—Un poco de ambos, el lugar es maravilloso, tienen muy buen gusto, la decoración está genial, y la gente es muy amable—afirmé—. ¿Tú estás ocupado, me preguntaba si podríamos hablar un poco.
—Para ti nunca estaré ocupado, solo deja que termine este formulario y voy contigo, ¿quieres hacer algo? —preguntó Scorpion.—Podríamos ir a un lugar más Privado, si es posible, pero que no sea en este lugar, si te dejan salir, por supuesto, es decir, si estás trabajando no quiero interrumpirte, o que llegues a tener problemas.—expliqué.—Te invitaría a mi casa, pero no quiero que te sientas incómoda, hay personas ahí en este momento y presiento que te incomodaría que te presente como la mujer que robo mi corazón en menos de un mes.—espetó Scorpion.—Claro, debes vivir con tus padres aún, tienes razón, no es buena idea, no estaría cómoda y menos si dices ese tipo de cosas delante de otras personas. —dije apenada.—¿Qué has dicho? —preguntó. —no logré escuchar, disculpa, es que el ruido es fuerte y tu voz es tan suave, he terminado aquí. —concluyo.—Nada, que podemos ir a un hotel o aquí si no hay de otra.—dije ruborizada.—¡Vaya!, no me lo esperaba, ¿me estás pidiendo que tengamos sexo o porque quieres ir a un hotel? —Preguntó sonriente —como tú desees cariño. Espera conozco un lugar que te va a encantar. —¿Has traído tu auto o prefieres que nos vayamos en taxi?—A un hotel no se va solo por sexo. —gruñí molesta.«Como decirle que me sentía un poco incómoda en lugares públicos con él, sobre todo porque demostraba su interés en mí».—He traído el auto, pero lo dejaré para que mis amigas puedan regresar.—afirmé —me despedí de mis amigas, nos subimos al taxi y fuimos al lugar que propuso, no podía dejar de sentirme incómoda, más cuando al llegar este me pide prestado dinero para pagar el taxi, trague grueso mientras pensaba que también tendría que pagar el lugar.«¿En qué me he metido? — me pregunté. —no pretendo ser sugar mami de este tipo, estaba a punto de arrepentirme, pero quería hablar y no digamos mentiras, quería que me hiciera el amor de nuevo, este motivo me impidió quedarme en el taxi y seguir mi camino».Salimos del taxi y me pide que espere, minutos más tarde regresa con las llaves de la habitación.Me molestó un poco y decidí preguntar.—Me habías dicho que no tenías dinero porque habías olvidado tu cartera, ¿cómo es que has pagado la habitación y este lugar que se ve costoso? —musité notoriamente.—Es cierto, olvidé mi cartera, pero conozco al dueño del lugar. Ven muero por besarte, me encanta que hayas venido aunque sea solo hablar según tú. —dijo sarcástico.—Pensé que no volvería a verte más y era triste pensarlo, porque me has flechado, me encantas mujer bonita.—argumentó Scorpion.—¿Entiendo, aquí es a donde traes a las demás clientas, verdad? —pregunté celosa.«Qué estupidez estás diciendo, por qué té comportas como una adolescente celosa, pensaba para mis adentros, y la verdad es que me sentía celosa y molesta de imaginar que eso fuese cierto».—¡No!—exclamo —¿cómo crees? —no he traído a nadie más que a ti a este lugar. —¿te da celos imaginar que sea así?—preguntó—Para que no tengas dudas no estoy saliendo con nadie, estoy completamente soltero hasta que aceptes ser mi novia —inquirió. —ven, déjame besar esos hermosos labios rojos, no te resistas, tendremos mucho tiempo para hablar, mujer, tú pareces la ninfa de mis sueños.Intenté contradecir lo que había dicho, pero me halo hacía él y comenzó a besar mi cuello, a desnudar mi cuerpo y alma, me encantaba la manera en que me hacía sentir, como me miraba, queriendo devorarme solo con sus hermosos ojos grises, mi corazón se aceleraba al tener ese cuerpo del deseo desnudo frente a mí.Me lleva a la cama y una vez que me tumba en ella empieza a besar mi cuerpo lentamente hasta bajar a mis partes, me estaba volviendo loca...Él siguió dándome placer, se subió e introdujo su miembro en mi vagina, la cual estaba muy mojada, me miró y empezó a decirme lo mucho que le guste, acarició mis labios y me besó.—¡DIOS!, mujer eres muy bella. —eres lo que había estado esperando todo este tiempo, permíteme conquistar tu corazón Mariam, déjame demostrarte que puedo hacerte feliz, me encantas, eres tan perfecta. —espeto Scorpion.Habíamos terminado y me recosté en su pecho, tenía tanta vergüenza, me sentía estúpida, era una mujer de 32 años metida en la cama de un hotel con un adolescente que podría ser mi hermano.Intenté sentirme mal y culpable, pero lo que me decía era tan dulce que me hacía olvidar lo razonable, y es que nunca nadie me había tratado de ese modo, me hacía sentir amada, deseada.—Tengo que irme, es tarde y debo ir a trabajar mañana. —expliqué.—¡Oye no! —por favor quédate conmigo, podrías irte en la madrugada, te acompañaré a tu casa en taxi, si es posible, pero quédate permíteme disfrutar más de tu presencia. —dijo triste.—¡Oye!, ¿esta vez está bien si te llamo? —Preguntó. —no quiero incomodarte, pero no quisiera que esta sea la última vez que nos viéramos.—Es mejor que sea yo quien te llame. —aseguré. —decidí quedarme, él se había dormido, yo no pude, le dejé una nota y me fui antes del amanecer.Al día siguiente me fui a trabajar, al salir llamé a mis amigas, estaban bien, él había estado tratando de comunicarse, pero no le respondí.Habían pasado dos semanas y él intentaba comunicarse, pero no había respondido, yo era una mujer mayor y madura y tenía que comportarme como tal.Esa tarde tenía un almuerzo con un cliente del cual no sabía mucho, así que me organicé y llegué al lugar donde había sido acordada la cita.Al llegar no ví a nadie, ordené y traté de comunicarme con la persona, pero no hubo respuesta, cuando decidí marcharme, ví a Kaleth sentarse, me saludo y comenzó hablar, yo estaba en shock.¡Hola! —exclamó entusiasmado. —oye, no quiero parecer un acosador, pero estoy muy interesado en ti, me gustas de verdad, estoy enamorado de ti y sé que te gusto, no lo niegues. —¿a qué le tienes tanto miedo? —preguntó.¡DIOS!—exclamé asombrada. —mira niño, estás actuando como un psicópata, que haces aquí, vete por favor, estoy esperando a alguien, y por supuesto que no me gustas, lo que pasó fue un error, ahora mismo estoy en horario laboral y estoy esperando a un cliente, podrías marcharte por favor. —le pedí.—¿Podríamos hablar un momento, por favor? —preguntó Scorpion.—No, no hay nada de que hablar, lo que pasó te repito ha sido un gran error, podrías solo olvidarlo, por favor Kaleth, vete, estoy esperando alguien, tú no deberías estar aquí. —esclarecí irritada.—Lo siento, no quería asustarte, pensé que te daría gusto verme, pensé que te gustaba, que esto era algo especial, no solo para mí. —dijo decepcionado. —soy un idiota, de verdad pensé que te gustaba y es por eso estoy aquí
—¡Espera, no te vayas por favor!.—exclamó, tratando de detenerme. —No te presionaré, pero promete que vas a pensarlo, Mariam me encantas y me gustaría que dijeras que sí, ven no te vayas por favor, te he extrañado mucho y necesito tenerte conmigo, esta noche, me encantas —¿lo entiendes?Me acerqué, me abrazó y nos metimos a lo que se suponía que era una cama, en ese lugar nos quedamos dormidos luego de hablar y conocernos un poco más.Me despertó el sentir su cálido miembro en mí, me habló al oído mientras me penetraba, me hacía sentir como una quinceañera viviendo su primer amor, sabía que estaba mal, pero ya no podía detenerme, me estaba gustando más de lo que se suponía que debía permitir.—¿Te he mencionado lo hermosa que eres? —preguntó con tono de enamorado. —eres la mujer con la que había estado soñando, me encantas, Mariam Báez. —me gusta cuando dejas escapar esos gemidos, cuando dejas marcas en mi espalda con tus uñas, me gusta mucho cuando cierras los ojos y me pides que no
Quería, pero no podía resistirme, comenzó a besarme y desnudarme lentamente, se retira lo suficiente para ver mi cuerpo, muerde sus labios y me dice lo hermosa que le parezco, su forma de ser me vuelve loca junto a su atractivo físico, me le acerco y comienzo a tocar sus musculosos brazos, bajo mi mano por su abdomen marcado sintiendo sus tatuajes, llevo mis manos a su cabello y comienzo a besarlo, él me sube a sus brazos y me lleva a la cama.—Eres tan hermosa mi diosa de ojos oscuros, oye, soy tan afortunado de que te hayas fijado en mí, jamás imaginé que podría ser posible conquistar alguien como tú, tan hermosa, tan profesional, tan delicada, tan inalcanzable para mí y aquí estás conmigo soy muy afortunado, te amo... —afirmó mientras reparaba cada parte de mi cuerpo.—Porque me dices todas esas cosas, haces que te crea que realmente amas a una mujer como… —dije sonrojada. —hicimos el amor y al terminar me recosté en su pecho, esto se está volviendo adictivo.—¿Quieres que traiga a
Intenté detenerlo, pero salió tan rápido, yo seguía desnuda, no podía salir así… —me vestí y salí del lugar confundida, pero a la vez sentía que era lo correcto, estaba saliendo y decidí acercarme a la recepción …—Hola, disculpa, quisiera saber cuánto debo cancelar estaba en la habitación…. —la recepcionista no me dejó terminar de hablar.—Hola, tú debes ser Mariam —interrumpió—¿eres la novia de Kaleth verdad?—preguntó. —Mariam, tú no tienes que pagar nada, Kaleth se hace cargó de todo, lo he visto salir—afirmó la recepcionista —¿tú tienes las llaves, vas de salida y regresarán o debo poner la habitación como disponible? — preguntó indecisa.—Si aquí tengo las llaves —afirmé mostrándolas —¿oye puedo hacerte unas preguntas? —¿Kaleth trae a muchas mujeres aquí? —pregunté ansiosa.—Llevo 4 años en este puesto y es la primera vez que veo que trae alguien aquí. —aseguró la recepcionista.—¿4 años dices, y lo conoces desde tanto tiempo? —pregunté sorprendida.—Por supuesto, quien no conoce
—Sé lo suficiente y no porque sea un Psicópata o porque te haya investigado para saber cuánto dinero podría sacarte, como seguramente hubieras creído si te hubiera dicho que sé quienes son tus padres, que sé donde vives, te sorprenderías Mariam de cuánto te conozco y eso es solo porque yo sí estaba en serio, para mí era más que sexo. —explicó con seguridad. —no te preocupes, ya no tiene caso hablar de esto, gracias por mi cartera y descuida sé que no es cumpleaños de tu secretaria, el pago se remitirá de regreso, cuídate. —dijo antes de irse.—Espera por favor, aún no hemos terminado de hablar. —dije tratando de detenerlo —se había marchado dejándome con la palabra en la boca, estaba molesta, pero Kaleth tenía razón, no sabía nada de él y, por el contrario, él sabía mucho de mí, entre nuevamente al lugar para buscar a Vanessa e ir a casa.Al día siguiente le di el día libre a Vanessa y yo trabajaría desde casa, mientras intentaba sin resultados contactar a Kaleth, decidí saber un poco
Me quedé esa noche en su casa y le hice muchas preguntas, quería conocerlo y vaya sí que era un chico asombroso, había desafiado a sus padres quienes no habían estado de acuerdo con que a él le gustara el arte, especialmente el baile, si yo que presumía de ser la adulta de tener 32 años y aún no tenía el valor para decirle a mis padres que haría con mi vida lo que quisiese, Kaleth era muy maduro realmente lo era, no solo por el hecho de que era arriesgado y había decidido enfrentar a sus padres, era todo, el que tenía sus propias cosas, vivía solo, una persona organizada y responsable, sabia lo que quería e iba por ello.Me sentía muy feliz por haber arreglado todo con él, pero estaba asustada, sabía lo que eso significaba, él era muy cariñoso y pues a quien quería engañar, no me sentía preparada para enfrentar al mundo aún.En la mañana al despertar, no estaba en la cama, me levanté, pensé que quizás estaría en la cocina, me dije después de ver que no estaba en la ducha, pero ahí tam
—¿Es en serio Mariam? —preguntó —entonces solo usas lo de tu edad cuando te conviene, te la pasas diciendo que eres una mujer adulta, pero no actúas como una. —Mariam, yo sé que amas a tus padres, de que estás agradecida con ellos, pero no puedes continuar permitiendo que sean ellos quienes dirijan tu vida, mírame ahora es cuando debes ser una mujer adulta, asume la responsabilidad, me amas y te amo, y tu edad no me importa y a ti tampoco debería importarte, no me mires así, sabes que tengo razón, pero si es lo que quieres ni modo, guardaré el auto. —agregó abatido.—Listo amor, voy a pedir el Uber, para poder acompañarte, porque me miras así, Mariam no me digas que tampoco puedo ir contigo en el Uber. —¿es una broma Mariam? —preguntó, molestó. —Dime que estás bromeando, ahora que Mariam, te verían bajarte de un Uber y le dirán a tus padres que andas con un adolescente o es que piensas que eso arruinaría la imagen de mujer culta que tienes ante todos, por favor no seas mojigata, asume
—Iré a la cocina, ¿quieres que te traiga algo? —me preguntó dándome un beso.—No, gracias por ser tan atento Kaleth, él se había ido a la cocina, continúe haciendo mi trabajo, debía enviar un correo y cuando abrí la bandeja de entrada, había un mensaje sin leer de una tal Ingrid.Intenté abrir mi correo y por accidente se abrió el mensaje, lo estaba cerrado y regresé porque alcancé a leer la palabra “te extraño”. —él entró a la habitación y yo estaba celosa y molesta después de leer el correo, cuyo mensaje decía.—Mensajes de Ingrid. —Hola amor, sé que debes estar molesto por la última vez, no quería que te enteraras de ese modo, pero tienes que entender, era tu madre debía ayudarla, te echo de menos, por favor responde, ya no me ignores más, acaso no te gusto lo que hicimos aquella vez en tu casa, porque a mí sí, y deseó tanto volver a verte, pero no sé cómo, si aún sigues molesto. Ya no seas malito y respóndeme, yo sé que extrañas a tu Ninfa encantada como solías decirme, Kaleth amo