Él.
Me siento como el hombre más estúpido del mundo en este momento. Miro de nuevo hacia la puerta del recibidor del edificio donde está el departamento de Mila.
Niego varias veces sin poder creer como fui tan estúpido como para pensar que ella entendería que había surgido una emergencia y… he ido. No estaba de guardia pero acudí al llamado.
No lo pude evitar. Ser bombero es mi vida y al escuchar a alerta, bueno… solo acudí. Pero ¿Cómo no pensaste en Mila?, en esa cita que tanto te tomo pedir.
Si que eres estúpido Alexander. Golpeo de nuevo poste cercano al lugar donde estoy. Me quedaré aquí, hasta que ella salga y me escuche.
Al cabo de unas horas subo de nuevo y tomo el celular. La pantalla me dice que tengo un mensaje más:(Número desconocido) (6:00 p.m.)Mila, por favor ¿podemos vernos?Bufo, si él piensa que le contestaré, está muy equivocado. Me meto a la ducha. Tengo que ir a la cena con mi padre.Escojo un vestido azul marino de cuello en V y mangas largas, cae al cuerpo. Unas zapatillas negras y discretas le irán bien con una bolsa del mismo color. Me maquillo ligeramente y salgo de mi habitación, Kelly ya está aquí.—Te ves muy hermosa— me dice con una amplia sonrisa pero yo la ignoro cruzando la sala.Tomo las llaves del reci
A la mañana siguiente como es costumbre me empujo a trotar por 1 hora y vuelvo a casa. Tomo una ducha y me preparo para ir a la escuela, no sin antes desayunar.Olivia me mira un tanto recelosa, no sé si por lo sucedido ayer. Es absurdo. Eso no es su asunto y esas flores son… solo las quiero fuera.Conduzco al campus y ahí el día se pasa volando. Ni siquiera me he dado tiempo de revisar mi móvil. Trato de concentrarme en las clases y olvidar los problemas.Voy caminando con Yumi a mi lado en dirección al auto.—Nos vemos mañana Mila— se despide y entra en su auto. Se ve mucho mejor que hace unos días. Camino hacia el mío y pienso en ir a comprar el vestido para esta noche
—Mila… espera— toma de nuevo mi brazo pero ya he salido de la pista, no estoy más tranquila, siento el corazón en mi cuello—. Espera…Me detiene por el brazo y se posa justo frente a mí. Acaricia mi rostro pero yo no puedo mirarle a los ojos.—Yo… no quería incomodarte— digo alejándome de él, veo como niega varias veces y trata de seguir cerca. Mi corazón está desbocado.—Perdón, fue por inercia, no me has incomodado— me encojo de hombros y desvío la mirada tratando de buscar a mi padre.—No importa, iré a buscar a… mi padre.Estoy bastante confundida, no pu
—¿Te ha gustado?— pregunta con un bocado en la boca y yo asiento—Eres bueno— sonríe a medias y vuelve a pinchar la pasta. Doy un sorbo más a mi vino.—La siguiente será tu turno— dice alzando varias veces las cejas, ¿La siguiente?—¿Quién era la chica?, ¿una exnovia?— digo recordando a la mujer que colgaba de su cuello como orangután. Es estúpida la pregunta pero… bueno el va por la vida preguntando si tal o cual es mi novio.—Para nada—dice riendo.—Eso quiere decir que, ¿no sales con nadie?— vuelve a negar y por su expresión sé que va a d
El molesto sonido de la alarma me despierta. Me siento ansiosa de nuevo. Doy un salto de la cama y voy a enjuagarme la cara y ponerme ropa deportiva.Son las 6 de la mañana, he dormido apenas 3 horas o menos y ya me es necesario ir a correr como todas las mañanas. Tomo mi reproductor y salgo a calentar.El primer rayo de sol se está asomando cuando comienzo mi recorrido matutino. Trato de relajar las piernas y obligar a mi cabeza a no pensar en lo que pasó anoche. Tal como si fuera un sueño. Doblo en la primera esquina y continúo.Ya hay gente en las calles, algunas haciendo deporte como yo y otras más abriendo locales de café.Mi mente la ocupa el intenso beso de anoche. De verdad esto
Estoy esperando mi turno en las butacas del auditorio—Bien, la siguiente es Tamara— llama la profesora. Después de ella seré la siguiente. Estoy bastante tranquila, haré lo que mejor sé hacer. Puedo soportarlo.Ella se mueve con ligereza, tiene elasticidad pero sus piernas son cortas, agacha mucho su cabeza y su dorso no está apretado.—Gracias señorita— carraspeo, cuando ella parece un poco confundida, le han dado 2 minutos solamente.—Mila— se vuelve a mí y yo me pongo de pie completamente erguida, respiro profundo. Me pongo en el medio del templete, muerdo mis labios y alzo la barbilla.La música empie
—La comida está deliciosa —dice y yo sonrío—. Y tú te ves hermosa—Gracias— digo con los dientes apretados. He tenido que cambiar mi ropa para que él se sienta más tranquilo.—¿Cómo te ha ido en la audición?— le explico que para mí todo ha ido muy bien y que los resultados estarán mañana—. Pues me encantaría ir a verte a esa obra.—Claro— sonrío y doy un sorbo al vino. Terminamos de comer y vamos directo a la sala de estar, enciendo la televisión.—¿Quieres ver el televisor o alguna película?— encoje sus grandes hombros.—Lo qu
Estoy pegada a su pecho, y siento su agitada respiración. Tengo que hacerlo confiar. Comprendo lo difícil que es confiar en alguien y más difícil aún confiar en ti mismo.—Tendré que demostrarte que estás equivocado entonces— me mira confundido y me separo de él hasta quedar de frente—. Déjame hacerloTomo la orilla de su camisa y comienzo a deslizarla hacia arriba, puedo notar sus músculos tensos. Termino de sacarla de su cuerpo y me detengo a mirarlo.Efectivamente, él tiene injertos de piel en su torso, comienzan en su ombligo y van hacia arriba hasta llegar a su pecho en el lado izquierdo.Mis ojos se abren como platos, debió haber sido una quemadur