Javier tomó aire profundamente, su rostro reflejaba la confusión que aún sentía al recordar la conversación de sus padres. —Bueno... al principio, parecían estar discutiendo lo de siempre, ¿saben? Se reclamaban que el amor entre ellos ya no existía, cosas que, la verdad, siempre han estado ahí, como un murmullo constante en la casa. Pero luego... luego dijeron algo diferente, algo que nunca había oído antes.Hizo una pausa, buscando las palabras adecuadas. —Mi mamá le decía a mi papá, con una voz llena de... no sé, como de rabia contenida: "Si no fuera por tu padre, yo jamás me hubiera casado contigo. ¡Siempre quise más a ese don nadie!".Richard y yo nos miramos, la sorpresa reflejada en nuestros rostros. ¿A qué "don nadie" se refería?Javier continuó, su voz ahora más temblorosa. —Y entonces mi papá le gritó, con una furia que nunca le había escuchado: "¡Sí, porque de paso le diste un hijo!".Un silencio denso cayó sobre la cabaña. Mi corazón dio un vuelco. Un hijo... ¿mi madre habí
Leer más