—¿Estas dormida ?. —Aun no. —respondo en murmullo. —Y tú, no estás cansado ?. —No. Pero tenemos que dormir, ya es demasiado tarde.—Aunque lo hagamos, no tenemos porque preocuparnos.—¿Cómo que no ?. —se levanta haciéndome aún lado. —Olvidas que mañana es el cóctel de los Wilson?. Ruedo los ojos al haberlo olvidado. —¿Es necesario que vayas tú también ?. —Es mi obligación Maricela, ahora soy el vicepresidente.—Si pero tu hermano puede ir solo, no te necesita. —argumento bostezando. —Dile que vaya con su novia.—¿Quieres decir que mi puesto no es importante ?. —dijo molesto.—¡Oye !, yo no he dicho nada. —replique enfadándome. —Lo único que dije fue que no es necesario que tú vayas, así podríamos pasar más tiempo juntos. ¿Por qué carajos siempre alteras mis palabras ?.Cabreada me levanté molesta de la cama, Ignorando su voz detrás de mí, me encerré en el baño tirando la puerta en su cara, me pedía abrir la puerta pero solo me limité a ignorarlo, es un idiota, siempre que yo le
—No te enojes por la verdad, cuñado. —repetí sus mismas palabras ladeando una sonrisa al ver que se había enfadado. —La verdad duele, no es así y más ahora que quieres un hijo para que tú padre no le dé nada de la herencia a Sebastián.—Maricela ya basta por favor. —Sebastián me obligó a verlo a los ojos. —Detente, ya no sigas con esto.—No, —replique, —Todos deben saber qué clase de hombre es tu hermano, además, ¿Por qué lo defiendes tanto ?. El te quiere dejar sin nada Sebastián.—Ya basta!. —dijo Sebastián alzando su voz. —Tu y yo hablaremos después. Sebastián me sacó de la entrada, llevándome hasta otro extremo de la enorme mansión donde se estaba celebrando el aniversario de bodas de la familia Wilson, obviamente Sebastián estaba Molesto por la discusión entre su hermano y yo, pero yo solo me defendi de ese par de Buitres. —No debiste armar más conflictos con mi hermano. —Sabes como soy Sebastián, y yo no iba a tolerar sus estúpidas indirectas.—¿Por qué dijiste que no le da
SEBASTIÁNPor primera vez en la vida, me sentía perdido, con el alma dependiendo de un hilo al ni tener noticias de Maricela, me sentí impotente porque no pude hacer nada para protegerla de ese hombre que ni siquiera sé, como pudo meter a las propiedades sin ser visto. Mis padres y los suyos estaban conmigo en la sala de espera a tener noticias de ella, la boda había cancelado cuando siquiera comenzó, en el momento en que la vi desvanecerse no dude en ir por ella antes de cayera sobre el piso. Mi padre había llamado a los paramédicos pero no me iba a quedar a que ellos llegarán, teníamos más de dos horas esperando a que el médico me dijera que estaría bien que ambos lo estaban, pero en una situación como está, se puede esperar lo peor . —¿Cómo está? —escuchar la voz de Summer me hizo ver hacia dónde se encontraban sus padres, se vela preocupada por ella. —¿Qué fue lo que pasó?. —Un hombre entró a la casa y tomó a Maricela como rehén asegurando que el bebé era suyo. —i¿Como es p
Mi hermano mayor, un día vino a mi propia casa a decirme que en la cara que si ella se moría bien merecido lo tenía, pero su boca fue cerrada cuando mi empleada le dio una cachetada gritándole en la cara que era la peor escoria al desearle la muerta a una persona, pero la verdadera sorpresa fue cuando la vimos tomar una niña en sus brazos y presentarla ante mi. ¡Joder! Esa niña, era la viva imagen de mi hermano y lo peor es que el se quedó estupefacto cuando vio a la niña, era lógico que sacó cuentas cuando la niña dijo su edad, la niña era adorable no lo negaré, todo lo opuesto al engendro de mi hermano Jonathan. Ella tenia sus ojos algo verdosos y azules, cuando sonreía se figuraban en cada mejilla suya un hoyuelo, Jonathan intentó acercarse a ella y cargarla pero mi empleada no se la llegará al principio, para sorpresa de todos y más de Jonathan la niña se acercó a él y lo fijamente como si se diera cuenta que el era su padre. Días después, ya la noticia de que Jonathan ten
Agitado y sudoroso, me detengo frente a la puerta, mi corazón late desenfrenado y ansioso, al entrar y verla despierta, me comporte como un niño pequeño que corrió a los brazos de su madre.Me aferro a ella Emocionado, feliz, de saber que volvió a mi lado, tantas noches sin poder conciliar el sueño al pensar en que ella me dejaría, el solo pensarlo me dolía, arrebatándome el sueño al no tener paz.—Oye.. me asfixias..Ella golpea mi espalda para que me aleje. —Lo siento. —fue lo único que salió de mi boca. —Lamento todo lo que te he hecho.—¿Y ahora que mosca te pico a ti?. —se ríe burlesca. —¿Tanto me extrañaste?.—Como no te lo puedes imaginar. —musito besando su mano.—No sabia que el Demonio tenía sentimientos tan fuertes por mi. —su mano se aferra a la mía.—Bueno, es lo que provocas. —la observo sin creer que estaba devuelta. —Te he dicho lo hermosa que eres.—Estas loco. —frunce el ceño. —Soy un desastre, mírame.—Para mi eres bella. —estaba por darle un beso pero ella me detie
—Los declaro marido, y mujer.Ella se abalanzó sobre mí haciendo que todos se levantarán aplaudiendo mientras gritan emocionados por al fin haber hecho realidad lo que tanto habíamos planeado por mucho tiempo.—Felicidades..—¿Qué haces aquí?. —maricela se cruza de brazos al ver a Jonathan.—Oye, oye, cálmate. —levanta ambas manos en rendición. —¡Dios!, Porque siempre estás a la defensiva.—Porque se me da la gana, ¿Algún problema con eso?.—Tranquila mi fiera. —dije riéndome. —Jonathan ya no es el mismo de antes..—Aja, si como no. —espeto incrédula. —Este, ni con un milagro podría cambiar.—Tampoco tú. —dijo Jonathan en burla y a Maricela le molestó.—Mira si has..—¡Papá!..Maricela se queda estupefacta al ver mi hermano se agacha para cargar en sus brazos a Anastasia, ella frota sus ojos sin creer lo que había visto.—¿Acaso estuve en coma por varios años?. —dijo sin salir de su sorpresa.—¿Recuerdas a la empleada que te dijo que tuvo una aventura con Jonathan?.—No me digas que..
Ha sido un camino difícil para mí, pues, desde el día en que me casé con mi ex esposo Alan, creí que todo sería perfecto al creer que el era el indicado. Siempre soñé con encontrar al hombre perfecto, el hombre que me llevaría al altar y me juraría amor hasta la muerte pero, me di cuenta que nada es para siempre y que todos los hombres son iguales.Los primeros meses fue perfecto o eso creía yo, él era amoroso conmigo y detallista, me regalaba flores y todos los viernes me llevaba a cenar o íbamos al cine y luego terminábamos la noche con sexo o para mi hacer el amor. Pero todo eso cambió, el se volvió tan distante y frío conmigo, incluso hasta en la cama y ya estaba cansada de que todos los días sean lo mismo.La gota que rebalsó mi tolerancia fue cuando lo encontré en casa de mi vecina desnudo con su pene erecto dentro de su asquerosa vagina. ¡Ja!, y lo peor es que el muy cínico y sinvergüenza me dijo: "Mari, no es lo que piensas". ¡Como que no es lo que pienso!", ¡si tiene su verg
—Maricela, recoja mis cosas personales y envíelas a mi casa. —Si señor Smith. Hoy era el último día de mi jefe, el señor Rodrigo, y después del fin de semana tendré otro jefe. Tomando las recomendaciones de Jessica, en el transcurso de la semana visité varias empresas y deje mi currículum por si no soportaba al hijo del ogro que es mi jefe. —Jessica.. —Dígame señor. Fruncí el ceño por la extraña manera de verme. —Durante estos cuatro años, demostró ser una secretaria competente. Espero que sea así cuando Sebastián esté como su jefe. —carraspeó su garganta aclarando su voz —Por hoy puede irse temprano. Me quedo perpleja mientras lo sigo con mi vista hasta entrar al ascensor. "¡Pero que mierdas fue eso!". Vaya manera la suya de agradecerme por mis años soportando su amargura, sus reproches y sus demandas. Acaso es difícil decir: "Es una excelente secretaria siga así o un gracias al menos". Es más ni sé si lo decía por felicitarme o por agradecido, la verdad es que ni se si