Cordelia El aire estaba frío, pero todo mi cuerpo ardía. Veía cómo los lobos atacaban a Zeiren, uno tras otro, y cada mordida, cada rasguño, era como si lo sintiera yo misma.Mi pecho se contraía con un dolor insoportable. Mi corazón latía tan fuerte que pensaba que iba a romperse. Zeiren estaba ahí, luchando por protegerme, y yo no podía hacer nada.—¡Zeiren! —grité, mi voz apenas audible sobre el rugido de los lobos.Intenté moverme, correr hacia él, hacer algo, lo que fuera... Pero mis piernas no respondían. "¡No puedo verlo morir!" pensé desesperada. "¡No puedo perderlo! ¡No así!""Déjame entrar..."Una voz resonó en mi mente, tan clara y fuerte que por un momento pensé que alguien estaba detrás de mí. Me giré, pero no había nadie."¿Quién eres?" pregunté en mi mente. El miedo de haberme vuelto loca se instaló en mi pecho."Soy tu destino" respondió la voz, suave pero imponente. "¿Vas a dejarlo morir, Cordelia?"Mi cuerpo se tensó."No… no quiero que muera. Pero, ¿qué puedo hac
Ler mais