Todos los capítulos de DIVORCIADA DEL CEO ARREPENTIDO: ¡Vuelve con mis Trillizos!: Capítulo 91 - Capítulo 100
292 chapters
Capítulo 91: Él… ¿tu esposo?
CRISTINE FERRERA—¿Evento de caridad? —preguntó Eliot cuando vio que estaba luchando en la cama para que el vestido me cerrara. ¿Sería una opción conseguir una faja?—¡Sí! Hice una nueva amiga que es enfermera y creí que sería buena idea ayudarla —contesté mientras forcejeaba. Me levanté de la cama y comencé a dar brinquitos como si eso fuera suficiente para que todo se acomodara dentro del vestido y el cierre subiera. Tanto estrés y la falta del gimnasio comenzaban a pasarme factura. Eliot se puso detrás de mí y con gentileza me ayudó. Al parecer el problema no eran los posibles gramos extras, sino que el vestido no estaba bien acomodado. Cuando terminó me dio un suave beso en el cuello que me hizo estremecer. Volteé hacia él completamente ruborizada y su sonrisa victoriosa me hizo apretar los labios. —Te ves hermosa… —dijo con dulzura antes de tomar mi mano y besarla. ¿Qué hacía? ¿Le agradecía? ¿Guardaba silencio? Sentía que habíamos entrado a una etapa donde parecíamos adolesce
Leer más
Capítulo 92: Solo amigos
CRISTINE FERRERAEl resto de la reunión estuve con Eliot, comportándonos como pareja, bailando y bebiendo, disfrutando, aunque me dolía el corazón que él usara su anillo de bodas y yo… aún no, aunque eso no parecía molestarle en lo más mínimo. En verdad se estaba esforzando por darme tiempo para asimilarlo. En varias ocasiones quise acercarme a Carla y hablar con ella de Luca, incluso quise involucrar a Eliot para que él también dijera algo sobre su primo, pero solo tensaba sus mejillas y apretaba sus dientes. No quería ser parte de este juego infantil y poco ético, y lo comprendí, además, no es que Carla se prestara mucho, cada vez que nos acercábamos ella se mostraba nerviosa, Eliot parecía incomodarla y no entendía por qué, así que terminamos yéndonos de la fiesta y pasando el resto de la tarde en casa de Zafrina quien, como siempre, se había encargado de consentir a mis pequeños hasta el hartazgo. Al llegar al departamento, quien nos recibió fue Luca, estaba caminando de un lado
Leer más
Capítulo 93: Luca debe elegir
LUCA MAGNANILa noticia me desarmó, me dejó pasmado, en blanco. No sabía qué pensar, mucho menos cómo sentirme. Nunca compartí un beso o una caricia con Carla, pero… eso era lo más curioso, porque… sin tener esa clase de contacto físico yo me sentía tan bien a su lado, como jamás me había sentido con alguna mujer. En completo silencio subí al auto, dejando atrás las risas cantarinas de Carla mientras ella se alejaba con sus compañeras. Cristine tomó su lugar a mi lado y parecía precavida. Solo me observaba como mamá asustada, esperando que me desmoronara, que llorara y dijera cuanto me había afectado todo esto, pero la verdad era que seguía en «shock». ¿Cómo pude ilusionarme tanto con una mujer que nunca to
Leer más
Capítulo 94: No me dejes sola
LUCA MAGNANI—¿Tú qué crees? —respondió Berenice con rencor y se sacudió mis manos de sus hombros, pero de nueva cuenta casi cae y tuve que volverla a sujetar—. ¡No me toques! ¡Te odio!—¡¿A mí?! —pregunté molesto y con una sonrisa que se transformó en bufido. —¿Sabes cuánto tiempo esperé para poder tener un acercamiento con Eliot? ¿Sabes cuánto deseaba ser la mujer que curara su corazón? —Sentí tanta lástima por ella que todo mi odio se había esfumado—. Yo lo amo desde hace años y siempre he estado para él, nunca me he rehusado a ayudarlo en lo que sea, aunque pasen años sin que me mande un solo recado o me haga una llama
Leer más
Capítulo 95: Pasando la noche en las sábanas de un patán
LUCA MAGNANIAl principio su boca parecía tiesa y torpe, como si jamás hubiera besado a un chico, pero después comenzó a seguir los movimientos de mis labios, dejando que el beso se volviera tan profundo y demandante como yo quisiera. En cuanto mi lengua invadió su cálida boca, algo en mí se encendió. Sus pequeñas manos se posaron en mi pecho mientras las mías comenzaban a recorrer su cuerpo. Cuando me di cuenta ya estaba sobre ella, luchando por no aplastarla con mi cuerpo mientras metía las manos debajo de su falda y acariciaba el encaje de sus bragas. Sus jadeos endulzaban mi oído y la bestia deseosa de sexo que vivía en mí despertó. ¿Cuánto tiempo me había privado de las mieles de una mujer por creer que Carla sería mía? Había c
Leer más
Capítulo 96: Dos mujeres, una sola elección
LUCA MAGNANIAntes de que pudiera contestar, Carla entró aprovechando que estaba completamente paralizado. —¿Qué haces aquí? ¿Cómo me encontraste? —pregunté angustiado. No tenía ni siquiera para ofrecerle un vaso de agua. Cuando me di cuenta ya se había sentado en el pequeño comedor. —Bueno, no fue difícil dar con el paradero de Luca Magnani. Tu apellido te precede y te seguirá por siempre —contestó con una sonrisa tímida y las manos en su regazo. Sus ojos expresaban algo que no lograba comprender del todo. Me senté delante de ella y esperé—. No sé si… ya te dijo… Cristine… —¿Qué estás casada? —La voz me salió envenenada con resentimiento, aunque sabía que no era su culpa—. Sí, ya lo sé. Escondió su mano con el anillo. Su mirada apesadumbrada se movió por la mesa y suspiró con melancolía. —Lo siento, eres un chico muy bueno y pensé que tenía que venir a hablar contigo… —Quiso sonreír, pero su gesto se volvió aún más de agonía y por un momento quise acercarme a ella y abrazarla, q
Leer más
Capítulo 97: ¡Yo no soy un juguete!
LUCA MAGNANIMe dolía la cabeza, la conversación con Carla me daba vueltas y aún no sabía cómo confrontar a Berenice. Llegué hasta mi departamento y al cerrar la puerta me recargué sobre ella e intenté respirar sin hiperventilar. Había tanto silencio que pensé que Berenice ya se había ido. Me acerqué a la habitación con toda la iniciativa de pedirle disculpas por lo que había ocurrido en la noche y, por lo menos, ofrecerme a llevarla a su casa, claro, en el trayecto comprar una píldora de emergencia porque… pues… sí, aunque siempre cargo un condón en la cartera, bueno… no lo usé. ¿Cómo es posible que alguien tan experimentado como yo se le olvidara algo tan importante? Quería echarle la culpa al alcohol, pero… algo me decía que había algo más. Quería sentirla por completo, su aliento, su aroma, su calor, deseaba no perderme de ninguna de esas sensaciones, no quería barreras entre nuestros cuerpos, me sentí dominado y quise embriagarme de ella. De recordarlo se me aceleraba el corazó
Leer más
Capítulo 98: Derek Magnani
LUCA MAGNANI—¿Dónde carajos estás? —preguntó Eliot furioso a través del teléfono. Me encantaba como siempre guardaba sus sentimientos y se mantenía ecuánime y serio. Lo único que era capaz de expresar, por lo menos hacia mí, era odio y reproche. —¿Preocupado por mí? —Aunque intentaba sonar juguetón como siempre, me sentía de la mierda. Había tomado todo un día para quitarme de la cabeza todas esas ideas autodestructivas. Mi corazón y mi cabeza se partían en dos y me empezaba asfixiar. —Cristine es quién en verdad está preocupada por ti —siseó furioso. Me alegraba que estuviéramos a kilómetros de distancia, de seguro ya me habría golpeado si estuviéramos frente a frente—. Desapareciste. —Tenía cosas que hacer… —contesté viendo el psiquiátrico delante de mí. Estaba lleno de incertidumbre y mi corazón se aceleraba. La hora de la comida se acercaba y sabía que no tardaba en salir Carla con sus amigas de las instalaciones. —¿Cómo alcoholizarte? ¡Incluso los niños estaban preocupados p
Leer más
Capítulo 99: El hermano gemelo malvado y perdido de Eliot
LUCA MAGNANI—No sé mucho, pero lo que dicen quienes han trabajado con Derek desde que llegó, es que está ahí gracias a un «hueco» legal —dijo Carla mientras rascaba suavemente en la mesa de la cafetería. Habíamos decidido salir del psiquiátrico y la llevé a la cafetería con sus amigas, pero ella decidió tomarse ese tiempo conmigo para hablar del hermano gemelo malvado y perdido de Eliot. —¿Hueco legal? —pregunté desconcertado e hicimos una pausa en cuanto la mesera dejó la comida de Carla y mi café en la mesa. No era como que me gustara la idea de que también la mesera se enterara del chisme. —Sí, aunque no tengo acceso a
Leer más
Capítulo 100: ¿Verdad o reto?
LUCA MAGNANIDebía de admitir que ver a Eliot sosteniendo solo con sus manos a Cristine era sorprendente, ella tenía tanto los brazos como las piernas recogidas. ¿Cómo podía mi primo cargar su peso solo con sus manos? ¿No decían que los locos eran muy fuertes? ¡¿Y si él era el verdadero loco y Derek era solo una víctima?!... Nah… imposible. El único pecado de ese enojón era eso, tener un carácter de mierda. Le dio un beso en la mejilla a Cristine antes de dejar que ella por fin tocara el suelo y… mientras era atacado por esas pequeñas bestias, me sentí celoso: Celoso por como Cristine veía a Eliot, con admiración y cariño. Celoso por como Eliot era estoico y decidido al saber que solo la quería a ella y que no había otra mujer para él, pese a la adversidad se mantuvo firme y no se conformó con alguien más. Celoso de lo que tenían. —Creo que se murió —dijo Gerardo en cuanto notó que ya no me movía. —Solo mi alma… —contesté con melancolía y la mirada perdida en el techo. Entonce
Leer más