—Pienso que te queda muy bien ese conjunto— Comentó amablemente la pelirroja.—¿Tu crees?— Preguntó Alice mientras se bajaba un poco la falda con incomodidad.—Por supuesto, tienes un cuerpo precioso, es obvio que ese traje que usabas no te hacía justicia— Farfulló Deborah con una amplia sonrisa amistosa.—Lo cierto es que jamás había usado un atuendo deportivo tan corto y ajustado… No entiendo como se supone que una chica debe sentirse más cómoda con este tipo de ropa— Respondió la castaña mientras negaba con la cabeza incrédula.—Pues… para todo hay una primera vez. Yo creo que te ves muy atractiva, así que siéntete cómoda y gózalo— Insistió la pelirroja con buena onda.Alice estaba impresionada por la amabilidad de Deborah, no entendía cómo una chica tan linda y amable había sido amiga de Dalton, solo tenías que verlos juntos para ver qué son de mundos diferentes, o mejor dicho, de planetas diferentes. Dalton venía del planeta de los simios, mientras que Deborah provenía de algún l
Oscuridad a solas10:30 PM.—¿Entonces está todo listo?— Preguntó Malek al otro lado de la línea.—Sí, está todo listo, tanto en físico como en digital, incluso te estoy enviando los planos y maquetas 3D a tu correo justo ahora— Respondió Alice mientras adjuntaba los archivos al correo y luego oprimió “enviar”.—Correcto, ahora mismo lo reviso. Ya puedes irte a descansar, te veo mañana temprano— Dijo Malek amablemente para luego colgar la llamada.—¡Por fin!— Farfulló la castaña emocionada luego de apagar su computadora y dejarse caer hacia el espaldar de la silla con satisfacción.Soltó un suspiro y cerró sus ojos haciendo una mueca por la fatiga visual que le había generado un fuerte dolor de cabeza, se levantó, recogió su teléfono, su agenda, su taza de café, apagó las luces de su oficina y luego salió de esta. Ya estaba loca por regresar a su casa, ni siquiera había comido, no tenía hambre, lo único que anhelaba era una ducha fría y dormir hasta el siguiente día.La castaña caminó
Escape.Malek se encontraba en su auto conduciendo hacia el hotel en el que se había estado hospedando desde que llegó a la ciudad, cuando el jefe de seguridad de Monroe’s Company le envió un mensaje informándole que uno de los ascensores estaba averiado y que estaba seguro de que había alguien atrapado en el interior.De inmediato, Malek dio la vuelta y pisó el acelerador a fondo para llegar tan pronto como pudiera, sabia que Alice estaba en la compañía trabajando hasta tarde y temía que pudiera ser ella quien estaba atrapada en el ascensor.Al llegar, aparcó su auto en la entrada del edificio y corrió tan rápido como pudo para ver si había algo que él pudiera hacer, pero al llegar le informaron que todo estaba en orden y que, el señor Monroe y la señorita Davis habían salido ilesos. De inmediato, Malek corrió hacia las escaleras y comenzó a subir para buscar a Alice.(***)Alice, por suerte, ya se había encargado de desechar su orina y también había tirado la taza de café a la basur
Al llegar al hospital, el ambiente era frío y clínico, pero Alice trató de no dejarse abrumar por ello. Caminó hacia la sala de espera del ala de oncología, donde sabía que su madre estaba internada. A medida que avanzaba por los pasillos, podía escuchar el murmullo de las enfermeras y los pacientes en habitaciones cercanas. Cada paso que daba aumentaba su nerviosismo; no sabía exactamente qué esperar.Finalmente, llegó a la habitación. La puerta estaba entreabierta, y pudo ver a su madre recostada en la cama, con una manta sobre las piernas y una expresión serena en el rostro. Su corazón dio un vuelco al verla; aunque estaba allí físicamente, sabía que el tiempo transcurrido había dejado marcas en ambas. Alice tocó suavemente la puerta antes de entrar. —Mamá— Dijo con voz suave mientras entraba en la habitación. La mirada de su madre se iluminó al verla.—¡Alice!— Exclamó su madre, sorprendida y emocionada. —No esperaba verte hoy, aunque hace días que estoy pensando en ti.—Quería v
8:00 AM.Mientras Alice visitaba a su “madre” en el hospital, Dalton iba de camino a una reunión improvisada con los Colman. Hacía ya demasiado tiempo desde la última vez que estos tres se reunieron a discutir sobre los planes para la nueva sociedad y ya era hora de aclarar ciertos detalles, sin dejar de lado la amenaza que Edward le había hecho al castaño de romper la sociedad, él había dicho que lo pensaría y Dalton ya le había dejado demasiado tiempo para pensar; Porque a pesar de querer mantener esta sociedad, Dalton no podía permitir que nadie jugara con sus capacidades profesionales.Con elegancia, Dalton bajó de su auto y se adentró a la Mansión Colman, en la que de inmediato fue recibido con suma cortesía. Una joven empleada de servicio con uniforme de mucama lo guio hacia una sala contigua en la que ya lo esperaban sus socios.—Buenos días, señores— Saludó el castaño con cordialidad.—¡Dalton, Querido! ¡Ven toma asiento! —Farfulló Katherine sonriéndole con amabilidad.—Qué bu
MordazaAl terminar la presentación del proyecto, Alice no podía creer que lo había logrado, lo había hecho bien. Después de iniciar la transmisión fue como si automáticamente se hubiera transformado en una persona diferente. Malek y Dalton estaban maravillados con ella, incluso pensaron que se había equivocado de carrera y que en realidad debió ser reportera o animadora de algún show exitoso.Apagaron las cámaras y las luces, el equipo de televisión comenzó a recoger las cosas y Alice salió de la sala antes de que Dalton o Malek se le acercaran. Ya no solo estaba enojada con Dalton como de costumbre, sino que también estaba enojada con Malek por haberla llamado para venir engañada en este día tan agobiante para ella.La castaña se dirigió a la oficina que habían transformado en camerino y con pesadez se sentó junto a la misma peinadora en la que la habían arreglado y con fastidio comenzó a quitarse el maquillaje con tanta brusquedad que su tez comenzaba a ponerse roja, luego tomó una
—Quiero que te quedes aquí conmigo por un tiempo, no te conozco en lo absoluto. Tu tía Lizzie fue la única mujer que he amado y te prometo por ella que no te haré daño— Musitó el hombre mientras desataba a la joven.—¿Qué tienen que ver tus sentimientos hacia mi tía con tenerme aquí en contra de mi voluntad? —Preguntó la joven confundida.—Sé que no lo justifica y que puede parecer una locura… Pero por mucho tiempo pensé que tenía una hija a la cual me habían arrebatado injustamente y ahora simplemente no quiero quedarme con ese vacío en mi vida. Quiero que me consideres como tu padrino, como ese padre que quizá nunca tuviste. Yo puedo protegerte, puedo darte lo que siempre has deseado— Explicó el hombre con su voz profunda la cual hacía que su acento fuese más aterrador para Alice.El hombre se alejó de ella mientras comprobaba la hora en su reloj y luego se volteó hacia ella y le sonrió inesperadamente.—Se acerca la hora de cenar, le pediré a mis hombres que te lleven a tu habitació
PánicoLa castaña lloraba sin cesar ante el cadáver que tenía a escasos metros de ella, aunque ese hombre no tenía nada que ver con ella, el simple hecho de haberlo visto un par de veces desde que llegó le carcomieron la cordura. Solo así había pasado de guiarla a su habitación a estar muerto ante sus ojos. Eran tantas las emociones que sentía que no pudo evitar vomitar lo poco que había comido durante la nefasta cena.Luego de que Moscú se fuera pasaron un par de minutos cuando unos subordinados del mafioso entraron al comedor, Alice intentó correr, pero estos la capturaron sin mucho esfuerzo y volvieron a dormirla con un pañuelo humedecido de ese químico espantoso.Horas más tarde, la castaña despertó en la habitación que habían preparado para ella. Ella estaba demasiado aturdida, entre la droga y el trauma que recién había vivido estaba deshecha. Parpadeó repetidas veces para aclarar su vista y lo primero que vio fue el acolchado de felpa de la cama en la que estaba acostada boca a