―Se acercan unos salvajes. ―Comunicó uno de los guerreros que iban al frente. ―Esto es insólito, ¡Los salvajes jamás han estado en manada! ―Enola miró la escena, ella aún no ha controlado su poder totalmente y siempre lastima a otros cuando los utiliza. Tener un cuerpo humano no es fácil. ―¡Hay que
Enola por primera vez desde que despertó, se dio cuenta de que lo que sentía en su corazón no era más que deseos, porque el hombre del que se enamoró, sin saber nada de él, resultara igual de dolido que ella. Aquel beso descarado no hizo más que elevar su libido, lo deseaba, la tentaba y la llevaba
―Entonces no me lastimes nunca más. ―Con su ayuda, le dio frente, sus piernas no sirven, está demasiado débil por tanto sexo. ―Si vuelves a hacerme vivir un infierno como el que pasé, juro que me iré muy lejos de ti, ¿De acuerdo? ―Tanok la miró a los ojos sin parpadear, su corazón late con fuerza y
Nunca se había visto a una pareja tan poderosa y perfecta, Enola y Tanok son la pareja líder más respetada de todos los tiempos. La manera de gobernar de ambos es excepcional y todo el mundo sobrenatural se siente en paz y protegidos.Tanok, desde que se casó con su mujer y la presentó como la luz d
―Diosa Luna. ―Uno de los guerreros entró a la sala en compañía de Katriona. ―El consejo llama por usted, es realmente urgente, no pueden esperar. ―Enola miró a sus hijos, las cuidadoras no están y necesita marcharse.―Katriona, te dejaré a mis hijos, las cuidadoras no tardarán. ―Katriona bajó la mir
Tanok logró agarrar a Enola antes de que la onda los separara, al ponerse en pie, miró la cabaña de Katriona totalmente destruida, ¿Qué había pasado? Se preguntó al ser la primera vez en experimentar un poder tan brutal como ese.―Ve con nuestros hijos, pon a salvo a todos. ―Ordenó mirándola a los o
―Entonces pelearemos sin importar nada. ―Tanok estaba dispuesto. ―Si dices que no tenemos oportunidad con ellos, hay que salir de la aldea y enfrentarlos afuera, somos lo suficiente para detenerlos hasta que tú huyas con nuestros hijos.―¿Cómo podría yo sacrificar a todos por mi propia vida? ―Lo mir
―¡Ahora! ―Los más fuertes atacaron directamente a Enola, así obligándola a alejarse del resto. Enola intentó defenderse, pero la falta de práctica se lo hace difícil, el temor a perder el control y lastimar a quienes no debe, la limita más que nada.―Es débil, Diosa, estar entre los mortales no le h