Travis POV

Mis manos tiemblan, nunca había sentido tanto miedo en mi. Es como si fuera un pequeño niño temeroso de que su padre le pegue. Y es porque no quiero perderla al decirle la verdad, sé perfectamente que el imbécil de Frédéric le pudo haber dicho muchas cosas malas de mí porque no habría manera de enterarse más que con unos de mis antiguos socios.

La veo por el retrovisor y no puede sostener su mirada en la mía. Abby es una de las pocas chicas que expresan con sus ojos lo que su boca no dice y eso es jodido.

No quiero llegar a casa, aún no sé cómo comenzar. Estoy tomando el camino más largo para poder contener la maldita ansiedad y el maldito nerviosismo.

—Este no es el camino a casa.

—Lo bueno de todo esto es que no le dimos el dinero a aquellos imbéciles—dice rápidamente Jack, tratando

Logró ver que Abby nos fulmina y luego se cruza de brazos.

—Travis presta más atención a la carretera, aún no me quiero morir—dice Lydia.

—De acuerdo, cómo órdenes Jameson—digo con mis labios apretados.

Después de dar un par de vueltas y esperar a que los semáforos cambiarán por fin llegamos a casa y el jodido miedo no ha cesado.

Abby es la primera en bajarse del auto azotando la puerta, Lydia la sigue, después Liam mientras Jack decide abrir la puerta y solo faltaba que todos estuviéramos dentro para que ella soltará:

—Bien. ¿Nos van a decir?—se lanza en el sofá con sus brazos cruzados.

Suspiró e indico a los chicos que se sienten a mi lado para que contribuyan en la conversación, ya que estos estaban sentados en las escaleras.

Jack toma la mano de Lydia y ella hace una mueca de enojo.

—La verdad es muy larga—dice Liam—Pero si eso es lo que quieren, está bien.

Abby asiente viéndolo fijamente. Tomo fuerzas para comenzar.

—Antes de ustedes nosotros éramos unos chicos bastantes...—carraspeo un poco y luego vuelvo a tomar la voz—¿Cómo definirlo?.

—Hacíamos negocios ilegales con personas realmente peligrosas—dice Jack—A parte de las carreras y demás cosas, éramos un clan bastante fuerte y famoso en el bajo mundo, teníamos una imagen de chico problemáticos aquí pero allí no.

—Yo era el jefe de todo—digo tomando la atención de Abby—Era alguien malvado Abby. No te voy a negar que quise a alguien, alguien ajeno...

—¿A quién Travis?—cuestiona con sus ojos un poco cristalizados. Tardamos unos minutos en responder y ella vuelve a decir: —¿Era algo de Fréderic?

—Si...—asiento con un suspiro—Fréderic era como un hermano más. Pero me enamoré y el amor no se puede controlar.

Abby cierra sus ojos y suspira—¿Quieres decir qué nosotras estuvimos a punto de morir por tú maldita culpa?.

—No, no tanto por él Abby—dice Jack un poco molesto—Todo fue por los malditos celos de Frederic, porque tiempo después nos enteramos de que Travis le quitó el reinado a Fréderic en el bajo mundo.

—Algo que nos impacto mucho fue ver a Guido con éste. ¿Alguien sabía algo? ¿Por qué estaba él con Frédéric?—cuestiona Liam con su ceño fruncido.

—¿Qué no era tu socio de confianza?— me cuestiona Lydia con sarcasmo—Pues resulta que el idiota ese era hermano de ese tal Frédéric.

Liam frunce su ceño al igual que yo. ¿Cómo qué hermano? Nunca me llegue a enterar de que Frédéric tenía un hermano.

—No es posible, nunca llegamos a oír de él—dice Jack—A menos de que el mismo Fréderic se haya encargado de tenerlo en secreto.

El timbre de la puerta suena y Liam se levanta para abrir. Ryan nos sonríe ampliamente mientras descarga sus maletas con una mueca de cansancio.

—El viaje duró menos de lo que pensé—dice abriendo paso con sus gigantes maletas—Uy ¿Hay reunión?.

—Como siempre Ryan Gosling llegando tarde a todo—dice Jack a la vez que se levanta para ir a la cocina.

Ryan se acerca a nosotros con su ceño fruncido y nos ve a todos.

—¿Donde está Guido?.

—Resulta que Guido salió siendo hermano de un enemigo de hace tiempos—digo tomando su hombro—Y desgraciadamente para él: murió.

—No precisamente—inetrrumpe Liam con su teléfono en mano—Eso creemos

—¿Cómo qué creen? ¿Qué m****a sucedió?, No estoy entendiendo nada.

—Nos secuestraron Ryan—dice Abby viéndolo fijamente—Y todo por las malditas malas acciones de la bola de inútiles de Jack, Liam y Travis.

Abro mis ojos con impresión al escuchar aquello.

—Oye yo estoy aquí—digo con mis cejas elevadas. Ella alza sus hombros y dice en señas: "No me importa".

—¿En dónde está Guido ahora?—la pregunta de Ryan hace que cortemos la pequeña discusión.

—No lo sabemos—digo rascando mi nuca—Lo dejamos muy mal herido pero Fréderic si murió.

—Le disparamos y se quedó en el suelo—dice Liam—Creo que los agentes se encargaron de él.

—Ese bastardo ya tiene que estar en el infierno—añade Jack desde el umbral de la cocina con una cerveza en su mano—Lydia tenía razón, era un maldito farsante.

—No lo puedo creer, lo conocí en Italia hace cuatro años y no parecía ser malo, o sea jamás ví una mala jugada por parte de él...

—A veces las personas nos hacen creer que son diferentes—dice Abby con su vista en mí. Se levanta rápidamente fulminandome con la mirada.

Aprieto mis labios y entrelazó mis manos. Lydia va hacia donde está Jack y puedo oírla decir:

—Tú y yo tenemos que hablar Jackson Becher.

Liam se aleja con Ryan hacia el patio trasero para seguir hablando de lo sucedido. Yo me tardo un par de minutos para poder ir a hablar con Abby.

Jack después de unos minutos se despide tomado de la mano con Lydia. Me pasa una cerveza y se la acepto.

—Amigo, ve hablar con Abby y cuéntale todo de tu pasado, si en verdad la amas; jamás le mentiras.

Asiento y me levanto para ir hacia la habitación en dónde fue Abby. Abro la puerta y ella se encuentra recostada viendo su teléfono.

—Abby yo...

—Me iré de nuevo a donde mis padres—dice rápidamente con tono frío.

—¿Qué?—me acerco a ella intentando tomar sus manos pero se niega.

—Sí, no quiero estar con un maldito mentiroso—se levanta acomodando su pijama y atando su cabello en una coleta—¿Por qué siempre tus acciones lo arruinan todo?

Aprieto mis labios y suelto un bufido—Joder Abby, solo déjame decirte todo, por favor. Solo no me abandones—digo tomando su brazo con rapidez y acercándola a mí-—Puedo mirarte a los ojos durante años y decirte que sin tí no podría vivir.

Ella aprieta sus labios y una lágrima resbala por su mejilla—¿Dejaste de hacer esas cosas?—asiento muy seguro—¿Por qué?.

—Deje de hacerlo semanas después de conocerte, simplemente porque me concentré más en tí, que en los negocios—suelto con una sonrisa recordando aquello—Y así sucesivamente el negocio fue cayendo y todos los del bajo mundo también. Me enteré días después de que a algunos los habían tomados presos y me sentí bastante afortunado.

—¿Y la chica de la qué te enamoraste?

—¿Quién?

—La novia de Frédéric

—¡Oh!. Ella me dejó. No lo sé...de la nada desapareció, tal vez fue porque vió que yo ya no era el mismo cuando nos veíamos y tal vez porque se enamoro de alguien más.

—¿No era Daniela?.

Bufo y coloco mis ojos en blanco.

—No. A Daniela la conocí en las carreraspero eso no importa ya, antes las mujeres entraban y salían de mi vida sin dolor. Ahora todo es diferente contigo, porque si tú llegarás a salir de mi vida; me dolería bastante Abby. No sé qué hiciste en mí pero me cambiaste y eso es lo mejor que me pudo haber pasado.

Abby entorna sus ojos. La abrazo a mí y beso su frente.

—Mi pasado me atormenta cada día mi amor, pero contigo todo es más claro, contigo he podido olvidar ese maldito pasado—beso sus labios con delicadeza—Y perdóname por todo lo que he hecho y todo lo que haré. Solo no me dejes nunca.

—Solo el destino lo sabe—dice con una sonrisa—ahora vamos a ver a nuestro Tom.

Liam POV

—Hay muchas cosas que nadie sabe de Travis, demasiadas para ser sincero—digo tomando un sorbo de mi cerveza. Ryan me ha estado escuchando durante un par de horas.

—Pero aún así ha sido un muy buen amigo con ustedes. ¿Cierto?

Sonrió y asiento—Por supuesto, Travis ha sido nuestro mejor amigo durante varios años Ryan y nunca nos ha dejado solos.

—Quisiera haber tenido un amigo así desde un principio.

—Lo importante es que ahora nos tienes—digo con una sonrisa—Ahora nos tienes amigo.

Y él me devuelve la sonrisa y me abraza.

—¿Sabes? Tengo que buscar el paradero de Guido, conociendolo ahora mismo estará buscando venganza.

—Bien, solo cuídate ¿Sí?—alzo mis cejas.

Asiente y toma el último sorbo para después levantarse e irse.

(...)

Me tumbo en la cama mientras Tom intenta jugar conmigo.

—Ya Tom, detente.

Éste hace un gruñido y sale por la puerta entre abierta.

Después entra Travis y me sonríe.

—¿Qué haces raro?

Coloco mis ojos en blanco y le digo que nada aparte de respirar el mismo oxígeno que él.

—Maldito idiota—rie y niega a la vez —Venia para proponerte algo

—¿Qué idioteces vas a decir?—arqueo una ceja.

—No más de las que tú dices—digo tomando asiento—Pude solucionar todo con Abby y estábamos pensando en ir a la finca, para distraernos un poco antes de que el fin de semana acabe.

—Bien, tal vez ahí encuentre a alguien que quiera estar conmigo.

Travis ríe mientras me dice que soy un idiota y luego sale.