Una sensación de vació tan puro que casi dudaba de estar vivo invadió todo su ser, por un momento las emociones lograron apagarse por completo y su respiración, se cortó. El dolor que en su momento había sido tan insoportable y desgarrador provocandole quejarse tan alto que hasta que sus pulmones se quedaran sin aire ahora era nada más que la misma nada. El olfato, el tacto y sus sentidos en general parecían haberse quedado dormidos. Aunque tenía miedo no era que pudiese hacer mucho, casi juraría que estaba atrapado en su propio cuerpo, convirtiéndolo en su jaula.Escuchaba pero no sabía donde estaba pues el ruido se intensificaba. Lentamente logró divisar algunos individuos entre la vaga visión y escuchar múltiples voces en un bullcio que hacía estática en su cabeza, fu
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