<ALEXANDER>
La presencia de Sergey era cada vez más detestable en este lugar, incluso ya nadie estaba tan de acuerdo en que se quede en esta casa, incluso los reos que supuestamente lo apoyan dijeron que estaban conmigo, aunque no puedo confiarme de ellos porque puede ser una trampa para hacerme bajar la guardia
Antes no creía que fuera una gran amenaza ya que Elena se podía defender de él en varias formas y contaba con la protección de Maicol y Bruno, pero ahora, las cosas han cambiado porque están nuestros hijos que necesitan de nuestra protección completamente, y después de lo que dijo estoy de acuerdo en que debe largarse de aquí cuanto antes, no iba dejar que la seguridad de mi familia estuviera en riesgo al tener a un tipo que no le debo mas que el favor de matarlo personalmente
Fue por esa misma razón que tomé la decisión de quedarme en casa y pasar más tiempo
Todos los vellos de mi piel se me erizado por completo cuando me llamó hijo, la voz se quedó atascada en la garganta mientras siento que mi cuerpo se convirtió en una estatua al no poder moverme de mi lugar mientras mis ojos la ven fijamente sin saber que demonios sentir, rabio, dolor, odio, no lo sabia, lo único que sabía es que era ella y que la tenía frente a mí—¡Alexander!..Sus ojos dejaron de verme a mí para ver a Elena, se abren al verla y eso me confundió así que la oculté detrás porque seguramente ella ya la conocía por ser la esposa de Aleksey y no creo que sean grandes amigas porque por la expresión de Elena parece no conocerla—Así que no eran simples rumores, todos eran Ciertos, vaya, vaya, —ella sonríe —Increíble que su propio hijo le haya quitado a la mujer que tanto cuidaba como la joya más i
—Serias capaz de matar a tu propio hijo. —ladeo una sonrisa torcida —No me sorprenderá si la respuesta es si.—Mmm.. seré piadoso por ser mi hijo, Dame a Elena y prometo dejarte vivir, a ti y a todos lo que están aquí.—Me crees estúpido, Ya se que es una patraña y que al solo tenerla en tus manos, nos matarás. —nervioso por tener sus vidas en sus manos le pido que se vaya cuando se lo ordene, ella se rehúsa pero le hago ver que nuestros gemelos necesitan a uno de nosotros. —¡Ya!.En el momento en que grito, Maicol y Bruno se levantaron del suelo y noquearon a los hombres de Aleksei y tomando sus armas, ayudaron a mi madre y a las chicas a levantarse para salir con ella, con una mirada nos despedimos ya que no sabría lo que pasaría de ahora en adelante, no me importaba si moría, al menos tendré la tranquilidad de que ella y mis hijo
Detrás de la puerta me quedé porque sabía que la reacción de Alexander al ver a su padre adoptivo fue muy sombría como si creyera que debe irse para terminar lo que empezó que prácticamente llegó llegó nosotros de forma sorpresivaSe que quiere ir por el pero no quiero que se arriesgue al enfrentarlo, ese hombre demuestra más astucia que el, no es que yo desconfíe de Alexander pero de algo si estoy segura y es que pasara lo que pasara, jamás podría sobrepasar la madurez de un hombre mayor que tiene más experiencia en la vida que alguien como él y yoSé que le dijo a Gera que fue una broma para ella y como su madre no tiene idea de cuando Alexander miente, le creyó. Yo se que trama algo pero no se lo diría frente a Gera, no quiero que se preocupe mas por el o por nosotros, ella ya ha hecho suficiente con darnos un techo y seguridad cuando m&aacut
<ALEXANDER>Las palabras de Elena me dolieron de alguna forma y se que esa no fue su intención ya que se retractó de inmediato pero aún así me afectaron porque todo lo que esta pasando es mi culpa y por eso es que debo hacerle creer que todo estra bien y que quiero solucionar las cosas sin arriesgarme.A escondidas fui entrenando mi cuerpo y cuando pasaron dos meses, mi herida estaba curada, no del todo pero al menos ya podía ejercer fuerza y no parecer un enfermo agonizante porque lo odio.Me encontraba preparando todo a espaldas de los demás y que mejor lugar que en la biblioteca que se ha mantenido cerrada por muchos años, cuando entré por primera vez, me pregunté la razón de mantenerla cerrada si habían libros de excelentes escritores que daban mucha información y sabiduría valiosaTenia muchas municiones de un tamaño pequeño para no llevar mucho peso, una o dos armas que solo usaría en caso de que las cosas se me salgan de las manos, ya tenía todo
<ELENA>Una noche fenomenal fue la que experimenté anoche, la pasión mezclado con el amor mutuo que sentimos en ese instante, fue suficiente para caer en un profundo sueño con una sonrisa plasmada en mis labios que no podía borrar, era tanta mi felicidad que terminé soñando la excelente noche que pasé con él.Despertando por los llantos de los gemelos, muevo mi mano para despertar a Alexander pero recordé que siempre acostumbra a levantarse temprano porque nunca logra mantenerse dormido después de las cinco de la mañanaLevantándome busco mi bata para salir e ir a la habitación de los gemelos, al tener a la pequeña revoltosa en mis manos, la saqué de la habitación antes de que despertara al dormilón de Artemis. Me sorprendió que siguiera durmiendo después del llanto fuerte de EsmeraldaComencé a buscar a Alexand
No contaba con este minúsculo detalle. 《M*****a sea》. Tengo que admitir que esta estrategia no me la esperaba, pero, como es que esta vivo, Elena me dijo que había sido asesinado junto a sus padres, no se puede resucitar a un muerto de eso esta seguro.—Entonces Alexander, ¿Vas a hacer esto por las buenas? ¿O quieres que elimine a la única familia que le queda a tu amada, porque te puedo asegurar que, ella estará muy feliz por que esta con vida.¡Joder! De nuevo tiene razón, ella estaría más que feliz si volviera a ver a su hermano, ella se tortura con la muerte de su familia pero si descubre que el esta con vida incluso, si muero, ella olvidara su dolor al tenerlo a su lado. No tenía más opción y terminé dejando mi arma aún lado y levanté mis manos hacia arriba, saliendo de mi escondite vuelvo a tener cara a cara.—Vaya, te ves terrible Alexander. —es tan irónico como siempre y de pronto me encontraba en el suelo por una bala en la herida que se me había cerrad
Algunos tuvieron o tienen la dicha de tenerlo todo y esas personas son las que no saben valorar lo que tienen; otros como yo, no corrimos con esa misma suerte ya que desde que tengo uso de mi conciencia me di cuenta que no tengo familia.Nací en un orfanato y apenas tengo ocho años y me doy cuenta que soy diferente a los demás, intento saber quienes eran mis padres, me lleve una enorme decepción haciendo que no deseara saber más de mi familia. Mi madre era una drogadicta y de mi padre no tengo ni la más remota idea, pero, con solo saber que ella no era la madre que anhelaba deje de preguntar por ellos a las monjas que me cuidaban.Llore en silencio por lo amargo que es saber la cruda verdad de lo que fue mi vida y mi familia, si a eso se le puede llamar familia. Cuando las hermanas me descubrieron husmeando en la oficina de la madre superiora me castigaron pero no me importo.Me alejo de cualquier niño porque todo
—Me llamó señor...Volteo a ver a la Agente Spinster. —¿Tienes el informe?—Si, lo traigo conmigo. —afirma.—Cierra la puerta.—Si mi señor. —cierra la puerta después se acerca y me entrega la carpeta.Ladeó una sonrisa al ver que al fin van a comenzar a reclutar escoltas, después de días esperando la oportunidad, al fin comenzaría mi trabajo.—¿Irás?—Es mi trabajo, por eso fui enviado aquí, ¿lo olvidas?—No. —suspira decepcionada de mi respuesta —¿Algo más en que lo pueda ayudar?—Retírate.Molesta por mi frialdad, me da la espalda caminando hacia la puerta, al abrirla sin que me sintiera llegar, ya me encontraba a sus espaldas, escucho una risita traviesa de su parte complacida, jadeando llena de deseo sus manos se aferran a mi brazo al sentir mi aliento en su nuca.—Ansiaba que me llamara de nuevo. —musita sin descaro. —Para ser una mujer casada, pareces no sentirte culpable al engañar a tu esposo. —l