Todos os capítulos do En los brazos de mi caballero Santoro: Capítulo 61 - Capítulo 70
100 chapters
Capítulo61
Esta vez, Clarissa ni siquiera se molestó en llamarla "mamá". Lo que Caterina había hecho dejaba claro que nunca la había respetado. Si le tuviera un mínimo de consideración, no habría contactado a los periodistas sin consultarle antes ni la habría engañado para que viniera a la mansión solo para informarle después de su decisión. Pero así era como actuaba la familia Ferrucho. Cuando Luca fue fotografiado con Giulia en el auto, en lugar de enfrentar la situación, su reacción inmediata fue presionarla para que diera explicaciones públicas y limpiara el escándalo. El ambiente en la sala se volvió tenso. Enrico y Caterina se miraron. Ambos sabían que la situación se había complicado. Si Clarissa no cooperaba, toda la preparación que habían hecho sería en vano. Mientras tanto, Luca, sentado en la mesa, miraba su celular de vez en cuando. Ni siquiera estaba prestando atención a la conversación. De repente, se puso de pie y dijo con un tono despreocupado: —Salgo un momento,
Ler mais
Capítulo62
Caterina ni siquiera creía en sus propias palabras. Enrico comía en silencio, como si todo esto fuera un asunto entre Caterina y Clarissa, como si no tuviera nada que ver con él. Sin embargo, su mirada, aunque discreta, se posaba en Clarissa constantemente, lo que dejaba claro que él también valoraba su presencia. Clarissa bajó la mirada, sacó un montón de fotos de su bolso y las tiró sobre la mesa. Había tantas que se dispersaron al instante. Las imágenes daban vergüenza: En algunas, solo puro y literal porno, una pareja desnuda se besaba calientemente en la ducha. En otras, se abrazaban en una mesa de billar. Había fotos en oficinas, en distintos lugares, follando o abrazándose. Las mujeres cambiaban, pero el hombre siempre era el mismo: Luca. Un montón de fotos explícitas, una pequeña montaña de pruebas innegables. Clarissa habló con calma, su mirada perdida hacia la nada.—Enrico, Caterina. Se detuvo un segundo antes de continuar. —Estas son algunas de las “
Ler mais
Capítulo63
Luca miraba a Giulia, la mujer frente a él, con una cara que solo reflejaba preocupación y devoción. Giulia era la persona que siempre tenía en su mente. Los hombres tienen esa debilidad: cuando ven a una mujer frágil y bonita, su instinto protector de daddy a socorrer una princesa en apuros se despierta. Más aún cuando Giulia se parecía tanto a Sofia. Incluso si hubiera querido reconocer que era su culpa, su parecido con Sofia le impedía hacerlo. —Giulia, siempre has estado de mi lado. Giulia pensaba en él todo el tiempo, pero Clarissa… No solo coqueteaba con otros hombres, sino que, además, en la exposición de arte, se atrevió a humillar públicamente a Sofia y a Giulia, haciendo que su trabajo perdiera toda credibilidad. Como si fuera poco, ahora hasta se había mudado de la casa. El recuerdo de ese día, cuando Maxence le tiró agua con una botella, lo hizo molestarse. Pero, por ahora, necesitaban que Clarissa aclarara ante la prensa que no había problemas en su matrimoni
Ler mais
Capítulo64
— Solo tengo un hermano, Gabriel. Así que nunca me vuelvas a decir hermana Clarissa. No tenemos ningún parentesco para que me llames de ese modo. La voz de Clarissa era cortante. —Si tienes algo que decir, espérate mejor a que terminemos de comer. Deja comer con tranquilidad a los demás y no jodas. Giulia solo pudo asentir, queriendo dar lástima. Luca, en un intento de consolarla, le buscó un asiento junto a él y, con cuidado, le sirvió un tazón de caldo de pollo. Cinco años de matrimonio, y Luca jamás había hecho algo así por Clarissa. ¿En qué momento se le había ocurrido tener esperanza de que fuera diferente? Ya estaban a punto de divorciarse, y aun así, por un instante, se había permitido esperar algo más. Clarissa bajó la vista. Con el cuchillo y el tenedor cortó el pastel en su plato, pero al probarlo, su expresión cambió un poco. Esencia de rosa. Sintió una punzada de ironía. La familia Ferrucho quería complacerla, eligiendo con mucho cuidado cada plato par
Ler mais
Capítulo65
—¿No es esto lo que realmente querías? ¿Convertirte en la esposa de Luca gracias a tu hijo? Clarissa miró fijamente a Giulia. La joven parecía indefensa, con la cara pálida y los ojos llenos de lágrimas, como si fuera una víctima. Pero Clarissa sabía que todo era una farsa. Detrás de esa máscara de fragilidad, podía ver claramente algo oculto en su mirada, podía ver que se estaba burlando de ella. Clarissa extendió la mano y agarró con fuerza el mentón de Giulia, inclinándose hacia ella. Giulia sintió que su respiración se volvía agitada, y con voz temblorosa la llamó: —Hermanita Clarissa… Clarissa sonrió con desprecio. —Tratar de engañarme a estas horas del partido es ridículo, mosquita muerta. Su tono era suave, pero sus palabras eran como golpes. —No necesitas abortar. Ten a tu hijo. Vas a ser la esposa de Luca. Cada palabra era como una daga al corazón de Giulia. —Lo sabes bien. Ahora que estás embarazada de su hijo, Luca hará cualquier cosa por ti y por s
Ler mais
Capítulo66
Enrico y Caterina pensaron que Luca se había vuelto loco. ¿Acaso podía hacer lo que se le diera la gana? ¿Tener un hijo y luego dárselo a Clarissa? ¿Existía un mundo donde Clarissa lo aceptaría? Ella tenía pruebas de su infidelidad y, con un hijo como prueba irrefutable, podía pedir el divorcio en cualquier momento. Si eso pasaba, la familia Ferrucho quedaría sin nada. Giulia también sintió que Luca había perdido la cabeza. Su plan era claro: usar su “embarazo” para obligar a Luca a divorciarse de Clarissa y quedarse con ella. Pero nunca imaginó que, en lugar de eso, Luca insistiera en no divorciarse y además quisiera darle el bebé a Clarissa. No podía decir que no sin delatarse, así que solo pudo seguir actuando y fingir que estaba de acuerdo, con lágrimas en los ojos y una actitud de mártir. Luca estaba decidido. Ni Enrico ni Caterina pudieron detenerlo. No hubo otra opción más que cancelar la rueda de prensa y ofrecer un par de regalos a los periodistas para evit
Ler mais
Capítulo67
Giulia se agarró el vientre y soltó un grito de dolor. Y tal cual hubiese recibido un golpe, cayó al suelo, y entre sus piernas comenzó a formarse una gran mancha de sangre. Gota a gota. La sangre corría por el pavimento. El rojo intenso se reflejaba en los ojos de Clarissa. —¡Ayúdenme por el amor de Dios… me duele mucho…! —Giulia lloraba, su voz daba escalofríos. —Mi… bebé… Mi criaturita… Se encogió sobre sí misma, temblando, con las manos presionando su vientre con desesperación. Su piel estaba pálida como el papel, los ojos enrojecidos, las lágrimas corriendo sin control por su cara. Extendió una mano temblorosa, tratando de agarrarse del tobillo de Clarissa. —Clarissa… por favor… ayúdame… La sangre empapaba su vestido blanco, formando una mancha roja que parecía una rosa gigante. Clarissa se quedó inmóvil, su cuerpo no respondía. Su mente intentaba entender lo que acababa de pasar. No había hecho nada. Giulia se había caído sola. Pero, en medio de su
Ler mais
Capítulo68
Luca entró furioso a su oficina, empujando la puerta con fuerza. Sin hacer caso a los intentos de su secretaria por detenerlo, salió corriendo del edificio del Grupo Financiero Ferrucho. Los empleados se miraron, nerviosos. Todos podían adivinar la razón de su enojo. Cuando llegó al hotel, Luca llamó de inmediato a Clarissa. La rabia lo impedía pensar con claridad, y su voz era intimidante. —¡Clarissa! ¡Baja ahora mismo! Tenemos que hablar ahora mismo Ella no podía escapar de esto. Necesitaba darle una explicación. Pero Clarissa no tenía intención de huir. Bajó a la entrada y, al salir por la puerta del hotel, notó que había muchas más personas de lo normal en los alrededores. Entre ellos, varios periodistas. Habían encontrado la ubicación gracias al video. Y era pues lo que habían estado esperando. El corazón de Clarissa se apretó por un instante. No tuvo tiempo de reaccionar antes de que Luca diera un paso al frente y agarrara con fuerza su muñeca. La e
Ler mais
Capítulo69
Si Giulia en verdad había perdido al bebé, entonces fue a propósito para culpar a Clarissa y poner a Luca en su contra. Pero si nunca había estado embarazada y las pruebas de sangre no coincidían con su ADN… Entonces, Clarissa no pensaba dejarla ir tan fácilmente. Le haría pagar por lo que había hecho. En el hospital. Giulia estaba recostada en la cama, sosteniendo un espejo frente a su cara. Sus ojos hinchados por el llanto reflejaban una frialdad que daba miedo. Lentamente, bajó la mano y acarició su vientre plano, soltando una risa burlona. —Después de todo esto, Luca por fin verá lo “cruel” que es Clarissa. —Es tan impulsivo… Seguro que no dudará en divorciarse de ella. Se pasó los dedos por los párpados enrojecidos. Había llorado tanto que sus ojos ardían, pero no le importaba. En cambio, de su garganta salieron carcajadas ahogadas, llenas de satisfacción. ¿De verdad estaba embarazada? Por supuesto que no. Luca siempre era cuidadoso, asegurándose de que t
Ler mais
Capítulo70
Sin embargo, aún no podía dejar que sus padres se enteraran. Desde temprano, Luca había dado órdenes en el Grupo Financiero Ferrucho para que nadie mencionara el escándalo de las redes sociales frente a Enrico. Esperaría hasta después del divorcio para explicarlo en persona. Después de todo, esta vez, la culpa en serio era de Clarissa. Estaba seguro de que su padre lo entendería. Mientras tanto, en internet, el escándalo de la familia Ferrucho estaba en boca de todos. Incluso en la sala de descanso del edificio del Grupo Santoro, los empleados no paraban de hablar sobre el tema mientras comían. —¿Oyeron lo que pasó con los Ferrucho? —¿Cómo no saberlo? Luca siempre presumía de su esposa como si fuera un trofeo. Y ahora míralo, ella le ha causado un desastre. —Yo escuché que la mujer que perdió al bebé era su amante. —Incluso si lo era, ¡no puedes hacer algo tan cruel! ¿Golpear a alguien que está embarazada? Eso es un delito en cualquier lugar. Algunos empleados se
Ler mais
Digitalize o código para ler no App