Todo en la vida de Lorena parecía perfecto, tanto a nivel personal como profesional, era muy feliz y se veía preparada para dar el siguiente paso, pues últimamente sentía que tan sólo le faltaba ser madre para sentirse completamente realizada.No es que con Iker le hiciera falta nada, se lo daba todo, sin pedir nada a cambio, sin enfadarse o por lo menos, ella no lo notaba, pues ni perdía las formas ni dejaba de ser un caballero con ella, pero sentía un vacío que nunca antes había sentido y que no tenía nada que ver con Iker, ya que era un verdadero y bondadoso amigo, un confidente, siempre dispuesto para escucharla, un cómplice y un compañero de vida que siempre estaba a su lado, un esposo abnegado y un amante fiel y generoso, que era capaz de olvidarse de él, para que ella disfrutara.Se había levantado con un dolor tremendo en el estómago, ya le había pasado otras veces y era dolor premenstrual, por la fecha que era. Otras veces, se le había calmado masturbándose, y
Leer más