Miro a la mujer frente a mí, el principio de mi fin, la causa de mis malas decisiones, para enfrentarla. Necesitaba aclarar lo que recién ha dicho, porque si es una provocación… si no es verdad lo que dice, puedo calmarme, pero, si no… la mataré de la manera más tortuosa posible.— Sabes cómo actuar, por poco creo que son mis hijos. — digo sonriendo y eso solo hace que ella vuelva a reírse.— Ay, Danell. Si debo escoger que Castagnoli me gusta más, diría que eres tú. De los tres, eres el más fácil de manipular, el que más rápido me cree, aunque no eres el que me mejor me trata. Pero, no te culpo, fue ella quien te cambio.>> Si no hubiese aparecido la malnacida, no estuvieras ahora al borde de la muerte. Porque me hubiese compadecido de ti, habría tratado de dejarte como mi amante o uno de mis administradores. Pero, es claro qu
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