él se inclinó para besar sus labios. “No dormí. Tenía miedo de que desaparecieras cuando me despertara”. Ella se rió y luego le pellizcó ligeramente la mejilla. “Bueno, esta es mi casa, ¿no?”. Zane de repente frunció el ceño. “¿Fue Levi quien te dio esta casa?”. Ella suspiró.“Zane, por favor, no hagamos esto”. Los ojos de Zane se abrieron mientras agarraba su mano. “No, no, no es lo que quise decir. Yo solo…. Quiero que vivamos juntos, y si no podemos, me gustaría regalarte una casa”. Ella frunció el ceño. “Zane, ¿por qué quieres darme una casa? ¿Crees que no puedo permitirme una?”. Él ahora estaba entrando en pánico. ¿Por qué no podía elegir sus palabras correctamente? “No quise decir eso...
Capítulo noventa y seis
Ambos se sentaron en silencio, mirándose el uno al otro. Heather no estaba segura de querer saber qué pasó anoche, pero ya podía adivinarlo porque ambos estaban desnudos, y eso solo significaba una cosa.Suspiró mientras se pasaba los dedos por el cabello por la frustración.“¿Qué carajo pasó?, y por favor no digas que tuvimos sexo”. Daniel ladeó la cabeza.“Está bien, no tuvimos sexo...”. Ella exhaló un suspiro de alivio. “Hicimos el amor”. Sus ojos se abrieron como platos. Sostuvo las sábanas contra su pecho mientras sacudía la cabeza frenéticamente.“Debo estar teniendo una pesadilla porque anoche estuve con Liam, no contigo”. Daniel asintió.“No sé qué pasó, pero anoche me llamaste para ir a buscarte en casa de Levi y vine inmediatamente. No parecías borracha ni nada así, así que me sorprende que no lo recuerdes”. Tan pronto como escuchó eso, sus recuerdos volvieron rápidamente y jadeó con la mano sobre la boca.Después de que Liam la dejó, por alguna razón, empezó a pensar en
Capítulo noventa y siete
Kiara gimió cuando Zane se coló detrás de ella y la rodeó con sus brazos.“Zane por favor, tengo mucha hambre. ¿Aún no estás satisfecho?”. Sacudió la cabeza mientras besaba su cuello.“Quiero más, se siente tan bien”. Ella suspiró y luego usó todas sus fuerzas para alejarlo.“Bueno, estoy cansada y tengo hambre, así que déjame en paz”. Zane suspiró y luego hizo un puchero.“No es mi culpa que no pueda tener suficiente de ti. Ya te dije que eres una adicción para mí”. Ella suspiró.“Bueno, acaba con esa adicción porque ahora quiero comer”. Él suspiró y luego besó su mejilla.“De acuerdo, mi amor. ¿Qué te gustaría comer? Te lo prepararé”. Ella se burló.“¿Estás diciéndome indirectamente que no soy una buena cocinera?”. Él inclinó la cabeza.“No te lo estoy diciendo indirectamente, te lo estoy diciendo directamente, ahora siéntate”. Ella puso los ojos en blanco pero hizo lo que él dijo. ¿Por qué iba a dejar pasar la oportunidad de simplemente sentarse y verlo cocinar? ¿Él siempre
Capítulo noventa y ocho
Liam sonrió tan pronto como vio venir a Heather. Se levantó del suelo, caminó hacia ella y la abrazó con fuerza.“Anoche eras todo en lo que podía pensar”. Ella forzó una sonrisa en su rostro.“Yo también”. Se dio cuenta de que su estado de ánimo no era tan alegre como siempre, lo que le hizo fruncir el ceño.“¿Pasó algo mientras me iba ayer? No pareces feliz”. Ella lo miró fijamente por un momento y luego dejó escapar una risa incómoda.“Estoy bien, anoche dormí mal”. Más bien sexo duro. Una mirada de disgusto apareció en ella, confundiendo aún más a Liam.“Si pasó algo, puedes decírmelo, ¿sabes? No te juzgaré”. Ella suspiró. Él estaba diciendo eso ahora pero, si supiera lo que ella hizo, estaba segura de que él ni siquiera sería capaz de mirarla a los ojos.“Yo… solo estoy cansada, ¿vale? Sentémonos”, dijo y luego se sentó en la arena de la playa. Él dejó escapar un suspiro antes de sentarse a su lado.“Siento que algo anda mal. ¿Hice algo malo?”, preguntó después de un rato y
Capítulo noventa y nueve
La boca de Kiara estaba literalmente en el suelo después de lo que dijo Zane. “¿Tú... eres un Rey de la Mafia?”, preguntó con asombro y Levi inmediatamente tomó su mano con una expresión de culpa en su rostro.“Nunca te lo dije porque no quería que te involucraras. Por favor, no te enfades conmigo. Juro que no soy una mala persona”. Ella frunció el ceño mientras lo miraba a los ojos, pero antes de que pudiera decir algo, Zane soltó su mano del agarre de Levi. “Puedes hablar con ella sin tomar su mano”. Kiara suspiró.“¿Puedes irte, por favor?”. La cara de Levi cayó mientras una brillante sonrisa apareció en la de Zane.“Ya la escuchaste, vete”, le ordenó Zane.“Estaba hablando contigo, Zane”. Su rostro decayó antes de mirarla a ella.“¿Qué? ¿Por qué tengo que irme?”. “Porque quiero hablar con Levi a solas. Solo espérame en la casa”. Zane frunció el ceño y luego miró a Levi antes de entrar de mal humor a la casa.Kiara dejó escapar un suspiro y luego se volvió hacia Levi, qu
Capítulo cien
Mientras caminaban hacia la manada, una ola de familiaridad invadió a Kiara. Sujetó con fuerza la mano de Zane mientras algunas personas comenzaban a mirarla de forma extraña.“No te preocupes, rectificaré todo pronto para que no tengan que mirarte así”, dijo Zane con una mirada culpable en sus ojos. Ella le sonrió y luego entrelazó sus brazos mientras caminaban hacia Daniel y el resto.Tan pronto como la vieron, todos abrieron los ojos como platos.“Alfa”, saludaron mientras inclinaban la cabeza. Él les asintió y luego se volvió hacia Kiara.“¿Por qué no te sientas en el banco y me esperas?”. Ella ladeó la cabeza.“Prefiero explorar la manada un poco”. Él frunció el ceño.“Terminaré pronto y podremos hacerlo juntos”. Ella se rio.“No te preocupes, puedo cuidar de mí misma, y si necesito tu ayuda, solo me vinculo contigo”. Él suspiró y luego besó su frente antes de verla alejarse.“¿Entonces es verdad? ¿Ella no te engañó?”. Leo comentó con genuina confusión en su rostro.“No,
Capítulo ciento uno
Los ojos de su madre se abrieron como platos.“A… Alfa”. Él la miró fijamente.“¿Sabes que ella es la única razón por la que no te he matado a ti y a tu marido? Si yo fuera tú, se lo agradecería”. Su madre frunció los labios, luego se arrastró hacia Zane y le agarró la pierna.“Samantha no pretendía causarle ningún daño con lo que hizo. Aunque no la apoyo, ¿no pueden ambos encontrar en sus corazones la capacidad de perdonarla? Hace semanas que no sé nada de mi hija”. Kiara frunció el ceño. “¿Qué hay de mí? No supiste nada de mí durante dos años y medio pero ¿te importó siquiera?”. Kiara no podía creer que esta mujer fuera su madre. Tenía que haber un error en alguna parte.“¿Soy siquiera tu hija? Porque ni tú ni mi padre me tratan como tal. Toda mi vida he sido como una extraña para ustedes dos”. Su madre se burló.“Eso es porque tú fuiste la causa de nuestra caída, Kiara. En el momento en que te tuve, todo se fue cuesta abajo para tu padre y para mí. Seguimos mirando una cosa t