La noche pasaba y yo no podía dejar de pensar en todas las actividades que podríamos realizar como familia. Sentía que tenía tantas ideas que por eso, podría lograr muchas cosas. Por ello, en el silencio de mi habitación, comencé a realizar planes de viajes a playas, ríos, museos, plazoletas, parques temáticos, parques de diversiones y demás cosas que nunca había visitado de niño.Quería ser un buen padre y esposo, aunque ella no me viera como su esposo y ya no me pueda aferrar a la idea de que estamos casados. Ya había pasado esa página donde debíamos ser esposos y aunque deseaba que si lo fuéramos, cosas como esas dejan de ser importantes cuando lo que quiero es disfrutar con mi familia.Amaría volver a ser su esposo, pero, serlo o no, no cambia el momento divertido que como familia sin duda, vamos a experimentar. Por eso, programo todo
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