Narra David de MaríaEse día al salir del Tec, me fui al negocio de mi madre ya que ahí me esperaba mi princesa. Me apresuré en llegar, las horas que había estado sin ella, me parecieron internas. Ya estaba desesperado por verla. Llegué con lo primero que me encuentro, me dejó inmóvil. Era mi madre que jalaba de los cabellos a Petra sacándola de la tienda, diciéndole muchas chorradas, me sorprendí, desconocía que mi madre pudiera tener un arranque de esa magnitud.Pero algo tuvo que hacer Petra, para que mi madre perdiera los estribos, yo conocía a mi madre perfectamente, era una mujer demasiado paciente, mediadora y le gustaba estar en buenos términos con las demás personas, aunque estas fueran bastante pesadas, ella sabía cómo llevarse con esa tipo de gente. Alondra la miraba consternada igual que yo y al verme llegar, ella corrió a abrazarme. Yo por supuesto la recibí en mis brazos. Seguimos viendo cómo se desarrollaba la escena. No quería interferir, mi madre era una adulta y sabí
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