Maritza vio ingresar a Valentino a su habitación en la clínica, lo noto extraño, algo había cambiado en él, antes la miraba con ojos de lástima, pero al verlo ahora sentía que había rabia escondida en ellos y mucha, mucha decepción.No sabía lo que había pasado, pero tenía que aguantar, no era hora de quebrarse y mucho menos de rendirse.—Tino, volviste —pronuncio muy bajo, como si le costara hablar.Él la quedo mirando por unos segundos, como tratando de adivinar qué es lo que se traía en mente, finalmente respondió. —Solo vine por las chicas, tenemos cosas que hacer.—Si papi, gracias — Grito Gia dando brinquitos.—Gia, no saltes, es de mala educación, que van a pensar las demás ´personas, ¿Qué no te eduque correctamente? —Hablo Maritza tratando de calmar su frustración, esperaba que al menos él se quedara un poco más.—Que más van a pensar Maritza, pensaran que son niñas, que están muy sanas, de otra manera no estarían brincando.Ella le quedo mirando y se quedó callada, definitiva
Leer más