~TRES AÑOS DESPUÉS~

"¿Asher? ¿Asher? ¿Dónde está ese niño travieso?", murmuró Kiara mientras buscaba por su habitación antes de dejar escapar un suspiro. Iba a ser su muerte.

Salió de la habitación, todavía gritando el nombre de Asher cuando se detuvo frente a la puerta de la habitación de Astrid con una mirada confundida en su rostro.

"Gracias señorita Astrid, por el encantador té". Escuchó lo que Zane decía y entonces Astrid suspiró.

"Papá, ya te lo he dicho, no soy Astrid. Llámame señorita Diamante". Kiara soltó una risita escuchando los quejidos de Astrid.

"Vale mi amor, lo siento. Hagámoslo otra vez", murmuró Zane y en ese momento, Kiara abrió la puerta y lanzó a Zane una mirada divertida mientras contemplaba a su marido sentado en el suelo con una corona de princesa en la cabeza.

¿Quién iba a pensar que éste era el Alfa más temido de todas las manadas y que había derrotado a un monstruo enorme?

"¡Mamá!", gritó Astrid con una sonrisa mientras corría hacia Kiara y abrazaba f