— Estará contigo hasta que lo creas conveniente, te pondré esto aquí, cuando sientas que no puedas solo oprime el botón y alguien vendrá a ayudarte de manera inmediata — James coloca el pequeño teléfono por encima de la mesa.—Muy bien. Gracias — Susan se había sonrojado — ¿Le puedo hacer una pregunta?— Por supuesto Susan — Responde James y aquel evento inglés genera un cosquilleo en ella, pero trata de evitar que el hombre se diera cuenta, lo que Susan no sabía, era que James la conocía perfectamente.— ¿Mis padres no vendrán? — James al escuchar aquella pregunta siente como respirar costaba ¿qué debía de decirle? Bueno su padre estaba cerca, entonces James recuerda que Emilio se había acercado a ella pidiendo una nueva oportunidad para arreglar la situación. — Déjame ver que puedo hacer — Fue la respuesta de James mientras veía como Helen cerraba su pequeño puño, después de dar aquella respuesta el hombre salió de la sala dejando a Susan a solas por primera vez con Helen, no había
Julián la sostuvo evitando su caída, de inmediato la coloca en la cama, en eso James también había llegado mientras Carmen ya cargaba a Helen en brazos.— ¿Qué ha ocurrido? — Pregunta James mientras sus ojos estaban puestos en su esposa — Lleva a Helen a mi Consultorio Carmen — Ordena el hombre mientras se acerca a su mujer y empieza a inspeccionar a Susan.— Carmen me ha indicado que sufría de dolor de cabeza intensa, es probable que algunos fragmentos ya estén regresando a ella — James le revisa los ojos.— Sí, es probable que ya tenga algunos de los recuerdos de regreso eso es un avance — Dice James acariciando el cabello de oro de su mujer, cuando se aparta de ella, Julián se percata de que Susan está reaccionando.— Detente, está reaccionando — James vuelve a darse la vuelta y efectivamente Susan estaba parpadeando y lentamente tratando de acostumbrarse a la luz, hasta que abre por completo los ojos.De inmediato ella se lleva las manos a la cabeza.— ¿Sientes mucho dolor? — la v
— Emilio Lefevbre estará mañana por la tarde en la Villa, solo tiene permitido estar 3 horas con ella después debe de abandonar las instalaciones de la Villa, quiero que posterior a su salida lo vigilen día y noche antes de que una nueva entrada en la Villa se produzca — James tenía puesta los guantes negros mientras estaba por delante de uno de sus hombres de seguridad, el hombre estaba tomando todas las medidas requeridas.Aunque al principio quería llevar a Susan y Helen con él a los Estados Unidos teniendo en cuenta la condición en la que Susan se encontraba lo hizo desistir de manera inmediata de aquella idea.— No tenga dudas de eso Jefe, Emilio Lefevbre estará vigilado las 24 horas del día.— Él no entra a la Villa sin autorización mía incluso si mi mujer pide verlo, no lo hará hasta que yo de ni autorización y si de parte mía no hay autorización, no hay entrada — El hombre asiente entendiendo perfectamente la orden de James — Puedes retirarte. Ya tienes todo claro de como func
ESTADOS UNIDOS El Imponente Edificio del Sanatorio Sacramento le había dado la bienvenida a James Campbell, el Doctor de inmediato se había dirigido a su consultorio al tomar asiento había revisado el reloj faltaban algunos minutos para que su primera cita llegará, James revisa su teléfono celular observando la fotografía que le había tomado a Helen, no había dudas de que las únicas personas que podían despertar la dulzura de James Campbell eran su mujer y su hija, justo en ese momento habían tocado la puerta y el Guardaespaldas abre, James vio a su suegra, Gabriela Lefebvre no era aquella mujer arrogante que él había visto meses atrás, era evidente que la mujer se sintió intimidada por su Yerno.— Señor Campbell — Gabriela incluso tenía miedo de hablar.— Tome asiento Señora, tenemos algunos asuntos importantes que tratar.— ¿Lo he ofendido en algo? — Pregunta con temor imposible de ocultar la mujer.— No lo ha hecho y espero que nunca lo haga señora ¿sabe quién soy?— Sí, uno de lo
— ¿Cómo está la Señora? — pregunta Carmen muy preocupada por el estado de salud de Susan — Cuando la encontré en el suelo me había asustado bastante, yo estaba con la niña, ya que justamente se había despertado y cuando baje la había encontrado en el suelo.— ¿Que órdenes dejo James para el interior de la casa? —Pregunta Julián.— Qué ninguna de las empleadas debe de acercarse a la señora — Carmen se había descuidado y no se ha percatado de lo que verdaderamente ha ocurrido con Susan.— ¿Y ninguna se ha acercado a ella? — Julián quería estar seguro si este desmayo era por algunos fragmentos de recuerdo o su cerebro no ha soportado una sobrecarga de información que para Susan no era buen visto, ocasionando su descompensación, Julián es consciente de que el único que puede sostener esta situación era James, el doctor no veía la hora del regreso de su amigo.— No Doctor, ninguna de las chicas se ha acercado a ella, puesto que la señora estaba en el Jardín y allí no estaba nadie — James
— Quizás estoy equivocándome pensando en que todo sigue bien, cuando en realidad nuestra familia ha colapsado, porque es raro que mi madre no esté aquí, no venga contigo.— Tu madre no te quiere Susan para ella solo existen Bianca y Sandra, para el único que tú existes, es para mí. — Tampoco se nota papá ¿qué me están ocultando? Porque ya me di cuenta de que nada es lo que parece.— Los modales con las que tu madre te levanto las dejaste por el suelo, por eso te has metido con un hombre que es casado.— Quizás y muy probable lo he tomado de ejemplo de alguien de la familia. — Señor Lefevbre, tenga cuidado con sus palabras — uno de los guardaespaldas se acerca a ellos y Susan entendió por qué James no permitió que la niña fuera sacada y vista por su padre.— Es mejor que acompañe al señor a la entrada y lo lleven de regreso nuevamente, no tenemos nada de que hablar.— ¿Cómo así? — Emilio no ha esperado aquello.— Papá, no tenemos nada de que hablar — Susan después de decir aquell
Después de dos horas los cheques fueron firmados y entregados en su totalidad a todas las personas que prestan servicios a James, el hombre se mantuvo en su Despacho en todo momento, mientras que Susan jo había salido de su habitación allí estuvo durante toda la mañana por supuesto con Helen a su lado, después de unos minutos más James toma la decisión de salir de su despacho, al momento de cruzar por la habitación que Susan utiliza escucha el pequeño grito de Helen, el hombre no se contuvo entrando en la habitación, su mujer estaba jugando con su hija en la cama.Susan no se inmutó ante la entrada de James es más tal parece que aunque no tenga recuerdos ella está acostumbrada a la presencia del hombre, ninguno de los dos dijeron algo sus miradas se encuentran — ¿Ocurre algo? —Pregunta Susan colocándose de pie, por supuesto la mujer carga a Helen, la niña parece sentir la presencia de su padre, y cuando lo ve se queda mirando a James, Susan en sus adentros llamaba traidora a Helen, pu
— Detente — musita Susan, pero James ya estaba frente a ella escasos centímetros los separaba, la mujer se volvió más pequeña ante el imponente hombre — ¿Qué es lo que quiere? — La rubia toma el valor de alejarse, o por lo menos hizo el intento, ya que James la sostuvo del brazo y ante aquel tacto, Susan podía desbaratarse.— Eres mía Susan, aunque no lo recuerdes, eres mía, mi mujer y no necesito de ningún documento para probar que eres mía.— Yo no quiero ser suya — Susan trata de alejarse, pero por supuesto su fuerza no era ni siquiera la cuarta parte de la fuerza de James.— Aunque te niegues, eres ni amante — Sentencia el hombre asustando a Susan — Y no voy a dejarte en libertad — James después de analizar los estudios de Susan había llegado a una nueva conclusión médica — Eres mía, tenemos una hija juntos y aquello no podrás cambiar jamás.— ¿Qué es lo que quiere de mí? — La mujer pese a estar escuchando aquellas palabras tampoco estaba luchando o rogando por su libertad.— Susa