¿Frescura? Claro, para Carlos, quien ha vivido tantos años en esa calma, cada encuentro íntimo conmigo debe de ser una novedad.Sonreí con ironía. Cada vez que intentaba controlarme para no dejarme llevar, Carlos, como un explorador astuto, iba preparando trampas, buscando arrastrarme a su juego. Como adultos, podía asumir que todo era un juego, uno que aceptaba sin problema, pero al final, él lo hacía todo por Sara. Me usó, me manipuló, y simplemente disfrutó la "novedad" que representaba estar conmigo. Carlos era mejor que yo en aparentar, en sostener una mentira.Pensaba que yo había creado un plan perfecto, que al acercarme a Carlos y buscar su protección podría irritar a Sara lo suficiente para llevarla ante la justicia. Pero no había considerado que Carlos ya había elaborado un juego mucho más elaborado. Su caballerosidad, su dulzura, sus palabras, cada uno de sus gestos era una pieza esencial en su engaño. Supongo que es justo. Yo tampoco fui sincera con él. Entonces, ¿por q
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