***Alaric ha retomado su vida rutinaria: su trabajo y yo. Cree que estamos bien, pero sé que no lo estamos. La conversación de aquel día dejó sus sentimientos al descubierto, pero no trajo claridad, solo silencio. Desde entonces, evita el tema a toda costa porque le duele, y yo he elegido callar.Pero hoy es diferente. Hoy es mi partida, y él no lo sabe. Me iré lejos, donde ni él ni nadie pueda encontrarme.Tres pares de ojos me observan, expectantes, intentando descifrar la razón detrás de esta reunión repentina. Son mis amigos, pero algo en mi actitud los inquieta.—Quiero despedirme —rompo el silencio, y sus rostros se tensan—. Me voy, chicos. Me voy lejos.Thea lleva una mano a la boca, igual que Alonso, mientras Marcus parece petrificado. Es como si mis palabras los hubieran golpeado.—¿Hablas en serio? —La voz de Thea tiembla—. Lin, dime que esto es una broma.—Claro, tiene que serlo —interviene Alonso, aunque su tono delata inseguridad—. ¿Verdad, Lin?.Los tres esperan una ris
Leer más