Era lunes y debía ir a la universidad, con los ojos llenos de ojeras por dormir tan poco, me levanté a bañarme, revise mi celular, pero ya no había mensajes de ese desconocido. No sé porque una parte de mí esperaba recibir algo más.

                Justo en la primera clase, asignaron un trabajo en parejas, y a decir verdad entre la universidad y el trabajo no había tenido tiempo de conocer a mis compañeros de ese curso, además de que era un curso de alrededor de 200 estudiantes. Un chico se acercó a mí, al final de la clase.

Hola

Hola – respondí

Disculpa ya tienes pareja para el trabajo.

Eh no, aun no – dije

Si quieres lo hacemos juntos, he notado que llevamos otros cursos juntos entonces quedaría bien, por cierto, soy Josh.

Era un chico alto, moreno, delgado pero atlético y bastante guapo.

Claro, me parece, soy Kate. - dije

Caminamos juntos por un rato hablando un poco, Josh era muy amable realmente y también muy divertido.

Pasaron los días y seguía viendo a Josh, prácticamente todos los días, primero era por el trabajo en parejas, pero ya luego nos hicimos buenos amigos. Josh siempre me invitaba a tomar café, lo cual me parecía un poco extraño.

Ya habían pasado dos semanas, y él lo seguía haciendo, así que me atreví a preguntar.

Oye, ¿tú en que trabajas?

No yo no trabajo – dijo sonriendo

¿Y cómo le haces para invitarme al café todos los días?

Mis padres son ricos – dijo sin parecerle importante lo que afirmaba

¡Vaya! – dije

Pero no me mires así, no soy un mantenido, bueno más o menos, mis padres me dan todo lo que quiero, pero me gustaría conseguir un trabajo, tengo mucho tiempo libre.

Ajá, ¿y como de que te gustaría trabajar?

¿Tú en que trabajas? – dijo respondiéndome con otra pregunta

En un lugar de eventos, servimos comida y bebidas en fiestas.

Eso estaría bien para mi – dijo riendo

¿En serio? – dije un poco incrédula

Sip – respondió muy convencido

Pero ahí no pagan tan bien

No importa, el dinero no lo necesito

Ah no, pero que humilde -dije sarcásticamente

¿Y si me consigues un trabajo ahí? Será divertido trabajar juntos – dijo riendo

Bien, veré que puedo hacer. – dije

En la tarde fui al trabajo y hablé con George, le hablé sobre Josh y me dijo que le dijera que fuera a una entrevista. Más tarde llamé a Josh para contarle y estaba que no se lo creía.

Al día siguiente acompañe a Josh a su entrevista, minutos después salió de la oficina de RRHH diciendo:

¿Adivina quién tiene trabajo? – con su magnífico humor de siempre

Había sido contratado y ambos estábamos sumamente felices, como de costumbre para celebrar fuimos por un rico café, pero esta vez iba por mi cuenta.

Desde que entre a trabajar sentía que no tenía ningún amigo real, y aunque Martha se había comportado excepcional conmigo, no éramos exactamente amigas, era una relación meramente laboral, así que tener a Josh como compañero de trabajo lo hacía todo más bonito, Josh era un chico lleno de energía positiva y siempre parecía estar feliz, era imposible no contagiarse de esa buena vibra.

Poco a poco, nos volvimos inseparables, pasábamos prácticamente todo el día juntos, trabajo, universidad, e incluso solíamos vernos hasta en días libres. En Josh había encontrado a una persona incondicional, alguien que siempre estaba en todo lo bueno y lo malo. Él en definitiva no era un chico normal era un poco extravagante para vestir y su trato hacia mí era muy atento y podía notar que realmente se interesaba en lo que le contaba, lo que en algún momento me hizo pensar que quizá Josh gustaba de mí, y ese pensamiento en definitiva no me gustaba para nada, aunque Josh era increíblemente guapo y divertido, yo no lo veía de esa forma, y me incomodaba pensar que quizá el sí y que eso dañara nuestra amistad, después de todo ya lo veía como mi mejor amigo.

En lo que llevábamos de conocernos nunca me contó de alguna chica, ni yo a él de ningún chico que me gustara, nuestras conversaciones solían ser menos profundas y a veces tontas. Josh solía decirme a cada rato lo hermosa que era, o lo bien que me veía, pero lo hacía de una forma que no comprendía mucho, era como una especie de admiración hacia mí, y una parte de mi quería preguntarle si tenía algún otro interés en mí, pero tenía miedo de que la respuesta fuese un sí.

Tiempo después veíamos una película en mi apartamento cuando me atreví a preguntar:

Oye Josh

Si - dijo más centrado en la película que en mi

¿Te puedo preguntar algo?

Dale – respondió sin mostrar aún mucho interés

Bien, vamos al grano – dije - ¿Yo te gusto?

Me miró fijamente por unos minutos y luego soltó una risa que me dio algo de paz.

¿Pero que dices chica? – contestó - ¿Por qué llegaste a esa conclusión? – preguntó extrañado

Es que no sé, eres muy lindo y atento conmigo, me tratas bien y pues pensé que quizá.

¿Qué nunca has recibido ese trato de alguien que no quiera acostarse contigo? – insistió

Pues no de un hombre – dije – bueno a menos que sea gay – bromee

Bien -dijo, esta vez serio – hay algo que debo confesar

¿Qué cosa? – dije extrañada al ver su gesto

Esto es algo que nunca le he dicho a nadie, yo no tengo muy clara mi sexualidad.

¿Te gustan los hombres? – pregunté

Creo que me gustan ambos, pero de diferente manera, disfruto mucho la compañía femenina, hacer muchas cosas y así, pero mi deseo sexual es con hombres, aunque para ser honestos no me imagino en una relación abiertamente gay-

Vaya – dije

Si lo sé, es confuso

Lo es, pero independientemente de que te gusten ambos o solo uno, nunca cambiara la forma en que te veo – dije con una sonrisa

Gracias – dijo – es un alivio por fin decirle esto a alguien, no sé como reaccionarían mis padres y amigos no tengo muchos - confesó

¿Por eso pasas tanto tiempo conmigo? – pregunté

Si, es que eres muy cool – dijo -¿yo te gusto? - preguntó

Ayy claro que no – dije

Bien debía estar seguro – ambos reímos

Más tarde en la noche, cuando Josh se había ido decidí continuar viendo la televisión y recostarme en mi sofá no paso mucho tiempo cuando caí en un profundo sueño, no sé cuánto tiempo pasó, solo sé que un mensaje me despertó.  “STRANGER”, por alguna razón había guardado aquel número extraño al que llegué a escribir.

<< Parece que si eres la correcta>>

Dijo respondiendo a una foto que había subido en algún momento en la tarde