Nueva York, Mansión Villarreal.—¿¡Por qué Channel?— pregunta Fabrizio, su corazón está totalmente roto, la mujer a la que ama, en la que se refugió entregando su corazón, lo está dejando —baja la voz Fabrizio, recuerda que estamos en casa de mis padres— habla ella nerviosa, ni tan siquiera siente culpa—¡Dame una m*****a explicación!— el hombre se está desesperado, Channel lo agarra de la mano y lo lleva a su habitación para tener más privacidadAl estar en la habitación, él se suelta de su agarre, fija su mirada en ella.—Fabrizio, yo... Lo lamento, tú me conoces, sabes cómo soy, tengo que dejarte —¿¡Pero en que falle!?— pregunta él y no puede evitar llorar, él no tiene familia, y Channel lo es todo para él—en nada, tú eres por decirlo asi, el hombre perfecto, solo que...—¿¡Solo qué, habla, no te quedes callada!?—necesito expandir mi empresa, necesito progresar —¿¡Qué!?— él no puede creerlo —no pienses que no te amo, porque si es así, con toda mi alma, pero necesito progresar,
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