41. La promesa
Abigail Nos vamos a México. No puedo creer que el tiempo haya pasado tan rápido, que ya sea hoy el día en que nos iremos a visitar la sede del hotel del que ahora Christopher es socio mayoritario. Verifico por tercera vez que todo en mi maleta esté en orden y estoy a punto de hacer lo mismo nuevamente con mi billetera, cuando el grito proveniente de la parte baja me detiene. —¡Llorona como no bajes ya te juro que yo mismo te saco de ese cuarto! Pongo mis ojos en blanco, pero cierro la maleta de rapidez y me apresuro a salir de la habitación, lo último que quiero es que Christopher suba las escaleras. Luego de los días tan… movidos, que tuvimos, el dolor de sus piernas regresó, leve, pero lo hizo, por lo que los últimos tres días no se levantó de la silla de ruedas y dejó que le hiciera sus terapias en las mañanas y la noche. Lo dificl fue convencerlo de que no podíamos tener otra ronda de sexo salvaje, aunque la verdad si me moria de ganas por repetir. —Ya, ya estoy bajando. — l
Leer más