18. Fuego contra Fuego
Dayleen estaba de rodillas en el suelo, las esposas rúnicas ardían contra su piel, como si juzgaran su alma con cada segundo que pasaba. Aun así, levantó la cabeza, miró directo al Alfa Tauriel y a los ancianos, con los ojos llenos de rabia contenida.—Nací en la manada de Fuego como hija ilegítima de una Omega, una guerrera que peleó valientemente en las Batallas de Nolor hace quince años, por las que logramos desterrar a los pícaros de toda Aryndell hacia las fronteras. Y aún así con gran hazaña, acabo relegada a ser parte de la muchedumbre por embarazarse de alguien que no era del Fuego —dijo con asco—. Mi madre me crió sola, escondiendo el nombre de mi padre por miedo a lo que me harían si supieran. Durante años creí que había muerto en batalla, pero ahora sé que fue parte de algo más grande. Un secreto que ella protegió hasta su muerteUna de las ancianas, la de ojos de tierra húmeda, ladeó el rostro con curiosidad.—¿Cómo murió tu madre?Dayleen cerró los ojos por un segundo, pe
Leer más