Cuando Susan abre sus ojos se encuentra aún en la habitación, lo último que recordaba fue que le había dicho a James que no la tocará, analizando la habitación encuentra la cuna, pero ella estaba sola así que, toma la decisión de colocarse de pie acercándose con cuidado a la cuna la misma se encontraba sin su pequeña habitante, Susan sentía mucho cansancio además del dolor de cabeza que estaba empezando a presentarse, la rubia unos segundos después toma la decisión de bajar, ella no sabía ni siquiera que hora del día era, siguió avanzando hasta escuchar pequeños murmullos reconocía la voz de James.Ella vio a James, el hombre se acomodó en el sofá, abrazando a Helen, la pequeña niña en sus brazos parecía encantada. La tenue luz de la tarde iluminaba la Sala creando un ambiente cálido y sereno. Helen, con sus grandes ojos curiosos, miraba a su papá con asombro, sus manitas pequeñas aferrándose a la camiseta de él. James se veía muy juvenil, no portaba su traje habitual.— Hola, mi pequ
Cuando Susan abre los ojos se encontraba en el Sofá, recuerda que estaba allí leyendo un libro cuando el cansancio la venció miró el reloj que tenía en la muñeca dándose cuenta de que era las 6 de la tarde, la mujer se coloca de pie se masajea la frente, pero el azul de sus ojos era más intenso se llevó la mano a la altura del pecho y sus ojos se dirigen hasta la escalera, Susan unos segundos después toma la decisión de subir hasta la habitación al abrir la puerta ve la cuna y con pasos lentos se acerca a ella.Sus ojos azules ven a aquel diminuto ser las lágrimas hacen acto de presencia, y como no iba a llorar si todos sus recuerdos estaban de regreso, de inmediato niega con la cabeza porque ella conocía la realidad recordando las palabras de las mucamas.Susan volvía a recuperar en su totalidad sus recuerdos y sin dudar carga a Helen en sus brazos — mi pequeña Helen, pequeñita de mamá — susurra Susan acercando el rostro de su hija al suyo, la fragancia de bebé se impregna en sus fos
Susan conocía de los Guardaespaldas que estaban en la Villa así que, sin dudar va en busca de ellos, al momento en que la mujer entra en la casa de vigilancia los hombres se colocan firmes de manera inmediata aunque era raro ver a Susan en el área, pero ellos saben que ella es la adoración de James, su mujer, entonces saben perfectamente ante quién están, Susan también sabía que ella misma había cambiado, pero ella entendía el significado de madurez. La vida le había dado una nueva oportunidad al lado de su hija y como esposa, ahora no se trataba nada más de ella, también estaba Helen.— Señora, sea bienvenida — Expresa uno de los Guardias.— Necesito contratar a mujeres para que sean mis Guardaespaldas además quiero saber si James ha buscado a Sandra Lefevbre cuando me tengan disponible esto que acabo de pedirles deben de informarme — Susan se escuchaba muy segura de sus palabras y los hombres de seguridad de su esposo la notaba diferente.— Por supuesto Señora — Responde de manera c
— ¡Señor! — La puerta de la Oficina de James se abre uno de los Guardias tenía un mal presentimiento entonces se armó de valor y abrió la puerta de la Oficina, no obstante no esperaba encontrarse con aquella escena ante sus ojos, James estaba sentado por detrás del escritorio, pero en su regazo estaba la mujer que hace menos de dos horas había entrado, cuya reunión fue rara, pero tenía un asunto importante que tratar, el Guardia sentía que la sangre abandonaba su rostro, la mujer tenía una pequeña sonrisa y James, su Jefe no dejaba que nadie estuviera cerca de él.— Buenos días — Y entonces para complicar más la situación la voz de Susan se había escuchado, el Guardia no sabe como seguía de pie, cuando Susan pasa al lado de él y era evidente que la Mujer había visto a su esposo sentado con una mujer en su regazo — Vaya, estamos en una reunión. — la voz de Susan contenía una tonada totalmente distinta al decir aquello, aunque solo ella sabe como su corazón se hizo añicos ante aquella e
— El Señor tenía una reunión con una mujer, era una reunión de negocios su identidad fue plenamente confirmada y nos hemos asegurado de que su alrededor no genere ninguna controversia con el Señor, no había ningún peligro, ella llega se adentra en la oficina, después de dos horas aproximadamente yo siento que algo no está bien porque los Guardaespaldas de ella empiezan a tener movimientos, nuestros informes no detectaron nada irregular, pero cuando yo tome el atrevimiento de entrar en la oficina los encontré en aquella posición comprometedora, al principio ella traía puesto lentes razón por la cual no nos hemos percatado de su parentesco con Dalia Smith. — Es la hermana Gemela de ella — Leandro se masajeó la frente, Susan nada más se mantuvo en silencio — Se llama Delia lo descubrí hace algunos días cuando estuve verificando el envío de Dalia a África, Delia es la protegida en el caso, Dalia nada más fue una distracción, no obstante ella no quería ser la protegida, Delia quería ser l
— Señor, el CEO de Sacramento Bank está aquí dice que tiene un asunto importante que tratar con usted — James levanta la vista estuvo toda la mañana revisando documentos, claro que Susan en algo tenía razón y era que aunque no estuviera muy familiarizado con los documentos sabe como solucionar los inconvenientes, la Organización a la que pertenece Delia, tenía armas para hacer frente a la Organización de James, a esas horas había muchos despedidos, pero Robert en compañía de Leandro bajo las órdenes de Susan los empleados fueron reubicados en otras Empresas, por supuesto cuidando los detalles de mantener la privacidad absoluta, mientras los nuevos empleados cumplen al pie de la letra las órdenes de Delia y del misterioso hombre que está por detrás de la Organización, aunque tienen dudas acerca de los Presidentes de las Empresas, pero Robert ya sabe que debe de pasar por alto todo por el momento.— Déjelo pasar — James observa la puerta, pero al momento en que Robert entra lo hace en
— ¿Sabes que estás jugando de manera muy peligrosa, Susan? — Robert había puesto en marcha el auto dejando atrás la Empresa de James.— Lo sé, pero también confió en los hombres de James — la respuesta de Susan ha tomado por sorpresa a Robert — Aquella organización quiere destruir la de mi marido y puede que yo no tenga ni la más mínima idea de como continuar con el liderazgo, pero ellos sí.— ¿Qué es exactamente aquello que tú quieres lograr con esto? — Continuar el juego en el que James me ha metido, claramente que ella tendrá sus propios planes y es la de quedarse con James, ella quería ser la que estuviera condenada por así decirlo a estar con James, es como que Papá pata proteger a la hija que tiene con su amante me obligue a mí a hacer algo para protección de aquella hija, Dalia es la mujer con la que yo pensé que James estaba casado y ella es su hermana Gemela Delia, ya tengo todo el informe y soy conocedora del tema porque James me había dicho la verdad acerca de su relación
Susan había avanzado unos pasos más quedando a escasos metros del hombre, James no Expuso ninguna palabra nada más se mantuvo en su posición con aquella mirada llena de intensidad, la habitación era fría, pero en segundos aquello había cambiado. Susan sentía que el hombre la desnudaba con la mirada, ella traía guantes se los quito lentamente con el silencio aun reinando, hasta que James toma la decisión de eliminar totalmente la distancia entre ambos.— Ya estoy aquí, ahora quiero que me expliques de qué niña hemos hablado en la mañana ¿Cuál encuentro? — La voz de James provoca cierta reacción en el cuerpo de ella.— ¿Quieres volver a recordar aquella noche? — Susan se volvió atrevida dándole la espalda al hombre, entonces el brazo de James envuelve su pequeña cintura pegada su espalda al pecho masculino.— Te recomiendo que no intentes jugar conmigo — expresa el hombre con la voz ronca.— No estoy tratando de jugar contigo, si nos volvimos a encontrar es porque el destino así lo quis