Andrew notó algo extraño en Dorelia, varias veces, había visto una extraña luz que emanaba su cuerpo. Él no podía explicar, a qué se debía esta iluminación corpórea. Cuando abrazaba a su hijo o cuando hacía una demostración de amor, esta luz se acrecentaba. Sin embargo, los celos lo acongojaban. Temía perder el amor de Dorelia. Su inseguridad era terrible. En tiempo pasado, él había experimentado con otras mujeres, este sentimiento, pero a ellas no las amaba, era solo atracción física.En este caso, estaba en juego, el amor de una mujer maravillosa. El gran amor de su vida. Eso representaba, perder la felicidad. A ella no le importaba su cicatriz horrible, tampoco se había casado con él por el dinero, pues ella pensaba que él era un desposeído. Lo amaba por lo que él era, no por lo que poseía. Dorelia no tenía el concepto preformado de posesión y posición de este mundo. Era un ser iluminado, con mucha evolución y mucho amor para dar.Era hermosa físicamente, demasiado y por eso, Andr
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