CAPÍTULO 95: LA DUCHAHazelEntro a la ducha con una sensación extraña en el pecho. Estoy feliz porque Erik despertó, porque está aquí, pero al mismo tiempo… algo no está bien. Siento que me oculta algo. Como si una sombra se cerniera sobre nosotros, invisible, pero presente, afectándome de una manera que aun no comprendo.El agua tibia cae sobre mi piel, arrastrando la sangre seca y el cansancio acumulado. Cierro los ojos y suspiro, dejando que el vapor me envuelva en una burbuja momentánea de calma.Solo nos quedan tres semanas para encontrar a nuestro hijo. Si no llegamos a tiempo…—No, Hazel, no pienses en eso —murmuro, apretando los párpados con fuerza.Me quedo quieta bajo el agua, deseando que la vida fuera tan simple como este momento. Que el mundo no fuera tan cruel. Que Erik y yo pudiéramos existir sin todo lo que nos atormenta.De pronto, escucho la puerta del baño abrirse.Lo sé sin necesidad de verlo. Es Erik. Su aroma, su esencia, su presencia… todo en él es inconfundibl
Leer más