Cuando creí que al fin me había desecho de toda cadena para mi vida, Sebastián entró a mi vida con un solo objetivo, y lo que más me cabrea es que como una estúpida cai en sus juegos de seducción.Grito con todas mis fuerzas mientras tiro todo lo que está frente a mi al suelo. —¡Como demonios fui tan estúpida!. Tenia más de una semana de estar en esta cárcel, ni siquiera podía salir de esta maldita habitación porque decía que volvería a huir como la última vez.Si, intenté huir pero todo fue inútil porque ni siquiera crucé el pasillo cuando el se me cruzó en el camino totalmente desnudo pues acababa de salir de la ducha."Pero no puedes negar que te morirás por saborear cada parte de su cuerpo".¡¡Mierda, si!!, eso es lo que quería pero esta vez me resistí a mis instintos Lujuriosos. Y lo peor que pude hacer es intentar golpear su garganta tal como lo hice con Alan porque el desgraciado me empotró y me susurró:"Tu no vas a salir de aquí hasta que llegue el día en que vuelva follar
—No me causas nada.Ladea una sonrisa como si supiera que miento.Se acerca a mí oído y suelta su aliento a menta en el. ¡¡Maldición, se sintió exquisito!!.—No mientas. —Musita. —Tu cuerpo sabe perfectamente que es lo que desea. —respirar se me dificulta y controlar mi respiración es difícil. —Caerás...Intento controlar mis deseos al dejarme llevar pero, ¡¡Maldita sea, ya había probado de él y mi cuerpo me grita que me deje llevar!!. Sus labios se deslizan por mis mejillas y rozan mis labios tentándome a saborearlos y unirlos con los míos. ¡Mierda, mi garganta quema como el demonio!. Quería probarlos quería que me follara y mi mente comienza a fallarme, no se por cuanto tiempo podré resistirme a esto maldito infierno que me quema y me mata.Intento no inclinar mi cabeza y mis ojos siguen cada movimiento suyo, mi cuerpo comienza a temblar cuando sus labios se detienen en la punta de mi pezón."¡Por favor hazlo!".Es lo único que mi mente grita desesperadamente, quería que lo devorar
—Ni siquiera lo intentes Maricela. —advierte al ver mis intenciones. —Este lugar tiene la sensores de movimiento activados en toda la casa y el jardín. Si sales, los guardias de la entrada..—Si, si, si, —dije aburrida. —Me van a capturar y me traerán de regreso.Se queda parado observándose por leves instantes, observo como una gota de sangre rueda por su mejilla y al sentirla toca la gota de sangre, al verla sonríe de lado mientras la limpia con sus dedos.—Así que eres capaz de esto. —siento sus palabras algo frías y agrias. —Bien, quieres jugar Sucio, así será.—No, espera..Ignorándome y sin darme la oportunidad de huir o decir algo me carga como si fuese un saco en sus hombros, comienza darme fuertes nalgadas en mi culo pensando que me dolería en cambio lo estaba disfrutando más que nunca, si lo se, soy una puta masoquista.Me lanza sobre la cama de la cual me había encadenado, con una enorme sonrisa abro mis piernas y el complacido me acorrala, en un movimiento me subo sobre e
—¿Qué?. —no salgo de mi asombro. —¿Tienes una hermana?.—Sube y prepárate. En seguida te subiré lo que usarás.Se aleja mientras saca su celular al perderlo de mi vista, un poco ansiosa entro y me doy una ducha tan larga que jamás creí darme, si, estoy nerviosa, tenía muchos años que no veía a mi familia.La ansiedad me invade por dentro, no sabia como iban a reaccionar cuando venga entrar, o que dirían cuando me vean entrar con un hombre que no sabía si sentía amor por el o solo era atracción intensa.—¡Maricela!..Al escuchar la voz de Sebastián salgo del baño cubriendo mi cuerpo, me observa detenidamente para después dejar una caja roja encima de la cama.—Tenemos media hora para irnos. —informó —Apresúrate quieres.—Aja —respondí provocándolo porque su frialdad hacia a mi no le quedaba así que me quito la toalla dejando mi cuerpo totalmente desnudo. —Por favor. —musito acercándome de forma seductora hacia a el.Muerdo mi labio inferior al ver lo delicioso que se ve con vestido de
Soberbios, orgullosos, pedantes son las características principales de mi familia de muchas más, y eso a ellos les enorgullece tanto por ser la familia de mejor posición social de entre muchas. Sus miradas me decían que para ellos solo era un mocosa rebelde que fue tuvo la suerte de ser adoptada por ellos.—Así que al fin te dignas en visitar a los que te sacaron de ese Mugroso orfanato. —dijo mi padre con su toque de arrogancia en su voz.—Pero que más podemos esperar de una huérfana. —dijo mamá con decepción. —Pero mira que tienes suerte que uno de los hijos de la familia Smith, fijará sus ojos en ti.¿Qué cosa dijo?. ¿Cómo que uno de sus hijos?. ¿Acaso tiene más hermanos?. Miro a Sebastián y el solo finge no haber escuchado palabra alguna. Se acerca a mis padres y ellos con gran alegría lo saludan pero a mi, me ignoran.—Me alegra saber que haya rescatado a mi hija de las garras de ese muerto de hambre.Fruncí el ceño molesta porque siempre se expresaban de una forma tan arrogante
Mi corazón se acelera mientras me alejo de la puerta, ¿Que está pasando?. ¿Porque reacciono de esta manera?. No comprendía que me estaba pasando, escuchar de sus propios labios que me me amaba acelero mi ritmo cardíaco al punto de de que se me dificultara la respiración como si llegara a tener un maldito infarto.¡¡Pero que mierdas le pasa!. Primero dice que lo nuestro es una simple atracción, ahora se llena la boca diciendo que me ama. "¿Que no te parece lindo?".¡No, joder no, yo no quiero amor, no, yo no quiero volver a ilusionarme con alguien y menos con él, Mi mente está aturdida, no podía ni siquiera podia procesar lo que me estaba pasando. —Esto.. no.. puede ser.Yo no buscaba amor, después de mi experiencia con mi primer matrimonio fallido no necesito a nadie a mi lado."Eso es lo que tú quieres creer, pero sabes que te agrada la idea". No podía comprender en qué momento se había enamorado, de mí, esto ya no se Igual que antes y lo sabía pero no quería admitirlo. ¡porque
—No quiero. —replicó. —Esta es mi casa y tu solo eres una invitada. ¡Maldita sea,!. Porque mierdas no se va y punto. ¿Acaso quiere guerra?. ¿Tanto desea una pelea conmigo por ese imbécil?.Me doy vuelta y la observo mientras mis ganas de estrangularla por meterse con Sebastián crecían de una ta considerable que estaba por explotar.—¿Que quieres?. —la encaré. —Provocarte —respondió con una sonrisa malvada. Coloco mis manos en mis caderas mientras me río sarcástica inclinando mi cabeza hacia atrás, camino hacia la mesita de noche y observo lo que está sobre ella.—Ni si quiera te importó lo que yo sintiera. —La verdad, no. —respondió con simpleza. —¿Eso debe inportarme?. —dijo sarcástica.Bien, si desea guerra se la daré, cabreada tomo la pequeña lámpara y se lanzó con todas mis fuerzas y ella la evadió pero logró golpear su hombre—¡¡Maldita traidora!!.. Me lancé sobre ella golpeándola con todas mis fuerzas, pero ella ella me toma del cabello y me da un derechazo que hizo sangra
La mezcla del alcohol y el deseo, eran más fuertes si, pero no tanto como cuando Sebastián es quien me besa, me acaricia o me penetra con fuertes gruñidos, Mis piernas se enrollaron en su cintura hace varios minutos, aún no se había desvestido pero no podía decir eso de mi ya que estaba totalmente desnuda frotando mis senos contra su pecho. —No espera. —¿Que pasa?. —me deja sobre la cama con su respiración acelerada. —¿Estas bien?. Me coloco de pie y recogí la bata del suelo para volvernos colocármela, no debí permitir que esto volviera a pasar, fue un error que por poco pasa a mayores. Jefferson parecía confundido por mi cambio drástico de mi comportamiento. —Vete de aquí. —Sabia que te arrepentirías. Me encierro en el baño para lavar mi rostro y poder despejar mi mente, mi cuerpo ardía demasiado así que me meto a la tina y dejo la llave abierta para que esta se llene de agua fría y así poder enfriarlo y desaparecer la excitación. ¿Qué estaba a punto de hacer?. ¡¡Joder, soy u