—¿Por qué tendría que saber yo algo del asesinato de ese mujercita?— Ignacio contestó de manera grosera, —¡Fuera de aquí! Tengo cosas más importantes que hacer.—No me pienso mover de acá hasta que me aclares las cosas, Ignacio.— Ariadne elevó la viz, —¿Puedes contestar la pregunta? No te estoy acusando, solamente necesito saber si sabes algo.—Yo no sé nada de ella. No puedo decirte ni siquiera quién la mató, simplemente porque no tengo ni la menor idea de quién lo hizo.— Él la miró fijamente, —¿Ahora te puedes retirar?—Si llegas a saber de alguien o de alguna información que me ayude a resolver el caso de nuestra madre, no dudes en llamarnos, ¿Sí?— La que habló en esta ocasión fue Yesenia. Ignacio asintió de manera pensativa y señaló la puerta para que las hermanas Lizbrook salieran.Una vez afuera de la oficina de Ignacio Longwoth. Ariadne entró en el ascensor y se llevo una mano al puente de la nariz al mismo tiempo que mantenía sus ojos cerrados.—Yo tengo la seguridad de que qu
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