La alegría volvió al cuerpo de Demetrio. Sentía de nuevo esa esperanza de vivir, y luchar, no solo por ser guapo o no, era más que eso, era sociedad, una sociedad que seguramente lo iba a humillar hasta cansarse, ya lo había experimentado el día anterior con apenas unos niños curiosos que lo miraban, y definitivamente para el italiano, que era un hombre sensible a los sucesos, por todo el dolor que había pasado, era demasiado que soportar.El médico le dijo que después de la operación estaría un par de semanas vendado, y que no podía salir a la luz solar, además de mucho descanso; cosa que retrasaría de nuevo la boda de Evangelina, y era algo que Anderson no quería tolerar, no quería seguir viviendo y durmiendo con Laureti sin estar casada, en el tiempo de antes era muy conservadora, y aún quedaba un poco de ese miedo o respeto por ahí en su interior.Salieron contentos del consultorio. A Eva le costó convencer a Demetrio de casarse primero y después ser operado, pero, después de unos
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